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Creado por Winry Miér Jun 08, 2016 5:51 am
Habia pasado ya cerca de una semana o algo mas desde que Winry había llegado a Loguetown y se había convertido en la ayudante de un panadero local cerca de la plaza, sus días eran tranquilos y relajados, llevaba pedidos de aquí para allá y en su tiempo libre la pasaba jugando con los niños de la zona o hablado con las vecinas sobre temas de cotilleo, la gente dejo de temerla y al parecer el rumor de que una chia perro estaba en la ciudad se había expandido por toda la isla, haciendo que Winry tuviera que conocer a gente de muchos lugares de la ciudad. Era domingo y como todo domingo, era el día de descanso para casi todo el mundo y eso incluía a nuestra Mink, se preparo poniéndose su mochila a la espalda y con ropa nueva, una camiseta sin mangas con un estampado que ponía "GUAU!" con un dibujo de un perro ladrando y unos shorts cortos.
- Bueno, me voy de paseo, volveré para la cena o cuando tenga hambre jejeje - bajaba la escalera desde su cuarto que era compartido con la hija del panadero hasta la entrada de la casa, despidiéndose con una sonrisa y un gesto con la mano, abrió la puerta y justo enfrente suya había un niño pequeño, sonrojado y con un ramo de flores - Winry-chan! acepta este regalo por favor! - el chico salio corriendo nada mas entregarle el ramo de flores y se fue con un grupo de otros niños que parecían reírse de este ¿Habia nacido un fan de las furrys? Era posible pero Winry tomo el ramo y miro para la panadería con gesto de duda - ¿Y esto? - el panadero y la hija se echaron a reír y fue la chica la que le contesto - parece que te hiciste famosa Winry-chan jejeje - Winry dejo el ramo en la panadería y volvió a salir a la calle, miro a los lados y siguió el camino de la derecha, iba hacia el área comercial
- Bueno, me voy de paseo, volveré para la cena o cuando tenga hambre jejeje - bajaba la escalera desde su cuarto que era compartido con la hija del panadero hasta la entrada de la casa, despidiéndose con una sonrisa y un gesto con la mano, abrió la puerta y justo enfrente suya había un niño pequeño, sonrojado y con un ramo de flores - Winry-chan! acepta este regalo por favor! - el chico salio corriendo nada mas entregarle el ramo de flores y se fue con un grupo de otros niños que parecían reírse de este ¿Habia nacido un fan de las furrys? Era posible pero Winry tomo el ramo y miro para la panadería con gesto de duda - ¿Y esto? - el panadero y la hija se echaron a reír y fue la chica la que le contesto - parece que te hiciste famosa Winry-chan jejeje - Winry dejo el ramo en la panadería y volvió a salir a la calle, miro a los lados y siguió el camino de la derecha, iba hacia el área comercial
Winry
Hoja de personaje
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(10/100)
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Creado por Yamuraiha Jue Jun 09, 2016 2:50 pm
La vida en East Blue era muy diferente a la que había llevado en Zou sin duda ¡Tanta cultura, tanta gente diferente! Luego de que me dieran el alta e hiciera la promesa con Varian de volvernos a encontrar -de eso ya una semana- decidí explorar en mi pequeño barco las diferentes islas eso sí sin alejarme demasiado de Foosha, donde una alegre y cálida familia me había aceptado y ofrecido su casa como refugio y hogar todo el tiempo que quisiera a pesar de que era una completa extraña para ellos y seguramente no una persona semi-persona mejor dicho, desconocida de intenciones no tuve el corazón para negarme. Y ahora en domingo, me han pedido ir a Loguetown por unas compras, entre ellas medicinas y un poco de pan para la cena
-Marine...-
La bandera y las estructuras características de mis mayores pesadillas las reconocería en todas partes después de todo, tenía la marca de su yugo en todo mi ser. Así que Loguetown era lo que se decía en mi familia un "nido de cuervos" donde los oficiales y varios más se paseaban a sus anchas como gallos en gallinero, henchidos a más no poder creyéndose lo más en aquellos lares, volviéndose además de una tortura, seguramente una nauseabunda experiencia; lo mejor era esconderme, o en lo mínimo no despertar sospechas, así que cubrí mis orejas con una bandana y mi cola la oculté lo mejor que pude haciéndola ver más como un cinto felpudo que parte de mí. Atraqué en el muelle y con la bolsita de las berries escondida en el escote procedí a guiarme por la ciudadela gracias a los aromas para dar con el Mercado, al menos hasta que otro me hizo voltear: no muy lejos de donde estaba, una Mink... ¡Una mink! ¿Aquí? ¿Habría huido? No la reconocía, pero sí ¡No estaba sola después de todo! Y antes de que me diera cuenta corría hacia ella
-¡Hey!-
Cuando le di alcance no pude evitarlo; la abracé con todas las fuerzas que tenía mientras de nuevo las osadas lágrimas amenazaban con aparecer -Me alegra encontrar a alguien como yo en este extraño lugar...-luego del abrazo me aparté para que me viera y le guiñé un ojo -soy mitad mink, pero es un secreto, ¿vale?- acto seguido la sonrisa que pugnaba por salir se convirtió inesperadamente en un beso sobre sus labios. Y no me importó, sinceramente. Estaba realmente feliz en aquellos momentos
-Marine...-
La bandera y las estructuras características de mis mayores pesadillas las reconocería en todas partes después de todo, tenía la marca de su yugo en todo mi ser. Así que Loguetown era lo que se decía en mi familia un "nido de cuervos" donde los oficiales y varios más se paseaban a sus anchas como gallos en gallinero, henchidos a más no poder creyéndose lo más en aquellos lares, volviéndose además de una tortura, seguramente una nauseabunda experiencia; lo mejor era esconderme, o en lo mínimo no despertar sospechas, así que cubrí mis orejas con una bandana y mi cola la oculté lo mejor que pude haciéndola ver más como un cinto felpudo que parte de mí. Atraqué en el muelle y con la bolsita de las berries escondida en el escote procedí a guiarme por la ciudadela gracias a los aromas para dar con el Mercado, al menos hasta que otro me hizo voltear: no muy lejos de donde estaba, una Mink... ¡Una mink! ¿Aquí? ¿Habría huido? No la reconocía, pero sí ¡No estaba sola después de todo! Y antes de que me diera cuenta corría hacia ella
-¡Hey!-
Cuando le di alcance no pude evitarlo; la abracé con todas las fuerzas que tenía mientras de nuevo las osadas lágrimas amenazaban con aparecer -Me alegra encontrar a alguien como yo en este extraño lugar...-luego del abrazo me aparté para que me viera y le guiñé un ojo -soy mitad mink, pero es un secreto, ¿vale?- acto seguido la sonrisa que pugnaba por salir se convirtió inesperadamente en un beso sobre sus labios. Y no me importó, sinceramente. Estaba realmente feliz en aquellos momentos
Yamuraiha
Hoja de personaje
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(1/100)
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Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel |
Creado por Ayashi Kouba Lun Jun 13, 2016 4:50 am
Dicen que las mentes prodigiosas dominarían el mundo, nunca estuve tan de acuerdo con tal frase, es más, me considero a mi misma con tal atributo que, espero sin duda lograr dicha conquista mundial, aunque tenga que romper una que otra taza. Pero se preguntarán ¿Dónde me encuentro? Es sencillo, vago por un lado y por el otro, estuve de visita médica, un sujeto me debía un poco de dinero, algo así como 5 millones de berrys, y fui a cobrar a domicilio, no lo saqué todo en efectivo, obtuve un poco de información a cambio de 2 millones, pero, algo era algo, pasó un día más con vida, había que felicitarle.
Ya en mi camino a mi oficina, observaba por donde daba mis pasos, siempre atenta a donde podía haber algo que fuera importante, interesante, o al menos, curioso. Y en eso andaba mientras saltaba de un lado a otro cual liebre, cuando mis ojos preciosos indicaron que había algo fuera de lugar... ¡Orejas! Había una chica con orejas marrones y peludas en el camino, y no sólo eso, sino que estaba conversando con otra persona, de pronto lo vio ¡Le había dado un beso en pleno entorno transitado -Uh, vaya... quizá lo haga algún día- sonreí mientras le veía a la distancia y hablaba sólo para mi, había encontrado algo así como, una nueva forma de diversión.
Oculté mis manos en las bolsas de mi abrigo y empecé a caminar dando pequeños saltitos en dirección de las chicas que se habían empecinado en demostrar su amor con tal detalle afectuoso, o al menos, eso me hicieron pensar, vaya que traviesas. Llegué hasta donde ambas se encontraban y me detuve a ver, de mi bolsillo saqué unas gafas que me coloqué en los ojos, usando mi diestra, y con ellas observé las orejas de la mink canino -Vaya, ¿qué tenemos aquí? Son orejas peludas muy caninas ¿Acaso estoy frente a un espécimen de la raza Mink? Si, es probable, raro pero probable- mencioné haciéndome la interesada, que si lo estaba, y a la vez, hablando un poco "de más" simplemente para llamar su atención.
Tras ver a través de aquellas gafas sin aumento las orejas de can, me las quité y las arrojé a mis espaldas, sin importarme que le cayeran a alguien en la cabeza. Entonces observé a la otra chica y parpadeé, un par de veces, había algo extraño en ella -¿No serás...?- y me detuve, limpié mi garganta con unos carraspeos y luego llevé mi diestra a mi pecho -Oh, casi olvido presentarme, vaya educación la mía. Ayashi Kouba, y soy la guía que ustedes necesitan en esta isla ¿Qué desean saber o conocer? Simple, vengan a mi, tomemos el té y hablemos... lo sé todo de Loguetown- mencioné mientras sonreía, mis orbes carmesí parecían que brillaban, aunque no fuese así, yo sólo quería ver que ofrecían el par de chicas, a cambio, vendía mi imagen para obtener clientes nuevos y, por supuesto, más berrys o información valiosa, pues como mencioné al inicio, conquistaré al mundo, y quien tiene el conocimiento... tiene el poder.
Ya en mi camino a mi oficina, observaba por donde daba mis pasos, siempre atenta a donde podía haber algo que fuera importante, interesante, o al menos, curioso. Y en eso andaba mientras saltaba de un lado a otro cual liebre, cuando mis ojos preciosos indicaron que había algo fuera de lugar... ¡Orejas! Había una chica con orejas marrones y peludas en el camino, y no sólo eso, sino que estaba conversando con otra persona, de pronto lo vio ¡Le había dado un beso en pleno entorno transitado -Uh, vaya... quizá lo haga algún día- sonreí mientras le veía a la distancia y hablaba sólo para mi, había encontrado algo así como, una nueva forma de diversión.
Oculté mis manos en las bolsas de mi abrigo y empecé a caminar dando pequeños saltitos en dirección de las chicas que se habían empecinado en demostrar su amor con tal detalle afectuoso, o al menos, eso me hicieron pensar, vaya que traviesas. Llegué hasta donde ambas se encontraban y me detuve a ver, de mi bolsillo saqué unas gafas que me coloqué en los ojos, usando mi diestra, y con ellas observé las orejas de la mink canino -Vaya, ¿qué tenemos aquí? Son orejas peludas muy caninas ¿Acaso estoy frente a un espécimen de la raza Mink? Si, es probable, raro pero probable- mencioné haciéndome la interesada, que si lo estaba, y a la vez, hablando un poco "de más" simplemente para llamar su atención.
Tras ver a través de aquellas gafas sin aumento las orejas de can, me las quité y las arrojé a mis espaldas, sin importarme que le cayeran a alguien en la cabeza. Entonces observé a la otra chica y parpadeé, un par de veces, había algo extraño en ella -¿No serás...?- y me detuve, limpié mi garganta con unos carraspeos y luego llevé mi diestra a mi pecho -Oh, casi olvido presentarme, vaya educación la mía. Ayashi Kouba, y soy la guía que ustedes necesitan en esta isla ¿Qué desean saber o conocer? Simple, vengan a mi, tomemos el té y hablemos... lo sé todo de Loguetown- mencioné mientras sonreía, mis orbes carmesí parecían que brillaban, aunque no fuese así, yo sólo quería ver que ofrecían el par de chicas, a cambio, vendía mi imagen para obtener clientes nuevos y, por supuesto, más berrys o información valiosa, pues como mencioné al inicio, conquistaré al mundo, y quien tiene el conocimiento... tiene el poder.
Ayashi Kouba
Hoja de personaje
Nivel:
(20/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 1 |
Creado por Winry Lun Jun 13, 2016 5:17 am
Winry esperaba otro día tranquilo, era domingo y para ella eso significaba descanso y quizás alguna que otra siesta al mediodía pero muy lejos de la realidad estaba ese sueño de un día tranquilo y relajado, nada mas llegar al Mercado, tenia la intención de mirar los puestos, quizás comprar algo o quizás comprar algún regalo pero sin duda no se espero lo que estaba por ocurrir, una chica se abalanzo sobre ella, abrazándola de la nada, a la Mink no le dio tiempo a sorprenderse pues acto seguido y después de que esta dijera que era mitad mink, un beso acaricio sus labios, ¿la había besado? ¿Habia gastado su primer beso en ese momento y con otra chica? Pero ¿porque? Winry quedo algo confusa, sorprendida y con un leve sonrojo, no conocía a esa chica de nada, quizás la habría visto por Zou ya que decía ser mitad mink pero aun así no la conocía - Esto....- sin saber que decir, dio unos pasos hacia atrás y cuando pensaba que se estaba librando de aquella situación, otra chica apareció.
Esta pareció interesada en las dos, mirando las orejas de la Mink perro y escucho lo que tuvo que decir - Soy una Mink Husky Siberiano, si, lo se, los husky son blancos, negros o grises, me lo suelen decir - entonces se auto-presento, esa Chica, Ayashi, también se autodenomino guía de la isla pero Winry no necesitaba una guía, ya había estado por casi toda la isla gracias a su pequeño trabajo, en todo caso quien necesitaría una guía seria...- Creo que te confundes, yo no necesito guía jejeje quizás ella si - señalo con el dedo a la chica que le propino el beso y soltó un suspiro, ya sabia por experiencia que no podría librarse de una situación que se había tornado extraña para ella - En fin, creo que tomar un café no seria mala idea - miro a las dos chicas y volvió a soltar un suspiro, su plan de ir de tiendas y tener un domingo tranquilo había fracasado.
Esta pareció interesada en las dos, mirando las orejas de la Mink perro y escucho lo que tuvo que decir - Soy una Mink Husky Siberiano, si, lo se, los husky son blancos, negros o grises, me lo suelen decir - entonces se auto-presento, esa Chica, Ayashi, también se autodenomino guía de la isla pero Winry no necesitaba una guía, ya había estado por casi toda la isla gracias a su pequeño trabajo, en todo caso quien necesitaría una guía seria...- Creo que te confundes, yo no necesito guía jejeje quizás ella si - señalo con el dedo a la chica que le propino el beso y soltó un suspiro, ya sabia por experiencia que no podría librarse de una situación que se había tornado extraña para ella - En fin, creo que tomar un café no seria mala idea - miro a las dos chicas y volvió a soltar un suspiro, su plan de ir de tiendas y tener un domingo tranquilo había fracasado.
Winry
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