Online
Conectarse
En total hay 9 usuarios en línea: 0 Registrados, 0 Ocultos y 9 Invitados :: 2 Motores de búsqueda
Ninguno
El record de usuarios en línea fue de 166 durante el Dom Nov 13, 2016 9:10 pm
Last Post
Censo
Staff
Página 1 de 1.
Creado por Mitsuki Urushiba Miér Ene 06, 2016 1:54 pm
Luego de mi extravagante declaración de guerra hacia todos los presentes, para mi suerte, gran parte de aquellas mujeres se pusieron de mi lado siendo dos de ellas las que se llevarían el extraño humanoide metálico hacia el exterior del bar, no sin antes llevarse algo de dinero para si "Interesante" Pensé para mis adentros mientras miraba como el caos comenzaba a acrecentarse en aquel sitio. Toda la gente se retiraba, se empujaban entre si y, aun así, a ninguno se le osaba correr delante del campo de visión tanto mio como de aquella mujer de rubia cabellera que había tomado prestada para bailar una dulce melodía. Me quede quieta unos escasos segundos mientras todo se iba librando de personas levantando mi mano solo para detener la caída de una persona que, por algún motivo, estuvo muy cerca de caer sobre mi misma. En cuanto lo deje caer al suelo desenfunde a Urano, una de las dos espadas gemelas que cargaba en mi cintura, y sin siquiera sentir un ápice de piedad le corte el cuello.
Tras aquella escena grotesca que pintaba el suelo bajo mis pies de un exquisito rojo carmesí, gran parte del bar se encontraba vació, con jarras de cerveza aun servidas por algún lado, muchas otras caídas, así como botellas y unos cuantos abrigos o carteras, cosas que alguien se olvida cuando quiere correr por su vida -Bueno, creo que ya nos han despejado un poco la pista de baile, my Lady- La ultima frase la había efectuado con un ligero tono de burla aunque con bastante altura puesto que eran frases que a diario se escuchaban en mi antiguo hogar. Levante mi espada posicionándola entre mi enemiga y yo solo para ver que parte de la punta se encontraba manchada, algo que fácilmente fue removido cuando baje el arma con gran velocidad permitiendo así que aquella sangre se deslizara y cayera en el suelo de madera de aquel pobre bar que ya se encontraba en un estado bastante deplorable teniendo en cuenta que hacia tan poco se encontraba completamente lleno.
Mi otra mano se deslizo al mango de mi otra espada, Neptuno, desenfundandola con bastante tranquilidad, deteniéndome solo para admirar su hoja unos escasos segundos, un increíble brillo que dentro de poco iba a tener que arruinar en un combate. Suspire algo resignada por dicha situación, aunque era algo que tarde o temprano tenia que ocurrir -Entonces, si no te molesta, ¿Que clase de delito es del que me acusan esta vez? Les escuche hablar sobre culpables, sobre entrarnos por nuestro bien, pero no escuche el delito- Dije con una sonrisa bastante amplia, no esperaba que me respondería a la pregunta con sinceridad y, ahora que había optado por batirme a duelo, no esperaba siquiera una respuesta a a la pregunta mas alla de un posible golpe que diera inicio a algo interesante, aun digno baile entre ambas.
Tras aquella escena grotesca que pintaba el suelo bajo mis pies de un exquisito rojo carmesí, gran parte del bar se encontraba vació, con jarras de cerveza aun servidas por algún lado, muchas otras caídas, así como botellas y unos cuantos abrigos o carteras, cosas que alguien se olvida cuando quiere correr por su vida -Bueno, creo que ya nos han despejado un poco la pista de baile, my Lady- La ultima frase la había efectuado con un ligero tono de burla aunque con bastante altura puesto que eran frases que a diario se escuchaban en mi antiguo hogar. Levante mi espada posicionándola entre mi enemiga y yo solo para ver que parte de la punta se encontraba manchada, algo que fácilmente fue removido cuando baje el arma con gran velocidad permitiendo así que aquella sangre se deslizara y cayera en el suelo de madera de aquel pobre bar que ya se encontraba en un estado bastante deplorable teniendo en cuenta que hacia tan poco se encontraba completamente lleno.
Mi otra mano se deslizo al mango de mi otra espada, Neptuno, desenfundandola con bastante tranquilidad, deteniéndome solo para admirar su hoja unos escasos segundos, un increíble brillo que dentro de poco iba a tener que arruinar en un combate. Suspire algo resignada por dicha situación, aunque era algo que tarde o temprano tenia que ocurrir -Entonces, si no te molesta, ¿Que clase de delito es del que me acusan esta vez? Les escuche hablar sobre culpables, sobre entrarnos por nuestro bien, pero no escuche el delito- Dije con una sonrisa bastante amplia, no esperaba que me respondería a la pregunta con sinceridad y, ahora que había optado por batirme a duelo, no esperaba siquiera una respuesta a a la pregunta mas alla de un posible golpe que diera inicio a algo interesante, aun digno baile entre ambas.
Mitsuki Urushiba
Hoja de personaje
Nivel:
(25/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 1 | 1 |
Creado por Mei Haiba Miér Ene 06, 2016 4:16 pm
La tensión en el local murió para renacer en forma del caos más absoluto. Que el "Last Passage" iba a convertirse en el escenario de una batalla era un hecho que hasta el más necio sería capaz de adivinar. Un combate, lo más seguro, a vida a muerte y a cara de perro. Espada contra espada, puño contra puño, la justicia y los que la desobedecían iban a enfrentarse por enésima vez. Por eso todos los presentes huían en manada, dejando tanta tierra de por medio cómo sus asustadas piernas les permitían. Vasos quebrándose, mesas siendo arrolladas por la carrera de un hombre o sillas destrozadas por la avalancha de cuerpos en el camino de los cuales se había interpuesto. Tantas cosas pasando a su alrededor, pero sus ojos únicamente fijo en un lugar. En la joven de cabellos morenos que le correspondía el mirar.
La joven en ningún momento alteró su rostro ni su postura, ni siquiera cuando la otra mujer se alzó e hizo ademán de acercarse hacia ella. No hubo respuesta por parte de la rubia, que seguía en el mismo lugar que antes, de pie, con la mano en el látigo y su mirada duramente clavada en la morena.Sin inmutarse, ni siquiera cuando un desafortunado hombre cayó cerca de la posición de la criminal que, sin dudarlo, le asesinó a traición. Un acto terrible, horrendo, pero que terminaba favoreciendo los intereses de la rubia. Ya no debía temer posibles represalias por haber atacado a una civil inocente, cosa que la espadachina ya había demostrado no ser. Tampoco las primeras palabras, cargadas ligeramente con burla hicieron reaccionar a la Soldado Kozlov que se limitó a esbozar una leve sonrisa que no hizo sino ensancharse a medida que la joven siguió hablando y sonrió a su vez. Tanta sonrisa falsa en una misma conversación era casi anecdótico, ciertamente. - Que poético todo... ¿Acaso crees que importan los crímenes que pudieras haber cometido? - preguntó, mientras finalmente desenroscaba el látigo de cuero con un rápido movimiento de muñeca y avanzaba a lentos pasos hasta colocarse a poco menos de un metro de su rival. Ahora que la gente había abandonado el lugar, el arma se había vuelto más efectiva. - Casi que prefiero que no te entregues. - sentenció, mientras con un rápido movimiento horizontal de derecha a izquierda hacia ondular el látigo en dirección a la zona abdominal izquierda de la joven. Sabía que el látigo no sería una carta ganadora, para salir victoriosa debería recurrir a la distancia corta, pero prefería empezar tanteándola para estudiar sus movimientos y sus capacidades.
La joven en ningún momento alteró su rostro ni su postura, ni siquiera cuando la otra mujer se alzó e hizo ademán de acercarse hacia ella. No hubo respuesta por parte de la rubia, que seguía en el mismo lugar que antes, de pie, con la mano en el látigo y su mirada duramente clavada en la morena.Sin inmutarse, ni siquiera cuando un desafortunado hombre cayó cerca de la posición de la criminal que, sin dudarlo, le asesinó a traición. Un acto terrible, horrendo, pero que terminaba favoreciendo los intereses de la rubia. Ya no debía temer posibles represalias por haber atacado a una civil inocente, cosa que la espadachina ya había demostrado no ser. Tampoco las primeras palabras, cargadas ligeramente con burla hicieron reaccionar a la Soldado Kozlov que se limitó a esbozar una leve sonrisa que no hizo sino ensancharse a medida que la joven siguió hablando y sonrió a su vez. Tanta sonrisa falsa en una misma conversación era casi anecdótico, ciertamente. - Que poético todo... ¿Acaso crees que importan los crímenes que pudieras haber cometido? - preguntó, mientras finalmente desenroscaba el látigo de cuero con un rápido movimiento de muñeca y avanzaba a lentos pasos hasta colocarse a poco menos de un metro de su rival. Ahora que la gente había abandonado el lugar, el arma se había vuelto más efectiva. - Casi que prefiero que no te entregues. - sentenció, mientras con un rápido movimiento horizontal de derecha a izquierda hacia ondular el látigo en dirección a la zona abdominal izquierda de la joven. Sabía que el látigo no sería una carta ganadora, para salir victoriosa debería recurrir a la distancia corta, pero prefería empezar tanteándola para estudiar sus movimientos y sus capacidades.
Mei Haiba
Hoja de personaje
Nivel:
(41/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
Creado por Mitsuki Urushiba Jue Ene 07, 2016 1:40 pm
¿Realmente importaban los crímenes que había cometido? A fin de cuentas me había dedicado a matar a sangre fría a un simple civil que se había tropezado delante mio. Suspire de manera bastante tranquila, dando por hecho que aquella rubia mujer tenia la razón en sus palabras, era una criminal, una simple asesina del montón que tenia incluso manchada su bufanda con sus crimines del pasado y, por ende, alguien que se merecía la búsqueda y captura de marines, a fin de cuentas era su trabajo el buscar a personas como Mitsuki por sus crimines. Aunque quisiera saber que clase de crímenes tenia adjudicados esta vez, ¿que mas daba? De todas maneras iba a ser perseguida por un marine -Tienes razón, no creo que importen mucho después de todo lo que he llegado a hacer- Respondí sin mayores problemas, con una enorme tranquilidad en mi tono de voz puesto que a fin de cuentas matar a una mancha mas al tigre no era un problema que me hiciera mella realmente. Entre todo eso finalmente logre ver el arma de combate de la contraria, lo cual no me asombro mucho puesto que llevaba en su mano un látigo que desde hacia rato llevaba viendo, lo desenrosco de manera tranquila, aunque el simple hecho de que no estuviera en su cinturón incitaba a su uso en un futuro no muy lejano, la misma razón por la cual Urano y Neptuno se encontraban fuera de sus fundas.
Dichas unas pocas palabras aquel látigo corto el aire con gran velocidad hacia mi zona abdominal, algo que como era de esperarse despertó a mis ya muy alerta músculos para saltar hacia atrás, cayendo sobre una mesa sobre la cual me termine de deslizar para caer en el suelo. La distancia que nos separaba a ambas no podía ser de mas de dos metros mientras que mi caída al suelo había dejado mucho que desear, puesto que ahora mismo me encontraba sentada en el suelo, escondida entre la mesa y una silla a un lado mio. Me levante con apuro, sin perder tiempo, y tome una pose de combate donde mi brazo derecho elevaba por delante mio la hoja de Urano, a la altura de mi mentón, de manera horizontal mientras que la izquierda que cargaba con Neptuno se encontraba justo detrás, bastante cerca de mi cuerpo y de manera vertical; casi como si quisiera tomar la pose de un luchador de boxeo, solo que en lugar de guantes de combate cargaba con unas peligrosas y afiladas armas de combate.
-Deberías de aprender a bailar, casi me pisas el pie con ese paso- Largue como una pequeña y estúpida broma mientras una pequeña risa burlona se dibujaba en mi rostro, era muy divertido tener un combate de aquella índole. Hacia mucho tiempo que nadie intentaba pelear contra mi y ya me había llegado a olvidar ligeramente como eran esa clase de cosas. Con una sonrisa en mi rostro use la silla a mi lado como un escalón, posteriormente la mesa que tenia delante y por la cual me había deslizado a manera de quedar justo por encima de la rubia sobre la cual ahora me encontraba saltando con ambos filos de mis espadas en los lados formando de esa manera y en pleno aire lo que podría ser fácilmente llamado como una táctica peligrosa o, en dado caso, como un pequeño tornado cortante. Sabia que si quería ganar no tenia que reservarse nada y, por sobre todo, no perder ninguna de sus oportunidades.
Dichas unas pocas palabras aquel látigo corto el aire con gran velocidad hacia mi zona abdominal, algo que como era de esperarse despertó a mis ya muy alerta músculos para saltar hacia atrás, cayendo sobre una mesa sobre la cual me termine de deslizar para caer en el suelo. La distancia que nos separaba a ambas no podía ser de mas de dos metros mientras que mi caída al suelo había dejado mucho que desear, puesto que ahora mismo me encontraba sentada en el suelo, escondida entre la mesa y una silla a un lado mio. Me levante con apuro, sin perder tiempo, y tome una pose de combate donde mi brazo derecho elevaba por delante mio la hoja de Urano, a la altura de mi mentón, de manera horizontal mientras que la izquierda que cargaba con Neptuno se encontraba justo detrás, bastante cerca de mi cuerpo y de manera vertical; casi como si quisiera tomar la pose de un luchador de boxeo, solo que en lugar de guantes de combate cargaba con unas peligrosas y afiladas armas de combate.
-Deberías de aprender a bailar, casi me pisas el pie con ese paso- Largue como una pequeña y estúpida broma mientras una pequeña risa burlona se dibujaba en mi rostro, era muy divertido tener un combate de aquella índole. Hacia mucho tiempo que nadie intentaba pelear contra mi y ya me había llegado a olvidar ligeramente como eran esa clase de cosas. Con una sonrisa en mi rostro use la silla a mi lado como un escalón, posteriormente la mesa que tenia delante y por la cual me había deslizado a manera de quedar justo por encima de la rubia sobre la cual ahora me encontraba saltando con ambos filos de mis espadas en los lados formando de esa manera y en pleno aire lo que podría ser fácilmente llamado como una táctica peligrosa o, en dado caso, como un pequeño tornado cortante. Sabia que si quería ganar no tenia que reservarse nada y, por sobre todo, no perder ninguna de sus oportunidades.
- Spoiler:
- ✖ Uzumaki (Remolino) // Nivel 1
Sosteniendo ambas espadas en perpendicular a su cuerpo la usuaria hace uso de su destreza para comenzara girar sobre su propios eje como si de un poderoso tornado se tratara y, de esta manera, se acerca hacia su enemigo de manera tal de generar cortes continuos sobre el contrario de manera paralela al llevar ambas una espada por debajo de la otra. Otra enorme ventaja de esta técnica es que gracias a la fuerza centrifuga acumulada por sus propios giros cada uno de los cortes generados es bastante amplio. Imagen. Un uso por tres turnos de reposo.
Es eso, solo que salto para caer desde arriba. Algo mas así solo que con dos espadas: Imagen.
Mitsuki Urushiba
Hoja de personaje
Nivel:
(25/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 1 | 1 |
Creado por Mei Haiba Dom Ene 10, 2016 9:20 am
No se había equivocado cuando creyendo que el látigo iba a servir de poco. El cuero había recorrido el aire a gran velocidad, pero no lo suficiente cómo para impactar en su objetivo. Con un movimiento bastante ágil, la joven pirata había saltado hacia atrás, pasando por encima de una mesa y varias sillas con tal de evitar se golpeada por el ataque de la rubia. Aquello ya era un dato importante que recordar, no estaba ante ninguna torpe, aquella chiquilla tenía buenas reflejos y la fuerza suficiente cómo para dar un salto tan amplio cómo aquel. En ningún momento había creído que se trataría de un combate fácil, ahora tenía la certeza de ello. No sólo por su aparente igualdad en habilidades, sino por la mayor peligrosidad de las armas de su contrincante. Las espadas suponían un riesgo añadido a sus ataques, un riesgo que necesitaría saber gestionar correctamente para evitar tener que pasar un tiempo en la enfermería una vez terminado el combate.
Esbozó una media sonrisa tras el comentario de la joven, que se había levantado deprisa del suelo tras su espectacular esquive y su todavía más sonora caída sobre la mesa y el suelo. Por su parte, la soldado seguía en la misma posición que antes habiendo recogido el látigo de nuevo, preparada para utilizarlo de forma ofensiva o defensiva en el momento necesario. Sus ojos, fijos en la postura de su rival, no perdían detalle de nada, mientras en su cabeza no cesaba un constante análisis de sus movimientos, su forma de combatir,... Todo ello para conseguir mejorar su capacidad de reacción contra sus ataques y es que, ahora, era el momento de que fuera la pirata quien diera paso a la ofensiva. Y así lo hizo, tomando impulso sobre la silla y mesa en las que había caído segundos antes, se alzó en el aire con sus espadas en mano y con un peligroso movimiento giratorio se dejó caer hacia la Marine, que retrocedió unos pocos pasos hacia atrás, mientras la joven tomaba carrerilla por encima de la mesa, hasta que su espalda tocó con la barra del local, junto al taburete en el que se había sentado pocos minutos antes. ¿Acaso se había atrapado a sí misma? Nada más lejos de la realidad. Cuando la caída giratoria de la joven estuvo amenazadoramente cerca, rodó por el suelo, pasando por debajo del cuerpo de su rival, todavía en el aire, para todavía desde el suelo, lanzar un latigazo diagonal hacia la dirección en la que creía que caería la joven. La altura era una ventaja, pero no te permitía controlar tu caída tanto cómo te gustaría. En ese principio se había basado la contraofensiva de la Marine, que esperaba que su contrincante terminara dándose de bruces contra la barra, el látigo o se viera forzada a enseñar alguno de sus trucos antes de hora. La cuestión es que ahora, pese a estar todavía levantándose del suelo, la soldado Kozlov estaba convencida de tener el combate más que controlado.
Esbozó una media sonrisa tras el comentario de la joven, que se había levantado deprisa del suelo tras su espectacular esquive y su todavía más sonora caída sobre la mesa y el suelo. Por su parte, la soldado seguía en la misma posición que antes habiendo recogido el látigo de nuevo, preparada para utilizarlo de forma ofensiva o defensiva en el momento necesario. Sus ojos, fijos en la postura de su rival, no perdían detalle de nada, mientras en su cabeza no cesaba un constante análisis de sus movimientos, su forma de combatir,... Todo ello para conseguir mejorar su capacidad de reacción contra sus ataques y es que, ahora, era el momento de que fuera la pirata quien diera paso a la ofensiva. Y así lo hizo, tomando impulso sobre la silla y mesa en las que había caído segundos antes, se alzó en el aire con sus espadas en mano y con un peligroso movimiento giratorio se dejó caer hacia la Marine, que retrocedió unos pocos pasos hacia atrás, mientras la joven tomaba carrerilla por encima de la mesa, hasta que su espalda tocó con la barra del local, junto al taburete en el que se había sentado pocos minutos antes. ¿Acaso se había atrapado a sí misma? Nada más lejos de la realidad. Cuando la caída giratoria de la joven estuvo amenazadoramente cerca, rodó por el suelo, pasando por debajo del cuerpo de su rival, todavía en el aire, para todavía desde el suelo, lanzar un latigazo diagonal hacia la dirección en la que creía que caería la joven. La altura era una ventaja, pero no te permitía controlar tu caída tanto cómo te gustaría. En ese principio se había basado la contraofensiva de la Marine, que esperaba que su contrincante terminara dándose de bruces contra la barra, el látigo o se viera forzada a enseñar alguno de sus trucos antes de hora. La cuestión es que ahora, pese a estar todavía levantándose del suelo, la soldado Kozlov estaba convencida de tener el combate más que controlado.
- Off-Rol:
- Te explico, siguiendo lo roleado en el tema anterior, Deka está muy cerca de la barra. Por eso, cuando saltas se echa un poco hacia atrás y rueda por debajo de ti mientras caes (rueda haciendo la croqueta, para que nos entendamos, que es la manera más rápida posible de hacerlo) y cuando deja de rodar lanza casi a ciegas un latigazo a dónde cree que deberías haber aterrizado (la idea del movimiento de Deka es que te estampes de morros contra la barra xD ). El latigazo desde el suelo, obviamente, no llevaría tanta fuerza ni velocidad cómo uno lanzado de pie. Al final, se levanta y finito.
Mei Haiba
Hoja de personaje
Nivel:
(41/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
Creado por Mitsuki Urushiba Lun Ene 11, 2016 12:22 pm
¿Un error a reprenderme? Las distancias por supuesto. Era importante que aprendiera a controlar mis impulsos en un combate y que midiera bien las cosas puesto que en aquel momento, tras efectuar el salto y comenzar a girar, pude notar como mi objetivo no se encontraba en el camino de mi giro y en su lugar la barra de aquel molesto bar se interponía en mi camino. Normalmente algo como ello no seria un problema mayor para nadie, pero cuando alguien se encuentra en medio del aire, girando a gran velocidad, ese simple objeto se podía fácilmente comparar con una inamovible montaña. Lo mas lógico en ese momento hubiera sido dejar de girar, frenar mi movimiento y pararme de alguna manera sobre la barra manteniendome lo mas ilesa posible, por supuesto eso no seria del todo posible puesto que mi velocidad y mis giros eran demasiado como para frenarlos de golpe, lo que si podía hacer era frenar algo mi velocidad y evitar el mayor daño posible.
Como era de esperarse la manera de actuar por mi parte fue la menos ortodoxa posible y al momento de estar peligrosamente cerca de la barra logre colocar ambos brazos míos en cruz recibiendo la mayor fuerza del impacto en los mismos, mayormente en el brazo izquierdo que cayo primero y que por la fuerte sacudida que obtuve en respuesta me hizo soltar mi preciada espada que cayo detrás de la barra, justo hacia donde gire para escuchar el golpe del látigo contra la madera. El dolor que recorrió todo mi cuerpo al caer no fue nada comparado al del impacto, el cual aun sentía en mis huesos y músculos que me pedían a gritos alguna clase de atención que yo misma no podía brindarles. Moví mis brazos lo mas posible para que no se entumecieran y haciendo caso omiso del dolor tome la espada que se me había caído para luego ponerme en pie de un salto.
Todo ello ocurrió de manera bastante rápida, con suerte se llegaba a contabilizar un minuto antes de que me volviera a poner en pie, mirando con cierta rabia e interés a la contraria -Interesante manera de evitarme- Mi respiración era algo acelerada, lo notaba y aunque quisiera ocultarlo, no me era posible puesto que mi corazón no dejaba de latir por la adrenalina del momento que había pasado, algo realmente estúpido de mi parte, aunque sin duda alguna era una lección a futuro que iba a aprender por las malas. Por otro lado también me fue imposible retener el temblor en mis brazos, una ligera y molesta sensación que me incitaba a soltar las armas, algo que ignore forzando a mi propio cuerpo a continuar peleando. La misma pose de combate que antes, esta vez con mi brazo izquierdo en pose defensiva a un lado de la cintura mientras que la derecha se posaba para el combate. Me estaba arriesgando mucho en una pelea que podría haber evitado, pero hacia tanto tiempo que no sentía a mi sangre correr con tal fervor que no me importaba mucho los daños que mi cuerpo pudiera pasar.
Como era de esperarse la manera de actuar por mi parte fue la menos ortodoxa posible y al momento de estar peligrosamente cerca de la barra logre colocar ambos brazos míos en cruz recibiendo la mayor fuerza del impacto en los mismos, mayormente en el brazo izquierdo que cayo primero y que por la fuerte sacudida que obtuve en respuesta me hizo soltar mi preciada espada que cayo detrás de la barra, justo hacia donde gire para escuchar el golpe del látigo contra la madera. El dolor que recorrió todo mi cuerpo al caer no fue nada comparado al del impacto, el cual aun sentía en mis huesos y músculos que me pedían a gritos alguna clase de atención que yo misma no podía brindarles. Moví mis brazos lo mas posible para que no se entumecieran y haciendo caso omiso del dolor tome la espada que se me había caído para luego ponerme en pie de un salto.
Todo ello ocurrió de manera bastante rápida, con suerte se llegaba a contabilizar un minuto antes de que me volviera a poner en pie, mirando con cierta rabia e interés a la contraria -Interesante manera de evitarme- Mi respiración era algo acelerada, lo notaba y aunque quisiera ocultarlo, no me era posible puesto que mi corazón no dejaba de latir por la adrenalina del momento que había pasado, algo realmente estúpido de mi parte, aunque sin duda alguna era una lección a futuro que iba a aprender por las malas. Por otro lado también me fue imposible retener el temblor en mis brazos, una ligera y molesta sensación que me incitaba a soltar las armas, algo que ignore forzando a mi propio cuerpo a continuar peleando. La misma pose de combate que antes, esta vez con mi brazo izquierdo en pose defensiva a un lado de la cintura mientras que la derecha se posaba para el combate. Me estaba arriesgando mucho en una pelea que podría haber evitado, pero hacia tanto tiempo que no sentía a mi sangre correr con tal fervor que no me importaba mucho los daños que mi cuerpo pudiera pasar.
- Spoiler:
- Pues freno un poco mi caída y caigo con mis brazos en cruz lastimandolos a ambos por la fuerza del impacto, aunque un poco mas al izquierdo que el derecho, no ataco para nada. Saludos~
Mitsuki Urushiba
Hoja de personaje
Nivel:
(25/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 1 | 1 |
Creado por Mitsuki Urushiba Lun Ene 25, 2016 3:30 pm
Fueron unos segundos largos los que pasaron, me quede viendo a aquella fémina de rubia cabellera a la espera de un movimiento, de algo que me indicara que iba a atacarme, pero el mismo no llego en ningún momento e incluso comencé a desesperarme por la falta de movimientos en aquella sala. Llegado el punto que lo único que escuchaba era mi respiración opte por tomar el camino mas simple de salida el cual constaba únicamente de correr, aprovechar que tenia la barra de por medio para agacharme y largarme rápidamente hacia la cocina que se encontraba bastante cerca de donde yo estaba. No era que me gustara mucho el escapar de una pelea, pero había sido golpeada de mas y tenia los brazos entumecidos mientras que el resto de personas que había conocido en el bar debían de estar peleando por algún lado, era mas fácil ir a buscarlas y retirarme con ellas... Aunque podría hacerlo sin ellas, mientras hacían una cortina de humo para mi persona.
De todas maneras no me detuve a pensar mucho en ello y enfundando mis espadas me retire por la puerta trasera de aquel local, una puerta que ya se encontraba abierta puesto que por ahí abría de haberse escapado gran parte de los trabajadores. Por el momento lo único en lo que podía pensar era en una revancha, en que iba a cobrar mi venganza en algún punto del futuro.
De todas maneras no me detuve a pensar mucho en ello y enfundando mis espadas me retire por la puerta trasera de aquel local, una puerta que ya se encontraba abierta puesto que por ahí abría de haberse escapado gran parte de los trabajadores. Por el momento lo único en lo que podía pensar era en una revancha, en que iba a cobrar mi venganza en algún punto del futuro.
- Off:
- Me retiro del tema, espero podamos llevar un combate como corresponde mas adelante Deka.
Mitsuki Urushiba
Hoja de personaje
Nivel:
(25/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 1 | 1 |
Página 1 de 1.
|
|