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Creado por Marcus d' Voltem Miér Ene 27, 2016 12:05 am
Recuerdo del primer mensaje :
El cazador tenia un tiempo en Ilusia, hace unos días habían llegado el y su compañera Lina a la isla. Ella por un motivo se separo el día de ayer mientras que Marcus se dedicaba a realizar unos trabajos. Nada del otro mundo, una pequeña escolta para un cargamento de materiales de construcción. Un trabajo de rutina que en si era bastante aburrido, pero que tenia sus beneficios, algo de paga para poder tener un sitio decente donde dormir y comida era mas que aceptable. Camino hasta la oficina del sujeto y lo primero que hizo fue pedir su pago una vez completo el trabajo, lo recibió y ahora su prioridad era encontrarse con la pelirroja. Tenían un punto de reunión cerca del sitio donde pasaban la noche, una taberna que también funcionaba de posada. Llego a taberna se encontró con una imagen bastante rara, y en cierto grado alarmante. Su compañera se movía con una herida en el hombro, no dudo y se movió a toda prisa hasta donde se encontraba – ¿Lina? – se le aproxima y la lleva al interior del local.
Suben ambos las escaleras hasta llegar a la habitación de la rubia, pues era la mas grande. Le ayuda a sentarse en la cama mientras el toma asiento en una pequeña silla que se encontraba en ese lugar - ¿Qué has hecho para terminar así? – busca el maletín donde la amazona tenia puestos sus instrumentos médicos, y los coloca a un lado de ella – se ve bastante fea esa herida, si necesitas ayuda con el proceso para curarte estaré encantado de ayudarte – para algo eran compañeros, si no se cubrían las espaldas o se cuidaban el uno al otro nadie mas lo haría y con los peligros que reinaban en el mundo seria una travesía bastante corta.
El cazador tenia un tiempo en Ilusia, hace unos días habían llegado el y su compañera Lina a la isla. Ella por un motivo se separo el día de ayer mientras que Marcus se dedicaba a realizar unos trabajos. Nada del otro mundo, una pequeña escolta para un cargamento de materiales de construcción. Un trabajo de rutina que en si era bastante aburrido, pero que tenia sus beneficios, algo de paga para poder tener un sitio decente donde dormir y comida era mas que aceptable. Camino hasta la oficina del sujeto y lo primero que hizo fue pedir su pago una vez completo el trabajo, lo recibió y ahora su prioridad era encontrarse con la pelirroja. Tenían un punto de reunión cerca del sitio donde pasaban la noche, una taberna que también funcionaba de posada. Llego a taberna se encontró con una imagen bastante rara, y en cierto grado alarmante. Su compañera se movía con una herida en el hombro, no dudo y se movió a toda prisa hasta donde se encontraba – ¿Lina? – se le aproxima y la lleva al interior del local.
Suben ambos las escaleras hasta llegar a la habitación de la rubia, pues era la mas grande. Le ayuda a sentarse en la cama mientras el toma asiento en una pequeña silla que se encontraba en ese lugar - ¿Qué has hecho para terminar así? – busca el maletín donde la amazona tenia puestos sus instrumentos médicos, y los coloca a un lado de ella – se ve bastante fea esa herida, si necesitas ayuda con el proceso para curarte estaré encantado de ayudarte – para algo eran compañeros, si no se cubrían las espaldas o se cuidaban el uno al otro nadie mas lo haría y con los peligros que reinaban en el mundo seria una travesía bastante corta.
Marcus d' Voltem
Hoja de personaje
Nivel:
(35/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 | 1 |
Creado por Marcus d' Voltem Miér Feb 10, 2016 5:34 pm
Había ciertas cosas que alguien nunca esperaba, para el cazador era ver a su compañera en ese estado, normalmente ella se comportaba de forma regia y fuerte, pero en esa situación era tan frágil e indefensa como un niño, situación que Marcus no creyó que vería nunca. Cuando ella comenzó a balbucear, cerro los ojos y dio un suspiro – Seria una propuesta interesante, si estuvieses en tus cabales Lina – para que negarlo, la pelirroja era muy atractiva pero los pensamientos del cazador no estaban centrados en ello. Quizás cualquier otra persona se aprovecharía de la situación, pero Marcus no era de esos, tenia una responsabilidad que cumplir y era asegurarse de que ella se repusiera de sus heridas. Afianza un poco el abrazo que tenia sobre la fémina para evitar que esta cayese al suelo, posteriormente la mueve con cuidado acostándola boca abajo en la cama y quitando la sabana que se encontraba roja por la sangre.
Ya con la cazadora en la cama, Marcus va hasta el arcón y busca el botiquín de primeros auxilios que tenia la pelirroja. Sin que ella estuviese lo suficientemente estable para asistirlo, tenia que hacer las cosas al tanteo, pero si había ciertas cosas que podía utilizar. Sus conocimientos aunque básicos en medicina, le indicaban que lo primero era desinfectar la herida, así que busco el alcohol en el botiquín y luego algo de anestesia. Ahí estaba básicamente jodido porque no recordaba que clase de componente era, hasta que en una de las etiquetas entendió “anestesia local” en las instrucciones. No sabia que tan efectivo seria pero era mejor que nada. Dado que la posición de la pelirroja era cercana a la mesa de noche, Marcus se trajo la silla y la coloco al lado, sentándose para tener una mejor posición.
Afortunadamente en el botiquín de la cazadora habían las herramientas necesarias, agujas, algodón, hilo, tijeras. Todo lo necesario para poder curar la herida, la cuestión es que quien tenia que hacer ese remango era un ingeniero y no un medico. Primero lo primero, fue con la tijera cortar la gasa para poder ver la herida. No tenia sangrado profuso así que o bien la condición de Lina era estable, o sencillamente había perdido demasiada sangre. Como cazador asumió lo ultimo y su prioridad ahora era asegurarse de que no perdiese mas. Tuvo que quitarse sus guantes, al menos sus manos no habían tocado nada y estaban menos contaminadas.
Toma el alcohol y moja un algodón, con el químico, luego comienza a moverlo alrededor de la herida sin hacer mucha presión, para no causarle dolor innecesario a la cazadora. Lo siguiente fue repetir un poco el proceso, pero con el químico anestésico, no sabia que tan efectivo seria, pero era mejor a simplemente cocerla y arriesgarse a que le diese algo por el dolor intenso de nuevo. Una vez limpiado y dormido la zona, aunque de forma algo desordenado era momento de suturar. Aquí el cazador no tenia delicadeza o tacto alguno, lo único que pudo hacer era imaginarse como si estuviese cociendo cuero, en algún asiento delicado, así procuraría tener algo de pulso. Con sus dedos, presiono las dos piezas separadas de la herida, juntándolas brevemente solo con fuerza, para luego con la aguja y el hilo que tenia al final cocer la herida.
No tuvo mucho tacto, pero tenia el suficiente pulso como para no llegar al hueso. Al cabo de un rato, posiblemente media hora o quizás más, termina las suturas y comienza a vendar la herida. Echa primero algo de alcohol y luego coloca las vendas. Se sentía extrañamente agotado, quería dormir un poco pero tenia que cuidarla. Lo que hizo fue moverse y rodear la cama, para sentarse en el otro extremo, quitándose la gabardina y colocándola encima del cuerpo de la cazadora – No dejare que algo así te pase de nuevo, tienes mi palabra – toda esa experiencia, había cambiado la manera en que Marcus miraba a la cazadora, ya no de un punto de vista profesional, sino uno mas personal. Luego de arroparla, se acostó en la cama junto a ella, si se despertaba de golpe o si necesitaba algo en el transcurso del día, quedándose cerca seria el primero en saberlo.
Ya con la cazadora en la cama, Marcus va hasta el arcón y busca el botiquín de primeros auxilios que tenia la pelirroja. Sin que ella estuviese lo suficientemente estable para asistirlo, tenia que hacer las cosas al tanteo, pero si había ciertas cosas que podía utilizar. Sus conocimientos aunque básicos en medicina, le indicaban que lo primero era desinfectar la herida, así que busco el alcohol en el botiquín y luego algo de anestesia. Ahí estaba básicamente jodido porque no recordaba que clase de componente era, hasta que en una de las etiquetas entendió “anestesia local” en las instrucciones. No sabia que tan efectivo seria pero era mejor que nada. Dado que la posición de la pelirroja era cercana a la mesa de noche, Marcus se trajo la silla y la coloco al lado, sentándose para tener una mejor posición.
Afortunadamente en el botiquín de la cazadora habían las herramientas necesarias, agujas, algodón, hilo, tijeras. Todo lo necesario para poder curar la herida, la cuestión es que quien tenia que hacer ese remango era un ingeniero y no un medico. Primero lo primero, fue con la tijera cortar la gasa para poder ver la herida. No tenia sangrado profuso así que o bien la condición de Lina era estable, o sencillamente había perdido demasiada sangre. Como cazador asumió lo ultimo y su prioridad ahora era asegurarse de que no perdiese mas. Tuvo que quitarse sus guantes, al menos sus manos no habían tocado nada y estaban menos contaminadas.
Toma el alcohol y moja un algodón, con el químico, luego comienza a moverlo alrededor de la herida sin hacer mucha presión, para no causarle dolor innecesario a la cazadora. Lo siguiente fue repetir un poco el proceso, pero con el químico anestésico, no sabia que tan efectivo seria, pero era mejor a simplemente cocerla y arriesgarse a que le diese algo por el dolor intenso de nuevo. Una vez limpiado y dormido la zona, aunque de forma algo desordenado era momento de suturar. Aquí el cazador no tenia delicadeza o tacto alguno, lo único que pudo hacer era imaginarse como si estuviese cociendo cuero, en algún asiento delicado, así procuraría tener algo de pulso. Con sus dedos, presiono las dos piezas separadas de la herida, juntándolas brevemente solo con fuerza, para luego con la aguja y el hilo que tenia al final cocer la herida.
No tuvo mucho tacto, pero tenia el suficiente pulso como para no llegar al hueso. Al cabo de un rato, posiblemente media hora o quizás más, termina las suturas y comienza a vendar la herida. Echa primero algo de alcohol y luego coloca las vendas. Se sentía extrañamente agotado, quería dormir un poco pero tenia que cuidarla. Lo que hizo fue moverse y rodear la cama, para sentarse en el otro extremo, quitándose la gabardina y colocándola encima del cuerpo de la cazadora – No dejare que algo así te pase de nuevo, tienes mi palabra – toda esa experiencia, había cambiado la manera en que Marcus miraba a la cazadora, ya no de un punto de vista profesional, sino uno mas personal. Luego de arroparla, se acostó en la cama junto a ella, si se despertaba de golpe o si necesitaba algo en el transcurso del día, quedándose cerca seria el primero en saberlo.
Marcus d' Voltem
Hoja de personaje
Nivel:
(35/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 | 1 |
Creado por Lina Crestfall Mar Feb 23, 2016 3:48 pm
¿Doloroso?.. Sí… Lo era… Jadeaba ante el inmenso dolor que producía que su compañero la curara poco a poco… ¿La razón?... Su cuerpo tendía a asimilar demasiado rápido la anestesia, pero así como dormía parte de las heridas, esta desaparecía paulatinamente de manera rápida, era un hecho que la anestesia en ella no era de gran ayuda. Se aferraban con fuerza a las cobijas, sudaba frío y suaves gemidos de dolor se hacían presentes. - N-No te detengas… - Murmuraba bajo viéndole de reojo apenas si por sobre su hombro. Comprendía que él no era para nada médico pero apreciaba que la ayudase… La cabeza parecía le explotaría y juntando sus rodillas con fuerza mordió su propio labio inferior haciendo este sangrara un poco. Un par de lágrimas salieron y recorrieron sus pálidas mejillas, pero ni la más “ruda” doctora podía con tanto. Terminó por perder totalmente el conocimiento haciendo quizá, de la curación algo más rápida y menos dolorosa para ella… solo se escuchaban sus suaves jadeos de cansancio pero no ejercía fuerza ya sobre ningún agarre de sus manos. Débil y herida sucumbió terminando por ser curada y arropada por su compañero. Con algo de dificultad recobró el conocimiento al poco tiempo de que él dejase de cocer su herida, se levantó un poco y con ayuda de sus manos se arrastró por la cama para terminar al costado de él apegando su pecho desnudo, obligándolo en esa posición a abrazarla… Quizá era el dolor, necesitaba sentirse segura y Marcus era el único en ese momento que podía hacerla sentir así. Cerró sus párpados y escondida en el cuello de él terminó por dormirse, necesitaba recuperarse.
Lina Crestfall
Hoja de personaje
Nivel:
(24/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
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