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Creado por Takami Norihito Vie Jun 03, 2016 12:50 pm
El calor hacía que los pensamientos del albino se agitasen por toda su cabeza, mas no se detenía en su travesía de seguir explorando la isla. Pudo alejarse de Tequila Wolf de una vez, manteniéndose a bastante distancia del punto de partida, algo que aún no terminaba de asimilarlo. El sonido metálico de sus espadas chocando con la vestimenta y sus propias hojas era un tono musical que incitaba a los aldeanos a observar al joven, quien de costumbre portaba su máscara de cuero con una expresión horrorizada. - Calor... puta calor. - Susurró, levantando la mirada por un instante para percatarse de dónde se encontraba ahora exactamente. La base de la marina se situaba en el extremo más alejado de la isla, por lo que supuso que no habría inconveniente por seguir paseando un poco más por dicha isla. Quería memorizar, al menos en una parte aceptable, todos los recorridos posibles del lugar por si tenía que escapar de algún enemigo o cualquier acción que necesitase dicho final.
Decidió pararse por unos momentos para accionar de la cremallera de su máscara para así tomar aire con más facilidad, puesto que necesitaba relajarse por unos momentos aprovechando la sombra y la soledad que ofrecía un callejón. Estaba sediento, aún no terminaba de convencerse a sí mismo sobre el por qué tendría que estar soportando unos climas tan diferentes de su tierra natal. Sabía que viajando encontraría la respuesta, pero hasta entonces, tendría que seguir callando y aguantando todo lo que llegara a su vida y más. Pasó un rápido vistazo por su flanco izquierdo, percatándose de que al final de la calle había una taberna donde se escuchaba los ánimos y los gritos de los clientes con cierta alegría subida de tono. El alcohol, algo así le ayudaría a pasar las penurias. - Una cerveza me ayudará a pasar todo esto. - Comentó en voz alta, animándose y cerrando de nuevo la cremallera, dirigiéndose hasta allí y abrir las puertas de par en par.
Una vez que entró, captó la atención de todos los presentes por unos segundos, hasta que se olvidaron de su existencia por completo y volvieron a seguir con la fiesta y los choques de las jarras. Takami se acercó hasta la barra, la cual no era muy extensa y tomó asiento sobre una banca de madera algo mohosa, pero reconfortable. - Una cerveza, por favor. - Apoyó los codos sobre la barra y suspiró, desviando la mirada a todas las personas que estaban allí presentes. No eran demasiados, pero eran los justos como para que una sensación de exclusión surgiera dentro de su cabeza. La jarra pasó rozando por toda la barra hasta que el mismo enmascarado la atrapó con ambas manos sin desviar la mirada, centrado en la conversación que un grupo de amigos tenían sin un motivo aparente. - ... Qué aburrimiento.
Decidió pararse por unos momentos para accionar de la cremallera de su máscara para así tomar aire con más facilidad, puesto que necesitaba relajarse por unos momentos aprovechando la sombra y la soledad que ofrecía un callejón. Estaba sediento, aún no terminaba de convencerse a sí mismo sobre el por qué tendría que estar soportando unos climas tan diferentes de su tierra natal. Sabía que viajando encontraría la respuesta, pero hasta entonces, tendría que seguir callando y aguantando todo lo que llegara a su vida y más. Pasó un rápido vistazo por su flanco izquierdo, percatándose de que al final de la calle había una taberna donde se escuchaba los ánimos y los gritos de los clientes con cierta alegría subida de tono. El alcohol, algo así le ayudaría a pasar las penurias. - Una cerveza me ayudará a pasar todo esto. - Comentó en voz alta, animándose y cerrando de nuevo la cremallera, dirigiéndose hasta allí y abrir las puertas de par en par.
Una vez que entró, captó la atención de todos los presentes por unos segundos, hasta que se olvidaron de su existencia por completo y volvieron a seguir con la fiesta y los choques de las jarras. Takami se acercó hasta la barra, la cual no era muy extensa y tomó asiento sobre una banca de madera algo mohosa, pero reconfortable. - Una cerveza, por favor. - Apoyó los codos sobre la barra y suspiró, desviando la mirada a todas las personas que estaban allí presentes. No eran demasiados, pero eran los justos como para que una sensación de exclusión surgiera dentro de su cabeza. La jarra pasó rozando por toda la barra hasta que el mismo enmascarado la atrapó con ambas manos sin desviar la mirada, centrado en la conversación que un grupo de amigos tenían sin un motivo aparente. - ... Qué aburrimiento.
- Off/Leed:
- En este rol puede participar quien quiera y quien se anime a parte de Greed y yo. ¡A pasarlo bien!
Takami Norihito
Hoja de personaje
Nivel:
(1/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel |
Creado por Mark Hollow Vie Jun 03, 2016 3:00 pm
Mark se encontraba bagando por las calles de Shells Town bajo el duro sol del medio día sin un rumbo fijo establecido, el motivo era que estaba practicando sus artes de sigilo, algo que acostumbraba a hacer cada día desde que empezó su entrenamiento con el estúpido marine que lo crió, en este sentido el viejo lobo de mar no había defraudado al joven arquero, sus entrenamientos y lecciones le habían situado en un eslabón intermedio entre los profesionales y los genios en ambas disciplinas, la infiltración y la arqueria.
Mark sabia que desde hace un tiempo era buscado, no recordaba haber echo nada para merecerlo, pero siendo su padrastro un hombre con quien no es inteligente encararse sin esperar lo peor, no dudaba que este lo había acusado de abandono del deber y si lo atrapaba no se libraría con una simple bronca, esta vez el joven Mark fue muy lejos y su padrastro le puso precio a su cabeza como si hubiera sido un marine que abandono la armada. Mark pensaba que en este sentido el hombre que lo crió era un exagerado y un idiota, pero no tenia intención de volver con el y mucho menos de dejarse atrapar, si tenia que ser un pirata de ahora en adelante no le importaba, después de todo a el nunca le gusto ser aprendiz de marine.
Mark se movía ensimismado en su entrenamiento buscando el punto ciego de los viandantes y ya de paso choriceando algunas carteras para tener algunos berris en el bolsillo cuando se topo con algo interesante, en un callejón al inicio de la calle pudo ver a un tipo de mascara de cuero, caso curioso al ser un día tan cálido como aquel, este echo llamo tanto la atención del joven arquero que se acerco con precaución al peliblanco, este comenzó a andar y entro en un local poco tiempo después.
-un trago no me va a ir mal- pensó el joven mientras entraba en el lugar aun curioso por el chico de mascara de cuero, a este lo vio sentado a la barra tomando algo, Mark olvidando su entrenamiento como frecuentemente solía hacer se sentó al lado de este, miro lo que estaba tomando y pidió lo mismo, el camarero le paso la bebida y esta patino por la barra hasta llegar a el, pero antes de pasar por su manos tropezó con una grieta en la madera de la barra y casi se derrama, si no fuera por el rápido movimiento de manos de Mark quien logro atraparla sin dejar que se derramada ni una sola gota del alcohólico contenido.
Mark tomo un gran trago y tras dejar salir un gran resoplido pues no acostumbraba a beber ya que este no era un buen habito para un marine que se precie (según su padrastro) y por seguir con su actitud rebelde había decidido imitar a los granujas, pillos y haraganes que se encontraba día a día en los suburbios, para disimular tal actuación lamentable que demostraba su negativas pasadas al alcohol, Mark saludo al joven sentado a su lado con un -Puffff, que flojo, por cierto hola.
Mark sabia que desde hace un tiempo era buscado, no recordaba haber echo nada para merecerlo, pero siendo su padrastro un hombre con quien no es inteligente encararse sin esperar lo peor, no dudaba que este lo había acusado de abandono del deber y si lo atrapaba no se libraría con una simple bronca, esta vez el joven Mark fue muy lejos y su padrastro le puso precio a su cabeza como si hubiera sido un marine que abandono la armada. Mark pensaba que en este sentido el hombre que lo crió era un exagerado y un idiota, pero no tenia intención de volver con el y mucho menos de dejarse atrapar, si tenia que ser un pirata de ahora en adelante no le importaba, después de todo a el nunca le gusto ser aprendiz de marine.
Mark se movía ensimismado en su entrenamiento buscando el punto ciego de los viandantes y ya de paso choriceando algunas carteras para tener algunos berris en el bolsillo cuando se topo con algo interesante, en un callejón al inicio de la calle pudo ver a un tipo de mascara de cuero, caso curioso al ser un día tan cálido como aquel, este echo llamo tanto la atención del joven arquero que se acerco con precaución al peliblanco, este comenzó a andar y entro en un local poco tiempo después.
-un trago no me va a ir mal- pensó el joven mientras entraba en el lugar aun curioso por el chico de mascara de cuero, a este lo vio sentado a la barra tomando algo, Mark olvidando su entrenamiento como frecuentemente solía hacer se sentó al lado de este, miro lo que estaba tomando y pidió lo mismo, el camarero le paso la bebida y esta patino por la barra hasta llegar a el, pero antes de pasar por su manos tropezó con una grieta en la madera de la barra y casi se derrama, si no fuera por el rápido movimiento de manos de Mark quien logro atraparla sin dejar que se derramada ni una sola gota del alcohólico contenido.
Mark tomo un gran trago y tras dejar salir un gran resoplido pues no acostumbraba a beber ya que este no era un buen habito para un marine que se precie (según su padrastro) y por seguir con su actitud rebelde había decidido imitar a los granujas, pillos y haraganes que se encontraba día a día en los suburbios, para disimular tal actuación lamentable que demostraba su negativas pasadas al alcohol, Mark saludo al joven sentado a su lado con un -Puffff, que flojo, por cierto hola.
Mark Hollow
Hoja de personaje
Nivel:
(1/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel |
Creado por Abai Serp Sáb Jun 04, 2016 7:30 am
De nuevo se encontraba en medio de faldas, mujeres despechadas que acudían a sus robustos brazos para saciar su sed de mujer. El marine acababa de estar con una mujer casada o algo peor... divorciada. – Reunión en la entrada al cuartel. – acotó el marine mientras mantenía el papel sujeto con los dedos-. Absorto en su estado de pensamiento, el joven de negro cabello seguía atento en aquel objeto. Aquel papel estaba escrito por alguien cuya caligrafía era envidiable y la textura del papel no era indiferente, la riqueza de aquellos sujetos no sería manchada con las palabras de un marine. El marine terminó en la entrada al lugar donde se debía encontrar con su compañero de misión. El destino había querido que nuestro joven agente partiera hacia el lugar de la misión, así fue como su paso se aligeró mientras notaba como el agotamiento le había hecho mella, demasiada fiesta, demasiado alcohol, demasiadas mujeres. Tenía retacos de aquella noche, algo que le brillaba la memoria como si fuesen golpes del pasado. Habían terminado el turno, habían entrenado lo justo para que su tiempo se redujera en una noche loca, una noche con mujeres, casualmente todas eran esposas de otros marines, mujeres jóvenes que habían sido engatusadas por el aspecto sublime de Greed o eso quería creer. Judal fue el atractivo hombre que, únicamente, se llevó a una dejando que Greed fuese el dulce bombón que las saciara a las demás por la noche, si no recordaba mal, nueve mujeres infieles cayeron por parte del marine, si Judal no podía más Greed sentía como si aquella noche le hubieran absorbido el alma.
Sería divertida la forma en la que nuestro marine mirara a los ojos a los marines cuyas esposas había mancillado. Vivir con su amigo le había marcado muchas noches de fiesta, muchas noches de alcohol siendo algo muy propio entre marines compartiendo un mismo apartamento. El tiempo abreviaba y hacía que nuestro intrépido y atractivo marine surcara las calles con más o menos interés. Como un buen día de misión, el moreno cesó en recoger lo estipulado y surcar el camino hasta la primera taberna. Lugar donde intentaría sacar la mayor información posible. Las puertas se abrieron, el marine se adentró denotando lo que era, un joven y atractivo marine. Su ropa blanca y el pañuelo azul atado a su brazo izquierdo decían muy claro su profesión. – Muy buenas, marineros de agua dulce ¡Busco información! –expuso dejando que sus pasos llegaran hasta la mesa más próxima-. Tomó asiento dejando que sus rojos ojos se postraran en los presentes. Civiles normales y algún que otro sujeto sospechoso. Miró hacia la barra, una pareja de hombres estaban hablando de cosas sin importancia; algo que le haría pasar el tiempo, no quería trabajar y rodearse de personas era una buena forma de no hacerlo.
- ¡Eh! –gritó hacia aquellos dos sujetos-. Venid aquí y tomemos algo, estar sin compañía me mata. –gesticulaba como si se lo ordenado aunque no lo hiciera-. Era marine, era mejor estar de buenas con él.
Sería divertida la forma en la que nuestro marine mirara a los ojos a los marines cuyas esposas había mancillado. Vivir con su amigo le había marcado muchas noches de fiesta, muchas noches de alcohol siendo algo muy propio entre marines compartiendo un mismo apartamento. El tiempo abreviaba y hacía que nuestro intrépido y atractivo marine surcara las calles con más o menos interés. Como un buen día de misión, el moreno cesó en recoger lo estipulado y surcar el camino hasta la primera taberna. Lugar donde intentaría sacar la mayor información posible. Las puertas se abrieron, el marine se adentró denotando lo que era, un joven y atractivo marine. Su ropa blanca y el pañuelo azul atado a su brazo izquierdo decían muy claro su profesión. – Muy buenas, marineros de agua dulce ¡Busco información! –expuso dejando que sus pasos llegaran hasta la mesa más próxima-. Tomó asiento dejando que sus rojos ojos se postraran en los presentes. Civiles normales y algún que otro sujeto sospechoso. Miró hacia la barra, una pareja de hombres estaban hablando de cosas sin importancia; algo que le haría pasar el tiempo, no quería trabajar y rodearse de personas era una buena forma de no hacerlo.
- ¡Eh! –gritó hacia aquellos dos sujetos-. Venid aquí y tomemos algo, estar sin compañía me mata. –gesticulaba como si se lo ordenado aunque no lo hiciera-. Era marine, era mejor estar de buenas con él.
Abai Serp
Hoja de personaje
Nivel:
(6/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel |
Creado por Takami Norihito Sáb Jun 04, 2016 11:03 am
Las conversaciones acabaron por desaparecer de la mente del albino, quien permaneció en un estado inmóvil por unos segundos, manteniendo la jarra en la mano y con la mirada perdida. ¿Qué estaba haciendo? ¿Prestar atención a un grupo de borrachos? Debía de replantearse su vida de una vez y dejar aunque fuese unos minutos esa manía de querer hallar la respuesta por todo lo que le rodeaba. Se giró, apoyando los codos sobre la barra y un pequeño gesto indicó que se sentía mal consigo mismo, suspirando y abriendo la cremallera de la máscara para poder ingerir la cerveza que había adquirido. Sin embargo, su calma se vería rápidamente interrumpida con la llegada de un compañero no deseado. Éste tenía un aspecto frágil y débil, aunque como siempre no debía de juzgar por las primeras impresiones. Casi se le cayó la jarra, mas se limitó a sujetarla y a tragar con bastante ímpetu el contenido alcohólico.
- Claro que es flojo, bebo cerveza. - Rompió su estado zen y decidió responder al comentario del chico, cuyo gorro llamaba un poco la atención, le hacía recordar a como se vería el propio Norihito con su máscara al resto de los demás. - ... ¿Qué te ha traído a sentarte a mi lado? No tengo muchas ganas de hablar, si te soy sincero. - Suspiró, cerrando la cremallera para que no pudiese seguir viendo demasiado más una ligera parte de su rostro. Si quería seguir manteniendo su anonimato, debería de tener cuidado y elegir los momentos adecuados para dar un trago a su bebida. - En fin, ya que te has acercado no te haré mal. ¿Qué me puedes contar de esta ciudad? - Preguntó, dirigiéndose al joven que le había empezado a acompañar sin siquiera mirarle de soslayo, limitándose a observar el líquido que reposaba en la jarra de la cual seguiría consumiendo si no fuese porque ahora tenía a alguien que le estaría mirando. - Acabo de llegar aquí y no conozco mucho salvo la forma de concha en la lejanía que adquiere este lugar. ¿También estás de paso?
Escucharía su respuesta con indiferencia, era verdad que apenas tenía ganas de conversar con el calor de la zona. Debía de coger un poco más de aguante, se dijo en su cabeza, puesto que a la mínima que subieran las temperaturas lo iba a pasar francamente mal. Iba a continuar con la conversación, pero alguien interrumpió la calma del bar abriendo las puertas de par en par, dejando ver la figura bastante trabajada de un marinero, cuyo afán supuso que era el estar metiendo las narices donde no le llamaban. - Oh... esto se va a poner divertido. - Le susurró a su improvisado compañero, poniéndose de pie al sentir la llamada del enemigo para que se acercara a él, alzando la jarra en alto a modo de saludo. Una vez que estuvo lo suficientemente cerca, tomó asiento con bastante formalidad y rodeó el vaso con ambas manos, reflejando una tranquilidad inquebrantable. - Buenas tardes oficial. ¿Qué requiere de nosotros? Tan solo charlábamos. - Preguntó, con un tono juguetón para ver la reacción del recién llegado al local. Dependiendo de cómo se desarrollase la situación, haría una cosa u otra. Algo sí que tenía claro, su papel como pirata era tan temprano que no temía una posible captura del susodicho. Pudo ver su Wanted, no era algo de lo que sentirse orgulloso como pirata.
- Claro que es flojo, bebo cerveza. - Rompió su estado zen y decidió responder al comentario del chico, cuyo gorro llamaba un poco la atención, le hacía recordar a como se vería el propio Norihito con su máscara al resto de los demás. - ... ¿Qué te ha traído a sentarte a mi lado? No tengo muchas ganas de hablar, si te soy sincero. - Suspiró, cerrando la cremallera para que no pudiese seguir viendo demasiado más una ligera parte de su rostro. Si quería seguir manteniendo su anonimato, debería de tener cuidado y elegir los momentos adecuados para dar un trago a su bebida. - En fin, ya que te has acercado no te haré mal. ¿Qué me puedes contar de esta ciudad? - Preguntó, dirigiéndose al joven que le había empezado a acompañar sin siquiera mirarle de soslayo, limitándose a observar el líquido que reposaba en la jarra de la cual seguiría consumiendo si no fuese porque ahora tenía a alguien que le estaría mirando. - Acabo de llegar aquí y no conozco mucho salvo la forma de concha en la lejanía que adquiere este lugar. ¿También estás de paso?
Escucharía su respuesta con indiferencia, era verdad que apenas tenía ganas de conversar con el calor de la zona. Debía de coger un poco más de aguante, se dijo en su cabeza, puesto que a la mínima que subieran las temperaturas lo iba a pasar francamente mal. Iba a continuar con la conversación, pero alguien interrumpió la calma del bar abriendo las puertas de par en par, dejando ver la figura bastante trabajada de un marinero, cuyo afán supuso que era el estar metiendo las narices donde no le llamaban. - Oh... esto se va a poner divertido. - Le susurró a su improvisado compañero, poniéndose de pie al sentir la llamada del enemigo para que se acercara a él, alzando la jarra en alto a modo de saludo. Una vez que estuvo lo suficientemente cerca, tomó asiento con bastante formalidad y rodeó el vaso con ambas manos, reflejando una tranquilidad inquebrantable. - Buenas tardes oficial. ¿Qué requiere de nosotros? Tan solo charlábamos. - Preguntó, con un tono juguetón para ver la reacción del recién llegado al local. Dependiendo de cómo se desarrollase la situación, haría una cosa u otra. Algo sí que tenía claro, su papel como pirata era tan temprano que no temía una posible captura del susodicho. Pudo ver su Wanted, no era algo de lo que sentirse orgulloso como pirata.
- Off:
- Posteamos sin orden, para que quien tenga tiempo que lo vaya haciendo si así lo desea.
Takami Norihito
Hoja de personaje
Nivel:
(1/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel |
Creado por Abai Serp Lun Jun 06, 2016 3:20 pm
Los pasos del marine se ofuscaron al son que su mirada roja se postraba en aquel extraño sujeto, era el momento perfecto para mantener la calma, hacía tiempo que no dejaba de pelear, de emprender combates con más o menos sentido. No estaba mal mantener una amplia conversación con un paisano. Eso acrecentó cuando la palabra del recién llegado llamó su atención, apartó la mirada del arma para posicionarla en la persona que bien le había reconocido como un miembro de su misma raza, un hombre mirando a otro hombre, dos personas a punto de entender sin siquiera decir nada en voz alta. Su destino había llegado a ser marine por voluntad propia, un destino que haría que sus pasos le llevaran hasta lo más alto. – Ese tío tiene una máscara… fijo come humanos y saca cosas de la espalda como aquel de cuya serie no recuerdo… –expresó al cielo mientras guiñaba un ojo al lector-. El saludo de aquel hombre fue respondido por la jarra que recibió del cantinero justo cuando tomó asiento. Era bueno ser amable con los hombres y mujeres, siempre se podía sacar información y ser un buen agente de la justicia ¿Dónde se sacaba mejor información que en una taberna llena de borrachos? Aun cuando la máscara de aquel hombre resultaba extraña y pintoresca, su acompañante desentonaba como el aceite sobre el agua. Un hombre místico y un niño, un crío que seguramente no había visto un pecho de mujer más que el de su progenitora.
Se acercó, el de cabello albino no tardó en demostrar su palabra dejando escapar un tono jovial y amable. - ¡Que os sentéis conmigo! –exclamó emocionado mientras levantaba su jarra para brindar con aquel hombre-. Beber no es malo y menos cuando no estoy de servicio. –ajustó su mirada en aquellos dos sujetos-. Mentir era su especialidad pero sobre todo era mantener la calma para evitar que las personas se alejaran de él por vestir como un marine. – Me llamo Greed ¿Vosotros? –preguntó mientras señalaba al cantinero-. Trae una ronda más, invito. –ganarse amistades era su primer paso como marine-.
Se acercó, el de cabello albino no tardó en demostrar su palabra dejando escapar un tono jovial y amable. - ¡Que os sentéis conmigo! –exclamó emocionado mientras levantaba su jarra para brindar con aquel hombre-. Beber no es malo y menos cuando no estoy de servicio. –ajustó su mirada en aquellos dos sujetos-. Mentir era su especialidad pero sobre todo era mantener la calma para evitar que las personas se alejaran de él por vestir como un marine. – Me llamo Greed ¿Vosotros? –preguntó mientras señalaba al cantinero-. Trae una ronda más, invito. –ganarse amistades era su primer paso como marine-.
- Spoiler:
Off-rol: Lo que mi pj dice en color dorado es algo que no se escucha, es para el lector, mi pj rompe la cuarta pared. Lo que dice en naranja es para los pj's del rol.
Abai Serp
Hoja de personaje
Nivel:
(6/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel |
Creado por Takami Norihito Jue Jun 09, 2016 12:58 pm
Aquel marine pareció ser todo menos lo esperado por el albino, quien amablemente alzó su jarra en alto y chocó contra la suya con bastante ánimo, derramando incluso parte de la bebida contra la mesa. - ¡Salud! - Ya puestos, el pirata debería de dejar a un lado toda la observación para centrarse en pasar un buen rato. Aquel hombre parecía ser bastante afable y animado, por lo que a lo mejor había encontrado lo idóneo para conocer mejor aquella isla y conocer todos sus secretos con un par de palabras. Dio un trago bastante potente y expulsó el aliento como sinónimo de demostrar que la cerveza era bastante buena, escuchando de fondo la presentación del susodicho. - Greed-san, curioso nombre. - Comentó por lo bajo, mientras que se acomodaba en el asiento.
Tras ver la invitación, el enmascarado asintió a modo de demostrar gratitud al contrario. Se desvió un momento de la conversación para mirar hacia atrás, donde estaba la barra. - Parece ser que no tiene muchos ánimos de pasarse por aquí. Es mejor dejarlo como está. - Hizo un gesto con su mano derecha al marine. - Su bebida la podríamos compartir. Cuanto más sea para nosotros, mejor. - Alegó, soltando una risa espontánea para volverse a girar y quedar de frente contra el pelinegro. Comenzó a acariciar el borde de la jarra con el dedo índice, bastante animado por lo que sería un encuentro bastante curioso. Era el primer contacto que hacía en solitario con alguien como él, así que aprovecharía cualquier momento para sacar algún tipo de información. - Dime, ¿Eres de por aquí? Estoy de paso por la isla y me gustaría saber alguna que otra cosa de la zona. El calor me está matando.
Tras ver la invitación, el enmascarado asintió a modo de demostrar gratitud al contrario. Se desvió un momento de la conversación para mirar hacia atrás, donde estaba la barra. - Parece ser que no tiene muchos ánimos de pasarse por aquí. Es mejor dejarlo como está. - Hizo un gesto con su mano derecha al marine. - Su bebida la podríamos compartir. Cuanto más sea para nosotros, mejor. - Alegó, soltando una risa espontánea para volverse a girar y quedar de frente contra el pelinegro. Comenzó a acariciar el borde de la jarra con el dedo índice, bastante animado por lo que sería un encuentro bastante curioso. Era el primer contacto que hacía en solitario con alguien como él, así que aprovecharía cualquier momento para sacar algún tipo de información. - Dime, ¿Eres de por aquí? Estoy de paso por la isla y me gustaría saber alguna que otra cosa de la zona. El calor me está matando.
Takami Norihito
Hoja de personaje
Nivel:
(1/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel |
Creado por Abai Serp Jue Jun 09, 2016 1:05 pm
El día no era bueno, el marine había estado trabajando y apenas se mantenía en pie; agotado, demasiado incluso para estar tranquilo en una cantina. ¿Qué buscaba? En parte descansar y ¿por qué no? Información sobre criminales. Siempre trabajaba aun cuando su agotado cuerpo le exigiera descanso. Era parte de su alma, de su pasión por la justicia y el afán por pelear con criminales, golpearles con fuerza para que su determinación les cambiara ¿Cambiar? – Pegarles hasta romperles tantos huesos que no quieran ser piratas de nuevo. –respondió a las posibles dudas que se tuvieran-. ¿Acaso eso quería decir que era un marine bueno que no buscaba causar daños a los piratas? – No, yo les devuelvo lo que han hecho. –expresó con total ira en sus palabras-. Si roban, yo les robo la varonilita derrotándolos en una batalla, si asesinan les asesinos. –respondió de nuevo a las posibles dudas-. Soy fan de la ley del Talión. Ojo por ojo, diente por diente, mano por mano, pie por pie… -recitó aquella ley como si la tuviera impregnada en el más hondo de su alma-.
Regresando al presente, aquel hombre de blanco cabello se había acercado, algo bueno pues desobedecer a un marine no era bueno. Repitiendo la misma palabra brindó con este dejando escapar una nívea sonrisa; era bueno entablar conversación con las personas aunque fuesen totalmente desconocidos entre ellos. El otro hombre quedó en silencio, rezagado, sin decir nada sobre el asiento permitiendo que aquellos dos hombres pudieran quedar solos y beber tranquilos. La presentación del moreno parecía haber llamado la atención del albino, acto que se quedó en un segundo plano pues el tema principal era estar rodeado de personas, beber y divertirse.
Las conversaciones se `podía dar y todo mientras el moreno seguía bebiendo de aquella jarra, el ron era algo inusual y lo prefería a la cerveza habitual. La pregunta llegó como un jarro de agua fría, era el momento de hablar y no sabía muy bien qué responder. – La verdad es que estoy de misión, llevo aquí una semana, poco tiempo para conocerla bien. –respondió mientras volvía a dar un nuevo sorbo a la dulce bebida-. ¿Dulce? Estar acostumbrado al café hacía que todo lo demás fuese dulce para su paladar. – Pero soy marine, te puedo responder lo que sepa, siempre que no me pidas cosas como las llaves del cuartel más cercano o información secreta del gobierno. –era broma pero toda broma guarda algo de verdad-.
Regresando al presente, aquel hombre de blanco cabello se había acercado, algo bueno pues desobedecer a un marine no era bueno. Repitiendo la misma palabra brindó con este dejando escapar una nívea sonrisa; era bueno entablar conversación con las personas aunque fuesen totalmente desconocidos entre ellos. El otro hombre quedó en silencio, rezagado, sin decir nada sobre el asiento permitiendo que aquellos dos hombres pudieran quedar solos y beber tranquilos. La presentación del moreno parecía haber llamado la atención del albino, acto que se quedó en un segundo plano pues el tema principal era estar rodeado de personas, beber y divertirse.
Las conversaciones se `podía dar y todo mientras el moreno seguía bebiendo de aquella jarra, el ron era algo inusual y lo prefería a la cerveza habitual. La pregunta llegó como un jarro de agua fría, era el momento de hablar y no sabía muy bien qué responder. – La verdad es que estoy de misión, llevo aquí una semana, poco tiempo para conocerla bien. –respondió mientras volvía a dar un nuevo sorbo a la dulce bebida-. ¿Dulce? Estar acostumbrado al café hacía que todo lo demás fuese dulce para su paladar. – Pero soy marine, te puedo responder lo que sepa, siempre que no me pidas cosas como las llaves del cuartel más cercano o información secreta del gobierno. –era broma pero toda broma guarda algo de verdad-.
Abai Serp
Hoja de personaje
Nivel:
(6/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel |
Creado por Takami Norihito Jue Jun 09, 2016 1:16 pm
Al parecer, aquello de que no estaba de servicio fue una mentira con las piernas muy cortas. Takami prefirió no reaccionar ante aquel hecho, pues se limitó a permanecer tanto con la misma postura que con la misma sonrisa, para nada fingida. Sin embargo, ahora mediría meticulosamente cada una de sus palabras y procurando tener la máxima cautela posible, pues una frase en un momento equivocado y significaría el fin para su carrera como pirata. Además, tampoco tenía ganas de luchar en un sitio como aquél, puesto que quería relajarse y desconectar un poco del calor inmenso que hacía a las afueras de la taberna. Supuso que se mantendría allí dentro - si todo iba bien - hasta que el sol se fuese ocultando o al menos una brisa refrescara las calles de la ciudad.
Lo que sí le resultó bastante curioso, fue la forma en la que el marine ofreció con todo lujo de expresión otorgar cualquier tipo de información que no resultase peligrosa para su puesto o privada, algo que acentuó la sonrisa del albino por unos instantes. Se había emocionado, mas pudo controlar su instinto primario, por lo que no debió de notarse la manera en la que sonrió. - De misión... ¿Sería mucho problema preguntar sobre qué trata? Estaré encantado de ayudar si está en mi mano. - Como cualquier civil con valentía, se ofreció a ayudar en el trabajo al pelilargo, detalle que a lo mejor le hacía conseguir más puntos de confianza al contrario. - No es algo que pueda meterte en un compromiso. La verdad es que me preguntaba si este sitio siempre tiene este clima tan cálido, o si se han visto muchos piratas causando problemas por estos lugares. La verdad es que puede llegar a ser molesto para un turista como yo... presenciar un desorden público. - Dejó caer una risa, como si aplicase el sarcasmo, a la par que seguía ingeriendo de su bebida. No debía de hablar más de la cuenta, por lo que tenía cuidado con todo lo que salía por su boca antes de meterse de lleno en la boca del lobo. Después de todo, a pesar de ser bandos contrarios, le había caído bien un tipo como Greed.
Lo que sí le resultó bastante curioso, fue la forma en la que el marine ofreció con todo lujo de expresión otorgar cualquier tipo de información que no resultase peligrosa para su puesto o privada, algo que acentuó la sonrisa del albino por unos instantes. Se había emocionado, mas pudo controlar su instinto primario, por lo que no debió de notarse la manera en la que sonrió. - De misión... ¿Sería mucho problema preguntar sobre qué trata? Estaré encantado de ayudar si está en mi mano. - Como cualquier civil con valentía, se ofreció a ayudar en el trabajo al pelilargo, detalle que a lo mejor le hacía conseguir más puntos de confianza al contrario. - No es algo que pueda meterte en un compromiso. La verdad es que me preguntaba si este sitio siempre tiene este clima tan cálido, o si se han visto muchos piratas causando problemas por estos lugares. La verdad es que puede llegar a ser molesto para un turista como yo... presenciar un desorden público. - Dejó caer una risa, como si aplicase el sarcasmo, a la par que seguía ingeriendo de su bebida. No debía de hablar más de la cuenta, por lo que tenía cuidado con todo lo que salía por su boca antes de meterse de lleno en la boca del lobo. Después de todo, a pesar de ser bandos contrarios, le había caído bien un tipo como Greed.
Takami Norihito
Hoja de personaje
Nivel:
(1/100)
Haki:
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Creado por Mark Hollow Jue Jun 09, 2016 2:09 pm
Mark se encogió de hombros por un segundo al escuchar a un tipo gritar al entrar a la taberna, pedir bebida, saludar he invitarle a el y su compañero de barra a tomar con el, ¿el motivo de por que se encogió? simple, Mark había notado en el acto que el tipo era un marine, no en vano el joven arquero creció y se crió entre marines y toda la vida los había visto y escuchado hablar y actuar, el sabia que en el momento que entro que era marine simplemente por la cantidad de recuerdos que tenia sobre como entraban los marines a los bares a buscarlo a el por mandato de su padrastro un oficial de la marina, por lo que cuando se le erizaron los pelillos de la nuca el joven rememoro la cantidad de noches que los marines de su padre le escoltaban de vuelta a casa y por un segundo su cuerpo y mente pensaron que ese marine estaba ahí por el, que había sido enviado a buscarle, motivo por el que se quedo quieto como una estatua, inmóvil, esperando que el sujeto se acercara a el con alguna escusa estúpida al ver que no se levantaba, en el momento que se le pusiera a tiro Mark el rompería una botella en la cabeza y escaparía como alma que lleva el diablo, pero esto nunca paso, el sujeto marine se quedo hablando como si tal cosa con el peli blanco he incluso le revelo que era marine y estaba ahí por una misión, al decir esto no pareció nervioso para nada, por lo que o era muy buen actor o en verdad no estaba detrás de Mark, quizás este se había apresurado a prejuzgar la situación, de echo seria extraño no unirse a ellos y podría empezar a llamar la atención del marine, ademas de algún modo tenia que descubrir si le estaban buscando o no, vería si tendría una oportunidad de sacar esta información de dicho marine.
Mark se levanto y como si nada se sentó junto a los otros dos, se presento con un hola y lleno su baso con el contenido de una de las botellas en la mesa, acto seguido lo bebió de un trago dejando salir un segundo después un suspiro que mezclaba ardor de garganta y aliento enardecido por la bebida, al final de cuentas no era capaz de tolerar aun el alcohol muy bien, y esto se revelaba en su cara la cual se estaba tornando roja por momentos, dejando ver el motivo por el que muchos marines se ofrecían voluntarios para ir a buscarle en sus noches de borrachera, el joven lucia mas femenino de lo normal cuando bebía, ya que relajaba sus hombros, amaneraba su postura y juntaba los brazos sobre sus piernas al tiempo que dejaba caer su mirada sobre el vaso frente a el.
Aun no entiendo por que me cuesta tolerar esta bebida, llevo años bebiendo.
Mark se levanto y como si nada se sentó junto a los otros dos, se presento con un hola y lleno su baso con el contenido de una de las botellas en la mesa, acto seguido lo bebió de un trago dejando salir un segundo después un suspiro que mezclaba ardor de garganta y aliento enardecido por la bebida, al final de cuentas no era capaz de tolerar aun el alcohol muy bien, y esto se revelaba en su cara la cual se estaba tornando roja por momentos, dejando ver el motivo por el que muchos marines se ofrecían voluntarios para ir a buscarle en sus noches de borrachera, el joven lucia mas femenino de lo normal cuando bebía, ya que relajaba sus hombros, amaneraba su postura y juntaba los brazos sobre sus piernas al tiempo que dejaba caer su mirada sobre el vaso frente a el.
Aun no entiendo por que me cuesta tolerar esta bebida, llevo años bebiendo.
- OFF:
- Perdón por tardar, he tenido unos días ocupados, también quiero aclarar que mi personaje es lo que se considera un androgino, por lo que puede ser confundido con hombre o mejer, pero ahí veces en los que su manera de actuar hace que se vea mas como uno de ambos géneros, en este caso debido a la bebida esta adoptando una postura sumisa.
Mark Hollow
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Creado por Abai Serp Jue Jun 09, 2016 2:35 pm
La conversación con aquel hombre se podía llevar de dos formas, por las buenas y por las muy buenas; esto hacía que el destino se viese bien mermado al hacer que dos hombres pudieran brindar sin saber bien que eran enemigos naturales. Cruel destino, cruel miseria la de hacer que la situación se viese comprometida con el bien estar de aquel marine, bebiendo y entablando conversaciones con alguien singular. Tenía que mantener la compostura, estaba ante gente inocente y actuar como un burdo marine no era apropiado, debía guardar decoro y actuar como un educado civil. Le dio un nuevo sorbo a la jarra mientras atendía lo que su amigo expresaba ¿Amigo? En efecto, el marine consideraba amigos todo aquel con el que bebiera o se riera, actos que un hombre de verdad podía catalogar como tesoros en una vida de aventuras. La conversación interesante llevada a un camino que el marine prefería mantener en secreto. – Se han dado casos de asesinatos en la zona, investigo todas las personas sospechosas. –alegó el moreno mientras volvía a beber de aquella jarra prácticamente vacía-. La verdad es que es un tema peliagudo, siempre mata mujeres y todas son de familia pobre ¿Qué motivos tiene? Hay sospechas de algún noble pero si así fuera no… -detuvo su palabra mientras dejaba la jarra sobre la mesa-. No le podremos hacer nada, los ricos están protegidos. –lamenta a su suerte, lamentaba la sociedad tal y como estaba en la actualidad-. Las palabras de aquel hombre eran las propias de un turista, de un civil más.
El moreno negó con la cabeza, no había habido muchos altercados con piratas. – Quitando a ese asesino, no. –expresó mientras hacía que el cantinero se acercara para rellenar las bebidas-. No hay piratas, no al menos que se dejen ver con facilidad. –terminó su cometido dejando que aquel hombre se pudiera expresar como era debido-. Todavía no me has dicho tu nombre ¿Vienes por trabajo? –quería saber algo de su acompañante-. Era extraño beber con un total desconocido. Cuando la conversación parecía haberse llevado por el buen camino, el otro individuo hizo acto de presencia, se sentó junto a ellos y formuló una verdad. Había personas que podían no ser tolerantes con el alcohol, un hecho que se mejoraba con el tiempo, con la práctica. – Buenas señorita ¿Qué bebe? –preguntó pues el aspecto de aquel sujeto era más similar a una mujer que un hombre-. la conversación se podía terminar pronto o ser lanzada en el futuro con nuevos temas que debatir.
El moreno negó con la cabeza, no había habido muchos altercados con piratas. – Quitando a ese asesino, no. –expresó mientras hacía que el cantinero se acercara para rellenar las bebidas-. No hay piratas, no al menos que se dejen ver con facilidad. –terminó su cometido dejando que aquel hombre se pudiera expresar como era debido-. Todavía no me has dicho tu nombre ¿Vienes por trabajo? –quería saber algo de su acompañante-. Era extraño beber con un total desconocido. Cuando la conversación parecía haberse llevado por el buen camino, el otro individuo hizo acto de presencia, se sentó junto a ellos y formuló una verdad. Había personas que podían no ser tolerantes con el alcohol, un hecho que se mejoraba con el tiempo, con la práctica. – Buenas señorita ¿Qué bebe? –preguntó pues el aspecto de aquel sujeto era más similar a una mujer que un hombre-. la conversación se podía terminar pronto o ser lanzada en el futuro con nuevos temas que debatir.
Abai Serp
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