Online
Conectarse
En total hay 21 usuarios en línea: 0 Registrados, 0 Ocultos y 21 Invitados :: 1 Motor de búsqueda
Ninguno
El record de usuarios en línea fue de 166 durante el Dom Nov 13, 2016 9:10 pm
Last Post
Censo
Staff
Página 1 de 2.
Página 1 de 2. • 1, 2
Creado por Lina Crestfall Lun Dic 14, 2015 3:12 pm
Todo comenzó bien, el día apenas si tomaba posesión de la isla y los rayos del sol entraban por la ventana del pequeño cuarto que la fémina había alquilado recién llegando al lugar. No tenía mucho tiempo ahí, un par de días solamente y el mero placer de pasar algunos días de descanso pues hasta donde había tomado el barco que la había llevado ahí se la había pasado cazando y rastreando pistas de todo aquel pirata que se le cruzara en su camino y por si fuera poco tratar de memorizarse sus nombres y rostros. Maldecía a cada momento el tener que trabajar en aquello pero no había mas… Realmente era lo que más dejaba dinero y sí, no negaba, había momentos en que podía disfrutarlos en demasía lo que tenía por trabajo y cualquier excusa era nula ante el gozo de pelear.
Se había dado una buena ducha y vestido para salir. Dejó todo lo que tenía encima para pasar inadvertida como mera civil y descansar de aquellas cacerías que parecían nunca tener fin. Tras salir entre pasos cortos había llegado a un mercado, viendo y saboreando algunas de las dulces frutas que ahí había Lina merodeaba entre los puestos buscando algo que comprar. No fue hasta que uno de los comerciantes se acercó a ella ofreciéndole gentilmente una manzana de un rojo profundo, ella encantada aceptó regalándole una amplia sonrisa. Disponiéndose a seguir curioseando dio vuelta por una de las calles antes de chocar contra alguien por no andar con cuidado. Su manzana cayó y ella retrocedió un par de pasos sobando su nariz algo adolorida. - Perdón, no me he fijado… - Susurró bajo antes de levantar su mirada ruborizándose al instante… Aquellos rojos cabellos le encantaron, su color favorito por mucho estaba sobre la cabeza de aquel hombre algo alto… Se quedó sin aliento por un instante asimilando lo que había pasado y su manzana… Rodó saliendo de la vista de ella mas no dio mucha importancia, su atención se posó totalmente en aquellos hilos rojos.
Se había dado una buena ducha y vestido para salir. Dejó todo lo que tenía encima para pasar inadvertida como mera civil y descansar de aquellas cacerías que parecían nunca tener fin. Tras salir entre pasos cortos había llegado a un mercado, viendo y saboreando algunas de las dulces frutas que ahí había Lina merodeaba entre los puestos buscando algo que comprar. No fue hasta que uno de los comerciantes se acercó a ella ofreciéndole gentilmente una manzana de un rojo profundo, ella encantada aceptó regalándole una amplia sonrisa. Disponiéndose a seguir curioseando dio vuelta por una de las calles antes de chocar contra alguien por no andar con cuidado. Su manzana cayó y ella retrocedió un par de pasos sobando su nariz algo adolorida. - Perdón, no me he fijado… - Susurró bajo antes de levantar su mirada ruborizándose al instante… Aquellos rojos cabellos le encantaron, su color favorito por mucho estaba sobre la cabeza de aquel hombre algo alto… Se quedó sin aliento por un instante asimilando lo que había pasado y su manzana… Rodó saliendo de la vista de ella mas no dio mucha importancia, su atención se posó totalmente en aquellos hilos rojos.
Lina Crestfall
Hoja de personaje
Nivel:
(24/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
Creado por Kronos Mar Dic 15, 2015 4:49 pm
La isla Karate, una isla que sin duda alguna era interesante de visitar. Por lo que se comentaba, y por lo que iba viendo a medida que me adentraba en el lugar, era una isla habitada única y exclusivamente por luchadores, personas que acudían a los múltiples "dojos" que había por toda la ciudad para aprender el arte de la lucha. Cada "dojo" enseñaba un arte distinto, o eso daban a entender los rótulos (anunciando cada uno una distinta rama de la lucha, como vendría a ser el Kung-fu, el Karate, etc...). La razón de mi presencia en esa isla no iba mas allá de recolectar información. Veras... cazar no era tan fácil como parecía. No era cuestión de ir paseando por la isla y encontrarte a tu blanco, podía darse el caso pero son casos excepcionales de gente con mucha, muchísima suerte. Cazar requería recolectar información, estudiar a tu blanco, valorar tus posibilidades... después atacar. No todos lo hacían de esa forma, sin embargo, me parecía mas eficiente. En esa ocasión perseguía a un tal Webles "Cicatrices". Era pirata con cierto renombre, con la suficiente recompensa para fijarlo como objetivo. Un rumor sobre su paradero en aquella isla puso en marcha aquél viaje.
Lo primero que hice al embarcar había sido alquilar una posada. Un lugar donde descansar iba a ser, cuanto menos, necesario. La tintineante bolsa de berries que tenia iba vaciándose cada vez mas. Las cosas se complicarían en los próximos días si no daba con Webles. Provisiones, maldita sea. Me había olvidado de comprar mas. El macuto, antes lleno de manzanas, peras, pan, queso... en fin, multitud de alimentos, ahora yacía vacío. Desde la ventana, miré hacia fuera. Entre los dojos había una calle que conducía a la plaza. Allí acudiría. No fue hasta que, diez minutos mas tarde, no se encontraba rebuscando entre frutas y hortalizas lo que necesitaba. Con lo básico ya comprado, me dispuse a retirarme. Al girar, choqué contra una chica de estatura (unos centímetros por debajo) mas baja que yo. La recorrí con la mirada. Su pelo, como el mío, era de color rojo. Tez pálida y músculos ejercitados. ¿Luchadora? Quizá, nadie que no usara los brazos para luchar los ejercitaría. Eso, o era una culturista. Posiblemente había dado con alguien natal de la isla, una persona capaz de informarme. - No pasa nada. Dime, ¿eres de aquí? -
Lo primero que hice al embarcar había sido alquilar una posada. Un lugar donde descansar iba a ser, cuanto menos, necesario. La tintineante bolsa de berries que tenia iba vaciándose cada vez mas. Las cosas se complicarían en los próximos días si no daba con Webles. Provisiones, maldita sea. Me había olvidado de comprar mas. El macuto, antes lleno de manzanas, peras, pan, queso... en fin, multitud de alimentos, ahora yacía vacío. Desde la ventana, miré hacia fuera. Entre los dojos había una calle que conducía a la plaza. Allí acudiría. No fue hasta que, diez minutos mas tarde, no se encontraba rebuscando entre frutas y hortalizas lo que necesitaba. Con lo básico ya comprado, me dispuse a retirarme. Al girar, choqué contra una chica de estatura (unos centímetros por debajo) mas baja que yo. La recorrí con la mirada. Su pelo, como el mío, era de color rojo. Tez pálida y músculos ejercitados. ¿Luchadora? Quizá, nadie que no usara los brazos para luchar los ejercitaría. Eso, o era una culturista. Posiblemente había dado con alguien natal de la isla, una persona capaz de informarme. - No pasa nada. Dime, ¿eres de aquí? -
Kronos
Hoja de personaje
Nivel:
(2/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel |
Creado por Lina Crestfall Miér Dic 16, 2015 8:06 pm
Parpadeó un par de veces al ver al hombre frente a ella. Rió con cierta gracia al verle y agradecía no fuese nadie agresivo como para saltar a ella y reclamarle su torpeza. Lo primero que pudo observar fueron sus rasgos, no lo negaba, ante sus ojos parecía y se veía un hombre bastante atractivo, su tranquilidad y la manera en la que le había respondido la obligó a tacharlo como un joven educado y con un suave movimiento de su cabeza negó para seguir abrir un poco sus labios y responder ante las palabras del contrario. - No, no son de aquí, disculpa por andar sin cuidado pero iba a comprar unas cu… - Cayó en cuenta de que la manzana que había estado en su mano desde un principio había desaparecido perdiendo totalmente la atención ante las palabras del contrario. Agachó la cabeza comenzando a buscar el fruto rojizo pero a simple vista no pudo encontrarlo, cosa que la puso un poco de mal humor renegándose su propia torpeza.
Tras unos segundos se buscar con la mirada encontró aquello que buscaba, sonriendo se hincó apoyando su rodilla derecha en el piso para tomar lo que le pertenecía y con un suave movimiento de su mano lo limpió, volviendo su vista al contrario le sonrió y algo apenada desvió la mirada. - Mi manzana.. Se cayó… - Murmuró dando una explicación que si bien era innecesaria para el contrario para ella era más que necesaria para justificar un poco su torpeza. - ¿Tú eres de aquí?.. O… ¿Por qué la pregunta? - cuestionó con curiosidad arqueando un poco su ceja manteniendo su atención en él.
Tras unos segundos se buscar con la mirada encontró aquello que buscaba, sonriendo se hincó apoyando su rodilla derecha en el piso para tomar lo que le pertenecía y con un suave movimiento de su mano lo limpió, volviendo su vista al contrario le sonrió y algo apenada desvió la mirada. - Mi manzana.. Se cayó… - Murmuró dando una explicación que si bien era innecesaria para el contrario para ella era más que necesaria para justificar un poco su torpeza. - ¿Tú eres de aquí?.. O… ¿Por qué la pregunta? - cuestionó con curiosidad arqueando un poco su ceja manteniendo su atención en él.
Lina Crestfall
Hoja de personaje
Nivel:
(24/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
Creado por Kronos Sáb Dic 26, 2015 7:48 pm
El asesino perfecto no tiene amigos, sino objetivos. La muerte era un arte, y Kronos lo ejecutaba a la perfección ya sea en una callejuela oscura o en las estancias de una gran base de marines. En aquella ocasión el objetivo, o muriente (tal y como le llamaba Kronos, por que siempre acababan muertos), era Webles "Cicatrices". Pirata, cuya cabeza tenia un precio de un millón de Berries. No era un precio exagerado, pero era lo suficiente para mantener la barriga llena durante unas semanas. Según fuentes de indudable credibilidad, el pirata en cuestión se hallaba en aquella isla. Y allí estaba yo, con ambas pistolas enfundadas y listo para acribillarle cuando le encontrara. La mujer con la que había tropezado, muy atractiva por cierto, no era de la isla. En parte, no importaba. Dejó la frase sin terminar y su mirada se dirigió al suelo. Invadido por la curiosidad, seguí su mirada hasta el suelo. Segundos después, encontró lo que buscaba: una manzana. - Si, se te cayó. Pero no importa, no te la comas, no es saludable comer cosas del suelo. Toma. Extendí mi mano y la metí dentro del macuto. De él saque una manzana, a diferencia de la que ella tenia, esta era verde.
La faceta del chico amable. Precioso. Adoraba mi hipocresía y teatro. "El asesino perfecto no tiene amigos, sino objetivos." No quería tener amigos, no quería conocer a nadie, no quería caerle bien a nadie. No podía. Un amigo significa tener un vinculo, tener un vinculo significa proteger a esa persona. Significaba debilidad. Daños colaterales. Cuando decidí comenzar con el oficio amargo (cazarecompensas, asesino, ejecutor, llámalo como quieras) sabia lo que eso significaba. De hecho, solo había una razón tras todo eso: mis padres. Venganza, tenia una sed de venganza enorme. Ellos, el gobierno, los perros a los que, por ahora, les trabajaba. Quería vengarme, si, pero no era idiota. Bajo la sombra de un gobierno podía consolidar mi poder, mantenerme en las sombras, pasar desapercibido.
La miré durante unos breves instantes. - ¿Conoces Webles "Cicatrices"? Bueno, pues por eso pregunto. Me han dicho que estaba por esta isla. Si fueras de aquí te habría pedido que me comentaras los rumores que rondan por esta isla. Seguramente habrá, una persona como él no puede pasar desaprecibida. De todos modos, gracias. Me giré sobre mis talones y di un paso adelante, dispuesto a irme.
La faceta del chico amable. Precioso. Adoraba mi hipocresía y teatro. "El asesino perfecto no tiene amigos, sino objetivos." No quería tener amigos, no quería conocer a nadie, no quería caerle bien a nadie. No podía. Un amigo significa tener un vinculo, tener un vinculo significa proteger a esa persona. Significaba debilidad. Daños colaterales. Cuando decidí comenzar con el oficio amargo (cazarecompensas, asesino, ejecutor, llámalo como quieras) sabia lo que eso significaba. De hecho, solo había una razón tras todo eso: mis padres. Venganza, tenia una sed de venganza enorme. Ellos, el gobierno, los perros a los que, por ahora, les trabajaba. Quería vengarme, si, pero no era idiota. Bajo la sombra de un gobierno podía consolidar mi poder, mantenerme en las sombras, pasar desapercibido.
La miré durante unos breves instantes. - ¿Conoces Webles "Cicatrices"? Bueno, pues por eso pregunto. Me han dicho que estaba por esta isla. Si fueras de aquí te habría pedido que me comentaras los rumores que rondan por esta isla. Seguramente habrá, una persona como él no puede pasar desaprecibida. De todos modos, gracias. Me giré sobre mis talones y di un paso adelante, dispuesto a irme.
Kronos
Hoja de personaje
Nivel:
(2/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel |
Creado por Lina Crestfall Mar Dic 29, 2015 5:45 pm
Triste, sí. Lamentable que aquella adorada fruta con lo que le costaba sacar algo de dinero para conseguir algo de comida y siendo un regalo maldecía que esta terminara en el suelo, estaba a nada de levantarla del piso cuando escuchó las palabras del de cabellos carmesí, levantó su mirada y su cuerpo parpadeando un par de veces siguiendo con su mirada las acciones de él. Enterneció su mirada y sonrió algo apenada extendiendo su mano para tomar la fruta que, ahora, era de otro color. - Gracias. - Susurró bajo regalándole otra sonrisa más tranquila , suspiró y llevó la manzana a su abdomen tomándola con ambas manos.
Pero de un momento a otro aquel agradable momento cambió sin más. Entrecerró su mirada, sin duda conocía el nombre, como cazadora era obvio que de menos rumores investigaba de menos los locales para tener noción de quien estaba ahí. La mirada de él no le agradó para nada, correspondiendo esta de manera fría, seria y tajante. - Curioso. - Susurró aventando la manzana hacia arriba y volviéndola a atrapar viendo como el pelirrojo se disponía a retirarse. - Quizá una persona común no te quiera dar información, pero más curioso aún que alguien como tú busque. ¿Eres de la marina? Que esos soldaditos se la andan siempre juntos pero estás solo y tal parece que esa finta de buena persona que tienes no es de lo más certera… ¿O sí?.. - Agregó retrocediendo un par de pasos. - O eres un soldadito o eres un cazador.. quizá yo tengo lo que buscas, o quizá no. - Terminó por decir girándose y dándole la espalda, no iba y no pretendía seguirlo. Limpió la manzana contra sus ropas y dispuso a morderla mientras comenzaba a alejarse de él.
Pero de un momento a otro aquel agradable momento cambió sin más. Entrecerró su mirada, sin duda conocía el nombre, como cazadora era obvio que de menos rumores investigaba de menos los locales para tener noción de quien estaba ahí. La mirada de él no le agradó para nada, correspondiendo esta de manera fría, seria y tajante. - Curioso. - Susurró aventando la manzana hacia arriba y volviéndola a atrapar viendo como el pelirrojo se disponía a retirarse. - Quizá una persona común no te quiera dar información, pero más curioso aún que alguien como tú busque. ¿Eres de la marina? Que esos soldaditos se la andan siempre juntos pero estás solo y tal parece que esa finta de buena persona que tienes no es de lo más certera… ¿O sí?.. - Agregó retrocediendo un par de pasos. - O eres un soldadito o eres un cazador.. quizá yo tengo lo que buscas, o quizá no. - Terminó por decir girándose y dándole la espalda, no iba y no pretendía seguirlo. Limpió la manzana contra sus ropas y dispuso a morderla mientras comenzaba a alejarse de él.
Lina Crestfall
Hoja de personaje
Nivel:
(24/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
Creado por TR-3.5H Jue Feb 25, 2016 12:27 pm
Un #$%& mensaje, la misión encomendada al peligroso, carnicero, despiadado, eficiente, terrorífico, pirómano, sádico y genial pacifista TR-3.5H era entregar un #$%& mensaje, como de costumbre para mantener un poco el disimulo iba cubierto hasta arriba con telas marrones que cubrían su enorme cuerpo mecánico mientras mantenía sus llamas tan apagadas como le era posible a pesar de su indignación, de no ser porque las mentes utilizadas para crear la conducta de TR-3.5H no eran 100% de psicópatas, ya hubiera estallado en una peligrosa cólera mecánica.
Por suerte para el mundo, el pacifista aún tenía en alta prioridad la obtención de ingresos y por lo mismo no arruinaría una misión que le garantizaba en sueldo solo por lo humillante de dicha misión, además de que podría servir para "demostrar lealtad" a la armada, cosa que también le favorecería a la larga para obtener las embarcaciones de mayor envergadura que la armada revolucionaria estaba dispuesta a proveer a sus capitanes y oficiales de rangos superiores.
Para colmo de bondades no era una mensaje del tipo que le encantaban al pacifista, era una simple carta sin gracia, no una caja llena de ratones muertos, o la mascota de la familia en la puerta de entrada, solo un sobre que al llegar al destino dejo pasar por debajo de la puerta y siguió su camino sin darle mayor relevancia además de cerciorarse de no equivocarse de dirección, ni siquiera se había molestado en ser particularmente sigiloso, solo había pasado frente la caza y arrojado con apenas algo de disimulo la carta debajo de la puerta.
-Ah... que decepción, ¿En qué momento me convertí en el servicio de correo?... Bueno, trabajo terminado, supongo que puedo ver de divertirme por aquí con algo...- Comento con una de las tantas voces que utilizaba su modulador de voz, no era la voz de ultratumba sino más bien, un hombre rudo enmascarado detras de aquella demoniaca máscara que era realmente su rostro, con aquellos cuernos rojos como la sangre que tanto llamaban la atención sobresaliendo de la capucha que utilizaba.
Por un momento se preguntó qué tanta habilidad tendría para cortejar mujeres, que cortejar no es lo mismo que barajar ni cortar, así que tal vez no fuera tan bueno para ello, como nueva demostración de lo bizarra y trastornada que era la "mente" de aquel ser cuyo comportamiento era dictado por el comportamiento de decenas de delincuentes peculiares, el autómata encaro a la primera mujer relevante que vio, una mujer pelirroja, de metro setenta, parecía tener cierto grado de entrenamiento físico, por lo mismo no era una de las presas con las que el cruel ser se divertía, así que no le generaría ninguna tentación inesperada.
La figura cubierta de más de dos metros se acercó a la fémina y con una leve reverencia se extendió el inicio de su cortejo -Muy buenas tardes tenga usted hermosa dama, disculpe si la interrumpo, pero cruzando la calle no pude evitar notar tan hermosa criatura como es usted, casi un ángel de fuego caído del cielo, me gustaría saber si está dispuesta a aceptar una bebida y una plática más amena conmigo.- El tono de voz tenía el eco característico de provenir de detrás de una máscara sin embargo era la de un hombre cordial y amable lleno de pasión en lo que decía.
Por suerte para el mundo, el pacifista aún tenía en alta prioridad la obtención de ingresos y por lo mismo no arruinaría una misión que le garantizaba en sueldo solo por lo humillante de dicha misión, además de que podría servir para "demostrar lealtad" a la armada, cosa que también le favorecería a la larga para obtener las embarcaciones de mayor envergadura que la armada revolucionaria estaba dispuesta a proveer a sus capitanes y oficiales de rangos superiores.
Para colmo de bondades no era una mensaje del tipo que le encantaban al pacifista, era una simple carta sin gracia, no una caja llena de ratones muertos, o la mascota de la familia en la puerta de entrada, solo un sobre que al llegar al destino dejo pasar por debajo de la puerta y siguió su camino sin darle mayor relevancia además de cerciorarse de no equivocarse de dirección, ni siquiera se había molestado en ser particularmente sigiloso, solo había pasado frente la caza y arrojado con apenas algo de disimulo la carta debajo de la puerta.
-Ah... que decepción, ¿En qué momento me convertí en el servicio de correo?... Bueno, trabajo terminado, supongo que puedo ver de divertirme por aquí con algo...- Comento con una de las tantas voces que utilizaba su modulador de voz, no era la voz de ultratumba sino más bien, un hombre rudo enmascarado detras de aquella demoniaca máscara que era realmente su rostro, con aquellos cuernos rojos como la sangre que tanto llamaban la atención sobresaliendo de la capucha que utilizaba.
Por un momento se preguntó qué tanta habilidad tendría para cortejar mujeres, que cortejar no es lo mismo que barajar ni cortar, así que tal vez no fuera tan bueno para ello, como nueva demostración de lo bizarra y trastornada que era la "mente" de aquel ser cuyo comportamiento era dictado por el comportamiento de decenas de delincuentes peculiares, el autómata encaro a la primera mujer relevante que vio, una mujer pelirroja, de metro setenta, parecía tener cierto grado de entrenamiento físico, por lo mismo no era una de las presas con las que el cruel ser se divertía, así que no le generaría ninguna tentación inesperada.
La figura cubierta de más de dos metros se acercó a la fémina y con una leve reverencia se extendió el inicio de su cortejo -Muy buenas tardes tenga usted hermosa dama, disculpe si la interrumpo, pero cruzando la calle no pude evitar notar tan hermosa criatura como es usted, casi un ángel de fuego caído del cielo, me gustaría saber si está dispuesta a aceptar una bebida y una plática más amena conmigo.- El tono de voz tenía el eco característico de provenir de detrás de una máscara sin embargo era la de un hombre cordial y amable lleno de pasión en lo que decía.
TR-3.5H
Hoja de personaje
Nivel:
(25/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel |
Creado por Lina Crestfall Jue Feb 25, 2016 6:09 pm
La tarde pasaba con cierta tranquilidad y el tiempo hacía de lo suyo. Poco apoco el atardecer se hacía presente y con ello el matiz rojo inundó con recelo aquel hermoso cielo tiñendo las nubes de de un hermoso naranja y la luz amarillenta era la que iluminaba las calles ya. Lina no tenía ni idea de dónde se encontraba en ese momento, su poco sentido de orientación a veces le hacía malas jugadas y para su mala suerte esta era una de tantas. - Jo.. - Susurró bajo levantando los brazos para estirarse sin dejar de caminar. Quizá entre tantas estructuras y gente podría encontrar algo que se le hiciera familiar y poder volver a la posada junto al puerto donde se encontraba actualmente, sin embargo ante ella un.. ¿Hombre?.. Una figura masculina de más de dos metros se hizo presente plantándose ante ella. Por inercia levantó su rostro bajando lentamente sus brazos y, arqueando una ceja escuchó atentamente lo que él tenía que decirle. Cualquiera podría elogiar aquella voz que si bien imponía era agradable al oído… Pero siendo sinceros… a nadie le daba confianza un par de cuernos del mismísimo color sangre que salían por sobre la capucha. - Ah…- Abrió sus labios posando su vista en los cuernos ajenos.
Parpadeando un par de veces arqueó su ceja derecha y ladeó un poco su rostro. No es que sintiese vergüenza o algo por el estilo, pero cualquiera que se atreviera elogiar a una amazona tan ruda como ella debía tener los pantalones bien puestos para hacerlo. - Em… Gracias por los halagos, grandulón. - Sonrió viéndole de reojo y cruzando sus brazos ladeó su rostro. - Dame un buen motivo para no sospechar de ti y quizá acepte un buen trago, porque siendo sincera, creo haber escuchado de alguien con tu… - Calló y mordió su propio labio inferior. ¿Qué tal que si se trataba de alguien del que había escuchado recientemente? Si ella misma se delataba se ponía en peligro. - Vale, vale, perdón. No se me da muy bien tratar con los hombres. - Se encogió de hombros fingiendo total demencia y sonriendo con algo de tranquilidad. - Me dijeron que aquí sirven buenos tragos, te acepto uno o dos. - Asintió. Quizá más de cerca podía corroborar sus sospechas, y quien sabe, quizá hasta cobrar el buen pago de este mes.
Parpadeando un par de veces arqueó su ceja derecha y ladeó un poco su rostro. No es que sintiese vergüenza o algo por el estilo, pero cualquiera que se atreviera elogiar a una amazona tan ruda como ella debía tener los pantalones bien puestos para hacerlo. - Em… Gracias por los halagos, grandulón. - Sonrió viéndole de reojo y cruzando sus brazos ladeó su rostro. - Dame un buen motivo para no sospechar de ti y quizá acepte un buen trago, porque siendo sincera, creo haber escuchado de alguien con tu… - Calló y mordió su propio labio inferior. ¿Qué tal que si se trataba de alguien del que había escuchado recientemente? Si ella misma se delataba se ponía en peligro. - Vale, vale, perdón. No se me da muy bien tratar con los hombres. - Se encogió de hombros fingiendo total demencia y sonriendo con algo de tranquilidad. - Me dijeron que aquí sirven buenos tragos, te acepto uno o dos. - Asintió. Quizá más de cerca podía corroborar sus sospechas, y quien sabe, quizá hasta cobrar el buen pago de este mes.
Lina Crestfall
Hoja de personaje
Nivel:
(24/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
Creado por TR-3.5H Vie Feb 26, 2016 3:32 pm
La actitud inicial por parte de la humana parecía tan a la defensiva como la de cualquier persona con algo de cordura a la cual se le acercara una figura, totalmente cubierta a la cual solo se le podía ver una máscara demoniaca de la cual sobresalían dos enormes cuernos sacados de las pesadillas de algún hombre que temía ir al infierno y ver allí a seres de similar apariencia a la máscara que formaba la cabeza del pacifista allí presente.
Sin embargo en medio de lo que podría considerarse una negación a la cordial oferta de la aún anónima criatura, pero aquella fémina declaro abiertamente que era más un problema con el género masculino que con él en particular, como solo se trataba de una mujer que no era del tipo con que el disfrutaría de jugar el pacifista no tenía toda su capacidad de procesamiento enfocada en prestarle atención a cada mínimo detalle de su comportamiento, así que ante la sugerencias de parte de la pelirroja el pacifista asintió una vez y miro en la dirección indicada por la fémina.
Mientras se dirigía al lugar dejo salir desde su ser aquella voz masculina, de porte tan noble y agradable de la cual estaba haciendo gala ante aquella dama de origen e identidad desconocidos, con un gesto tan cortes pero simple y rápido como le fue posible se presentó ante la muchacha -Puede llamarme Kaede, Kaede Shirayuma.- ¿Por qué el pacifista habría optado por utilizar un nombre como aquel, sencillo, era un nombre que pertenecía a un individuo masculino sobre cuya cabeza no había un wanted hasta donde el supiera.
A quien perteneciera realmente aquel nombre no era de verdadera importancia para el pacifista, pero con suerte la mujer a la cual estaba invitando no conocería la identidad real de aquel individuo y si lo conocía, pues vería que hacía, no desperdiciaría recursos en calcular posibilidades irrelevantes con aquella mujer.
Una vez dentro del local busco una buena mesa para ambos y gesticulo con su mano de la cual por un momento emergieron aquellas metálicas garras que podría confundirse con guantes metálicos propios de un guerrero que gastaba tiempo en revisar que lucieran de aquella forma. -Tome lo que prefiera hermosa señorita, yo invito, y no se preocupe por el dinero pida a placer- El pacifista ni siquiera se había molestado en revisar cuidadosamente el lugar en donde había entrado, podría incluso ser una base de la marina y él hubiera dicho lo mismo.
Sin embargo en medio de lo que podría considerarse una negación a la cordial oferta de la aún anónima criatura, pero aquella fémina declaro abiertamente que era más un problema con el género masculino que con él en particular, como solo se trataba de una mujer que no era del tipo con que el disfrutaría de jugar el pacifista no tenía toda su capacidad de procesamiento enfocada en prestarle atención a cada mínimo detalle de su comportamiento, así que ante la sugerencias de parte de la pelirroja el pacifista asintió una vez y miro en la dirección indicada por la fémina.
Mientras se dirigía al lugar dejo salir desde su ser aquella voz masculina, de porte tan noble y agradable de la cual estaba haciendo gala ante aquella dama de origen e identidad desconocidos, con un gesto tan cortes pero simple y rápido como le fue posible se presentó ante la muchacha -Puede llamarme Kaede, Kaede Shirayuma.- ¿Por qué el pacifista habría optado por utilizar un nombre como aquel, sencillo, era un nombre que pertenecía a un individuo masculino sobre cuya cabeza no había un wanted hasta donde el supiera.
A quien perteneciera realmente aquel nombre no era de verdadera importancia para el pacifista, pero con suerte la mujer a la cual estaba invitando no conocería la identidad real de aquel individuo y si lo conocía, pues vería que hacía, no desperdiciaría recursos en calcular posibilidades irrelevantes con aquella mujer.
Una vez dentro del local busco una buena mesa para ambos y gesticulo con su mano de la cual por un momento emergieron aquellas metálicas garras que podría confundirse con guantes metálicos propios de un guerrero que gastaba tiempo en revisar que lucieran de aquella forma. -Tome lo que prefiera hermosa señorita, yo invito, y no se preocupe por el dinero pida a placer- El pacifista ni siquiera se había molestado en revisar cuidadosamente el lugar en donde había entrado, podría incluso ser una base de la marina y él hubiera dicho lo mismo.
TR-3.5H
Hoja de personaje
Nivel:
(25/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel |
Creado por Lina Crestfall Mar Mar 01, 2016 1:36 pm
Caminó con suma tranquilidad siendo sus pasos seguidos por el contrario. El bajar la guardia a estas alturas no era algo que por ni de broma se le cruzaría por la mente a la luchadora. Desvió un momento su mirada hacia él cuando por cortesía y bien entendido de la etiqueta se presentó hacia la de cabellos de fuego. - ¿Kaede? - Cuestionó con cierta curiosidad entrecerrando su mirada la cual volvió al frente. - Pues mi nombre es Lina Crestfall. -Sonrió notablemente y como si le acusara con la mirada le observó de soslayo. - Y soy una cazarrecompensas. - Acotó con cierta firmeza y con toda la intención de que esa mera frase calara al contrario.
Volviendo a ver al frente terminaron por llegar al local entrando primeramente ella y seguida de él se quedó en silencio permitiendo que el otro buscara una buena mesa para ambos. No podía negar la suave sensación de incomoda en la pelirroja mas en silencio le siguió terminando por sentarse primero y pidiendo un poco de vino para charlar solamente. Cruzándose de brazos se dirigió hacia el contrario y con una sonrisa confiada pero tranquila comenzó a dirigirse a él. - Realmente eres agradable. - Musitó dejando salir una suave risilla. - Cora que, si bien es bastante llamativo en un hombre da muchísimo qué pensar, por ejemplo… Tu nombre me suena, creí haberlo visto en alguno de los posters de wanted que hay cerca de la base temporal que tiene aquí la marina. - Sonrió un poco más y tras sus palabras su copa de vino fue servida frente a ella. - ¿A qué te dedicas? Cuéntame. Estoy algo aburrida.- Sin perder de vista al revolucionario un un pequeño sorbo deleitándose con el dulce sabor de su bebida esperando la respuesta y ver la reacción del contrario.
Volviendo a ver al frente terminaron por llegar al local entrando primeramente ella y seguida de él se quedó en silencio permitiendo que el otro buscara una buena mesa para ambos. No podía negar la suave sensación de incomoda en la pelirroja mas en silencio le siguió terminando por sentarse primero y pidiendo un poco de vino para charlar solamente. Cruzándose de brazos se dirigió hacia el contrario y con una sonrisa confiada pero tranquila comenzó a dirigirse a él. - Realmente eres agradable. - Musitó dejando salir una suave risilla. - Cora que, si bien es bastante llamativo en un hombre da muchísimo qué pensar, por ejemplo… Tu nombre me suena, creí haberlo visto en alguno de los posters de wanted que hay cerca de la base temporal que tiene aquí la marina. - Sonrió un poco más y tras sus palabras su copa de vino fue servida frente a ella. - ¿A qué te dedicas? Cuéntame. Estoy algo aburrida.- Sin perder de vista al revolucionario un un pequeño sorbo deleitándose con el dulce sabor de su bebida esperando la respuesta y ver la reacción del contrario.
Lina Crestfall
Hoja de personaje
Nivel:
(24/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
Creado por TR-3.5H Miér Mar 02, 2016 5:05 pm
La pelirroja había delatado tanto identidad como su oficio, el oficio era un problema para la situación actual ya que por más de que se hubiera tragado el nombre falso tal vez aún podría reconocerle por los carteles de wanted si terminaba de ver el resto del cuerpo del pacifista, o tal vez nunca los hubiera visto -Es un placer poder conocer el nombre de tan bella mujer de tan temerario oficio- comento con aquella voz galante que no delataba ni miedo, ni preocupación ni otra cosa distinta de placer y caballerosidad.
Con un gesto de la mano evito que le sirvieran vino a él -Agua estará bien, ya no tomo- Dijo al mozo antes de volver a enfocar su atención en la mujer que tan tranquilamente decía que el nombre seleccionado por el pacifista pertenecía a alguien con precio sobre su cabeza, reactivando nuevamente la mayor cantidad de sistemas posibles sin elevar demasiado su temperatura el autómata pudo encontrar que el nombre que había elegido pertenecía a uno de los famosos "Ouka Shichibukai" que por más de que tuvieran inmunidad diplomática seguían siendo delincuentes.
-Si, puede ser que mi nombre sea similar al de algún delincuente, después de todo no es para nada extraño que se den esta clase de coincidencias.- Comento tranquilamente mientras veía llegar el agua que había pedido. -Espero que mi oficio no cause demasiada gracia en una mujer de su porte, no es por prejuzgar pero probablemente muchos de sus compañeros de profesión se reirían de mí, soy un juguetero arruinado y convertido en guardaespaldas, es obvio por mi tamaño que puedo dar mucho miedo, pero en realidad no tengo casi experiencia en combate, por eso uso esta mascara y armadura para espantar a la gente problemática y evitarme los conflictos ... bueno y por otras razones más personales.- Comento con un dejo de nostalgia en aquella voz, como quien recuerda a un ser querido que ya no se encuentra en este mundo, claramente era una mentira para el pacifista, pero su voz sonaba tan sincera como la utilizada hasta el momento.
Con un gesto de su mano descargo lo dicho como quien quiere olvidar viejos demonios, el gesto no era tan natural como hubiera deseado, pero se podía adjudicar a algún problema de salud o de incomodidad por la armadura que había admitido tener, sin embargo el gesto nuevamente revelo la punta de los dedos del pacifista -Pero bueno, basta de mí, dulce doncella ¿Podría contarme un poco más de usted? y que opina de lo que le he comentado hasta ahora, ya que sería una pena no escuchar lo que una joven de sus características tiene que decir sobre mi persona.- mientras hablaba el autómata nuevamente reactivo más de sus sistemas elevando su temperatura corporal, con suerte y la mujer no lo tocaría y nadie se enteraría de esto.
Con un gesto de la mano evito que le sirvieran vino a él -Agua estará bien, ya no tomo- Dijo al mozo antes de volver a enfocar su atención en la mujer que tan tranquilamente decía que el nombre seleccionado por el pacifista pertenecía a alguien con precio sobre su cabeza, reactivando nuevamente la mayor cantidad de sistemas posibles sin elevar demasiado su temperatura el autómata pudo encontrar que el nombre que había elegido pertenecía a uno de los famosos "Ouka Shichibukai" que por más de que tuvieran inmunidad diplomática seguían siendo delincuentes.
-Si, puede ser que mi nombre sea similar al de algún delincuente, después de todo no es para nada extraño que se den esta clase de coincidencias.- Comento tranquilamente mientras veía llegar el agua que había pedido. -Espero que mi oficio no cause demasiada gracia en una mujer de su porte, no es por prejuzgar pero probablemente muchos de sus compañeros de profesión se reirían de mí, soy un juguetero arruinado y convertido en guardaespaldas, es obvio por mi tamaño que puedo dar mucho miedo, pero en realidad no tengo casi experiencia en combate, por eso uso esta mascara y armadura para espantar a la gente problemática y evitarme los conflictos ... bueno y por otras razones más personales.- Comento con un dejo de nostalgia en aquella voz, como quien recuerda a un ser querido que ya no se encuentra en este mundo, claramente era una mentira para el pacifista, pero su voz sonaba tan sincera como la utilizada hasta el momento.
Con un gesto de su mano descargo lo dicho como quien quiere olvidar viejos demonios, el gesto no era tan natural como hubiera deseado, pero se podía adjudicar a algún problema de salud o de incomodidad por la armadura que había admitido tener, sin embargo el gesto nuevamente revelo la punta de los dedos del pacifista -Pero bueno, basta de mí, dulce doncella ¿Podría contarme un poco más de usted? y que opina de lo que le he comentado hasta ahora, ya que sería una pena no escuchar lo que una joven de sus características tiene que decir sobre mi persona.- mientras hablaba el autómata nuevamente reactivo más de sus sistemas elevando su temperatura corporal, con suerte y la mujer no lo tocaría y nadie se enteraría de esto.
TR-3.5H
Hoja de personaje
Nivel:
(25/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel |
Página 1 de 2. • 1, 2
Temas similares
» Lindo pececillo
» Una Noche con el Octavo Color [FIC]
» Venganza de Color Octarino
» No todo es color de rosa
» El Inicio del 8vo Color, de lo Negro o lo Blanco
» Una Noche con el Octavo Color [FIC]
» Venganza de Color Octarino
» No todo es color de rosa
» El Inicio del 8vo Color, de lo Negro o lo Blanco
Página 1 de 2.
|
|