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Creado por Albedo Vie Jun 10, 2016 8:49 pm
Recuerdo del primer mensaje :
North Blue {Flevance} {Nublado}
Repugnancia... Era lo único que expresaría la cara de la Gyojin viendo aquel desfile de carne, uno tras otro, aparecer frente a sus orbes, el hecho de que el clima estuviera de tan malhumor era una clara referencia a aquella desgracia que le ocurría ahora a la médico, el hecho de que esta se encuentre rodeada de más de un humano... ¿Era esto a lo que le llaman Karma?... Bah, eso no era importante en ese instante. Los pensamientos de la pelinegra solo estarían sumidos en una intensa oscuridad, mientras que unas palabras rebotarían por su cráneo, aquella era una clara interrogante para aquel que decía ser su Amo, el que le haya encomendado reunir a todos aquellos revolucionarios para un nuevo grupo... Todos humanos ¡¿Porqué señor?!. El interior de su mente solo mostraba el cuerpo de la fémina postrada clamando por una liberación de tal situación, sin embargo, por fuera, aquella cara solo remarcaba cierto disgusto y una clara cara de poker.
Pensé que serían menos... Maldición... La paciencia de Albedo con tantos humanos se acortaba cada vez más, cada uno de ellos le restaría cierto tiempo a lo que la fémina podía aguantar, el que sean tantos solo limitaba más la suerte de varios de ellos, entre los cuales permanecerían los últimos llegados. Sin embargo, la sorpresa había sido la pequeña rata que se había encontrado la gatuna revolucionaria. Presentaciones por parte de algunos revolucionarios, dando una clara identificación de la facción que se presentaba en todos ellos ante una completa desconocida solo quedaba acallar a la rubia. - Vaya... una pequeña rata... - Los comentarios que había realizado la extensa cantidad de participantes habían sido obviados por Albedo, sumado a que la mayoría solamente eran comentarios absolutamente irrelevantes. Sin embargo, había cierta cosa que se había cumplido de las palabras que enviaron a la Gyojin al lugar. La fémina con rasgos felinos había hecho aparición, y con ello la líder del grupo. - Efectivamente... - Diría en continuación a los últimos dichos del pelirrojo, dejando el pequeño asunto de la rata para más adelante.
- Fueron reunidos en este sitio especialmente para iniciar un viaje bastante arriesgado... - Haría una pausa mientras que su cuerpo se desligaría de la roca y comenzaría a pisar aquella arena húmeda con una tonalidad más oscura de lo normal producto de las lloviznas que por el momento parecían finalizar. Las nubes cargadas desaparecerían poco a poco, no obstante, aún había algún que otro rastro en el lugar. - Como más de uno sabrán, la mayoría de ustedes tienen un alto nivel de búsqueda, y ese hecho solo fue realizado por las acciones que llevaron a cabo. - Haría una pausa mientras que sus orbes se dirigirían hacía abajo, observando a la rubia desconocida, volviendo a su posición original para seguir hablando a todos los presentes, sin importar que esta este en el lugar, después de todo, o era la chance de tener una esclava, o una perfecta cena. - Una viaje poco común es lo que llevaremos a cabo, con el fin de esconder sus cabezas o al menos hacerles perder la pista durante cierto periodo de tiempo nos adentraremos en una región bastante peculiar. - Sin duda alguna, aquella región era el Grand Line, la próxima parada de aquel grupo. Su mirada se centraría en el pelirrojo, para luego dirigir su mirada hacía la fémina de cabellera plateada - Shigure será quien nos lidere de momento en nuestra travesía. - Diría de forma seca mientras su zurda daría aviso a la figura de la fémina gatuna, la palma de la fémina dejaba apuntar con sus dedos a la mujer que había acabado con el juego del escondite de la misteriosa rubia, ahora solo se tendría que esperar la continuación del acto.
Pensé que serían menos... Maldición... La paciencia de Albedo con tantos humanos se acortaba cada vez más, cada uno de ellos le restaría cierto tiempo a lo que la fémina podía aguantar, el que sean tantos solo limitaba más la suerte de varios de ellos, entre los cuales permanecerían los últimos llegados. Sin embargo, la sorpresa había sido la pequeña rata que se había encontrado la gatuna revolucionaria. Presentaciones por parte de algunos revolucionarios, dando una clara identificación de la facción que se presentaba en todos ellos ante una completa desconocida solo quedaba acallar a la rubia. - Vaya... una pequeña rata... - Los comentarios que había realizado la extensa cantidad de participantes habían sido obviados por Albedo, sumado a que la mayoría solamente eran comentarios absolutamente irrelevantes. Sin embargo, había cierta cosa que se había cumplido de las palabras que enviaron a la Gyojin al lugar. La fémina con rasgos felinos había hecho aparición, y con ello la líder del grupo. - Efectivamente... - Diría en continuación a los últimos dichos del pelirrojo, dejando el pequeño asunto de la rata para más adelante.
- Fueron reunidos en este sitio especialmente para iniciar un viaje bastante arriesgado... - Haría una pausa mientras que su cuerpo se desligaría de la roca y comenzaría a pisar aquella arena húmeda con una tonalidad más oscura de lo normal producto de las lloviznas que por el momento parecían finalizar. Las nubes cargadas desaparecerían poco a poco, no obstante, aún había algún que otro rastro en el lugar. - Como más de uno sabrán, la mayoría de ustedes tienen un alto nivel de búsqueda, y ese hecho solo fue realizado por las acciones que llevaron a cabo. - Haría una pausa mientras que sus orbes se dirigirían hacía abajo, observando a la rubia desconocida, volviendo a su posición original para seguir hablando a todos los presentes, sin importar que esta este en el lugar, después de todo, o era la chance de tener una esclava, o una perfecta cena. - Una viaje poco común es lo que llevaremos a cabo, con el fin de esconder sus cabezas o al menos hacerles perder la pista durante cierto periodo de tiempo nos adentraremos en una región bastante peculiar. - Sin duda alguna, aquella región era el Grand Line, la próxima parada de aquel grupo. Su mirada se centraría en el pelirrojo, para luego dirigir su mirada hacía la fémina de cabellera plateada - Shigure será quien nos lidere de momento en nuestra travesía. - Diría de forma seca mientras su zurda daría aviso a la figura de la fémina gatuna, la palma de la fémina dejaba apuntar con sus dedos a la mujer que había acabado con el juego del escondite de la misteriosa rubia, ahora solo se tendría que esperar la continuación del acto.
- Nota:
- Debido al próximo Time Skip, se pide que el ritmo de posteo sea dentro de las próximas 12 horas desde el último post. Con el fin de terminar de forma rápida dicho tema y dejar por finalizado esta etapa, para así, dar comienzo nuevamente post Time Skip. En caso de que no se respete aquellas 12 horas, se dará libre paso al siguiente, dando un salto de turno sobre el individuo. Si se tiene un tiempo limitado para postear, y el usuario no desea integrar su personaje al tema lo podrá hacer, este se podrá desarrollar normalmente con aquel personaje excluido como espectador.
Albedo
Hoja de personaje
Nivel:
(15/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 1 |
Creado por Sinbad Lun Jun 13, 2016 10:27 pm
La situación parecía bastante repetitiva, la chica no parecía confiable pero poco a poco trataba de expresar más claridad en sus actos. Sinbad se aburría pero le había llamado la atención los planes de la chica que llego antes que él, la del abanico y el parche, ciertamente tenía unas ideas sobre inspeccionar a fondo a la llamada Resha. Parecía que entre los presentes había tanta o más perversión como en la mente del mujeriego de ropas holgadas -Estoy de acurdo con la felina y Juliette, si no me equivoco- señalaba a la de la interesante propuesta mientras analizaba y calculaba precisamente la distribución de la rubia sin la ropa que portaba.
Paralelamente la conversación entre el tipo de armadura y pelirrojo, aparentemente llamado Ray, parecía tener cierto trasfondo, una historia pasada, de esas que probablemente son contada entre copas. Se veía a un par de tipos fuertes y que confiaban mutuamente en el otro, de no ser así no se hubiesen aceptado tan rápidamente pensaba sin tener idea de que misiones podían haber realizado. Las que Sinbad había hecho no pasaban de pequeñeces desde el tiempo que tenía de pertenecer a la sigilosa estructura que lo tenía ese día allí.
Las palabras de la gyojin revelaban la espera del futuro viaje a realizar. Aún no se había dicho nada preciso del rumbo a lo que Sinbad solo acotaría -Por cierto si van para Grand Line paso por completo, tengo aún varios pendientes en el North Blue - decía mientras cerraba el puño con un nostálgico desprecio hacia la nobleza del reino que lo vio crecer - y denle de una ves la oportunidad a la rubia, no parece una kamikaze a fin de cuentas, sería algo demasiado absurdo- decía pasando del leve enojo pasado a la aceptación presente que los envolvía, mientras la señalaba con el dedo pulgar y con sincero desinterés -Los acompaño hasta la nave ¿si ese barco pudiese hacer una escala en Lvneel? Les agradecería también un aventón, yo tengo un par de asuntos que arreglar con mi familia y el reino, si no no hay problema- aguardaba la respuesta y de igual manera iba a ir hasta el puerto para ver el barco, la alada caminaba en otra dirección pero a fin de cuentas recorrer Flevance siempre era divertido y en compañía de esas algunas bellas chicas era algo de lo que no se podía quejar. También era simple curiosidad por ver un barco revolucionario, tenía un par de años de no ver uno.
En todo caso se podría despedir, quedarse unos días en la isla y disfrutar del las comodidades como un civil. Luego tal vez viajar hasta donde su alma le indicaba o pasar unos meses allí, le gustaba la libertad, podía esperar por otro llamado de la armada o no, a fin de cuentas había sido un soldado bastante esporádico. El dinero no le importaba y solía ganar más por su cuenta, en ocasiones devolvía el pago cuando no lo necesitaba. Sus ideales estaban arraigados pero habían intereses personales que siempre mueven más a una persona antes que una causa mayor como lo era acabar con el gobierno mundial, el suyo era primero acabar con ese reino, o saquear un poco más como en el primer atentado hacia su burgués padre.
Paralelamente la conversación entre el tipo de armadura y pelirrojo, aparentemente llamado Ray, parecía tener cierto trasfondo, una historia pasada, de esas que probablemente son contada entre copas. Se veía a un par de tipos fuertes y que confiaban mutuamente en el otro, de no ser así no se hubiesen aceptado tan rápidamente pensaba sin tener idea de que misiones podían haber realizado. Las que Sinbad había hecho no pasaban de pequeñeces desde el tiempo que tenía de pertenecer a la sigilosa estructura que lo tenía ese día allí.
Las palabras de la gyojin revelaban la espera del futuro viaje a realizar. Aún no se había dicho nada preciso del rumbo a lo que Sinbad solo acotaría -Por cierto si van para Grand Line paso por completo, tengo aún varios pendientes en el North Blue - decía mientras cerraba el puño con un nostálgico desprecio hacia la nobleza del reino que lo vio crecer - y denle de una ves la oportunidad a la rubia, no parece una kamikaze a fin de cuentas, sería algo demasiado absurdo- decía pasando del leve enojo pasado a la aceptación presente que los envolvía, mientras la señalaba con el dedo pulgar y con sincero desinterés -Los acompaño hasta la nave ¿si ese barco pudiese hacer una escala en Lvneel? Les agradecería también un aventón, yo tengo un par de asuntos que arreglar con mi familia y el reino, si no no hay problema- aguardaba la respuesta y de igual manera iba a ir hasta el puerto para ver el barco, la alada caminaba en otra dirección pero a fin de cuentas recorrer Flevance siempre era divertido y en compañía de esas algunas bellas chicas era algo de lo que no se podía quejar. También era simple curiosidad por ver un barco revolucionario, tenía un par de años de no ver uno.
En todo caso se podría despedir, quedarse unos días en la isla y disfrutar del las comodidades como un civil. Luego tal vez viajar hasta donde su alma le indicaba o pasar unos meses allí, le gustaba la libertad, podía esperar por otro llamado de la armada o no, a fin de cuentas había sido un soldado bastante esporádico. El dinero no le importaba y solía ganar más por su cuenta, en ocasiones devolvía el pago cuando no lo necesitaba. Sus ideales estaban arraigados pero habían intereses personales que siempre mueven más a una persona antes que una causa mayor como lo era acabar con el gobierno mundial, el suyo era primero acabar con ese reino, o saquear un poco más como en el primer atentado hacia su burgués padre.
Sinbad
Hoja de personaje
Nivel:
(13/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel |
Creado por Juliette Di Salvo Mar Jun 14, 2016 3:33 pm
Las cosas en el lugar comenzaban a tornarse un tanto peculiares y no era para menos, si los propios movimientos de la joven ingeniero daban bastante para pensar. Lentamente retiró su abanico de la joven de rubios cabellos guardando total silencio ante la negativa de los presentes para atarla, una suave risilla hizo que Jull se delatara, extendiendo su abanico subió nuevamente sus labios, entrecerrando su mirada algo inquieta e incómoda giró su vista hacia la joven de cuernos - Juraría que quieres asesinarnos con la mirada. - murmuró antes de asentir y simplemente acatar. - Bien, no la amarraremos, nada de atarla y sí, más le vale que no intente nada tonto porque somos demasiados. - Encogiéndose de hombros giró su vista hacia donde anteriormente se encontraba haciendo un suave sonido con su lengua como si la chasqueara más el sonido era dulce. - Sal de ahí, es hora de irnos capitán. - Con una sonrisa movía suavemente su abanico frente a su rostro mientras paciente esperaba.
Secos sonidos de pesados pasos resonaban contra la arena algo húmeda y como si presagio de que un imponente ser aparecería de entre las suaves sombras un enorme panda de poco más de metro treinta con un par de alas hechas de tela y bamboo asó como una gorrita y lentes de propios a los pilotos aparecería con algunas mochilas y morrales encima en donde las armas y herramientas de la ingeniero bien guardadas eran protegidas por tan imponente animal. - El capitán Bamboo les saluda a todos. - Murmuró comenzando a caminar y tras ella el animal. - Y no creo que hagamos parada a donde te diriges, chico. - Musitó entrecerrando su mirada viéndole de reojo sin dejar de caminar a paso lento esperando a la alada - Supongo vamos de manera directa a nuestro destino y no queremos retrasos. - Seca y tajante siguió con su camino. - Deberían darse prisa, comienza a hacer algo de frío por la lluvia ~ -
Secos sonidos de pesados pasos resonaban contra la arena algo húmeda y como si presagio de que un imponente ser aparecería de entre las suaves sombras un enorme panda de poco más de metro treinta con un par de alas hechas de tela y bamboo asó como una gorrita y lentes de propios a los pilotos aparecería con algunas mochilas y morrales encima en donde las armas y herramientas de la ingeniero bien guardadas eran protegidas por tan imponente animal. - El capitán Bamboo les saluda a todos. - Murmuró comenzando a caminar y tras ella el animal. - Y no creo que hagamos parada a donde te diriges, chico. - Musitó entrecerrando su mirada viéndole de reojo sin dejar de caminar a paso lento esperando a la alada - Supongo vamos de manera directa a nuestro destino y no queremos retrasos. - Seca y tajante siguió con su camino. - Deberían darse prisa, comienza a hacer algo de frío por la lluvia ~ -
Juliette Di Salvo
Hoja de personaje
Nivel:
(13/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel |
Creado por Ray Kazaragi Mar Jun 14, 2016 4:30 pm
Todo parecía estar dicho incluyendo la aparición de la rubia que estaba rodeada por gente que si intentaba hacer un movimiento extraño no dudarían en hacerle caso y en esta vez sí en llegar a atarla para evitar que hiciera otro movimiento en escapar o en contra de alguno de los presentes. La peliblanca con orejas de gato parecía divertirse con la rubia como si se tratara de un juguete como ella mismo estaba diciendo que sería si es que intentaba un movimiento escapar, se adelantaba a lo que había dicho por lo que el pelirrojo esperaba que no fuera así para todo lo que decía. Se quedó pensando en las palabras de Resha sobre el aventón, a menos que quisiera ir al mismo lugar que ellos no sería un aventón ya que estaba obligada a acompañarlos de momento. — No creo que te demos un aventón esta vez… quizás para la próxima. — Miraría a la rubia siendo empujada por la capitana del grupo quienes estaban siguiendo a la Gyojin para llegar al barco que seguramente tendría que manejar él. — ¿Quién navegara el barco? — No todos al momento de presentarse dijeron su profesión por lo cual no sabía si es que había otro navegante entre ellos, en el caso de no haber otro tendría que estar obligado a navegar el barco esta Grand Line.
Avanzaría a paso lento detrás de Albedo para ver el barco que andaría bajo sus movimientos, prácticamente los movimientos del grupo estaban en sus manos ya que él sería quien los llevaría a las islas que visitarían en el futuro. Aquel pelimorado de nombre Sinbad parecía que no seguiría con ellos por lo que estaba diciendo. — No haremos ninguna parada, iremos directamente dijo Albedo por lo que tendrás que buscar otra manera de llegar al North Blue. — Le diría de forma seca sin mirar a donde se encontraba. Como se quedaría en los blues podría ser una fuente de información a ellos que se encontrarían en un mar distinto, como una especie de aliado con el cual contar, metió una mano a sus bolsillos sacando un Den Den Mushi para lanzarlo donde se encontraba Sinbad. — Te lo dejo para que puedas hablar con nosotros cada vez que lo necesites, si te enteras de cualquier cosa avísanos a la brevedad. Si no lo haces la próxima vez que te vea te matare. — No era la mejor manera de pedírselo pero con eso seguramente lo haría sin dudarlo. — Yo tengo uno igual así que no deberías tener problemas para comunicarte con nosotros. — Seguiría avanzando sin mirar atrás, la misión lo estaba emocionando incluso antes de llegar a donde debían.
Avanzaría a paso lento detrás de Albedo para ver el barco que andaría bajo sus movimientos, prácticamente los movimientos del grupo estaban en sus manos ya que él sería quien los llevaría a las islas que visitarían en el futuro. Aquel pelimorado de nombre Sinbad parecía que no seguiría con ellos por lo que estaba diciendo. — No haremos ninguna parada, iremos directamente dijo Albedo por lo que tendrás que buscar otra manera de llegar al North Blue. — Le diría de forma seca sin mirar a donde se encontraba. Como se quedaría en los blues podría ser una fuente de información a ellos que se encontrarían en un mar distinto, como una especie de aliado con el cual contar, metió una mano a sus bolsillos sacando un Den Den Mushi para lanzarlo donde se encontraba Sinbad. — Te lo dejo para que puedas hablar con nosotros cada vez que lo necesites, si te enteras de cualquier cosa avísanos a la brevedad. Si no lo haces la próxima vez que te vea te matare. — No era la mejor manera de pedírselo pero con eso seguramente lo haría sin dudarlo. — Yo tengo uno igual así que no deberías tener problemas para comunicarte con nosotros. — Seguiría avanzando sin mirar atrás, la misión lo estaba emocionando incluso antes de llegar a donde debían.
Ray Kazaragi
Hoja de personaje
Nivel:
(30/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
Creado por Jonathan Wayland Mar Jun 14, 2016 4:38 pm
Extraño. Esa era la mejor palabra para definir el grupo que se había formado en aquel momento, contando a la rubia infiltrada y al sujeto que finalmente no los acompañaría en su viaje. ¿Cómo diablos los superiores revolucionarios habían aceptado a semejantes personajes en sus filas? El Skypean sabía de sobra que no era nadie para juzgar los motivos de fondo de las personas que se cruzaban en su vida, aunque eso no significa que aprobara así como así ciertas formas de actuar. Aun viéndose influenciado por su encuentro con la figura mecánica de aspecto infernal, trataba de contener ciertos impulsos dentro de sí mismo para no caer en la tentación. Por aquella gran pasión sobre la lectura, había entrado en contacto con cientos de historias acerca de ángeles que habían caído ante la tentación de la ira, la lujuria y otros pecados capitales. Aunque deseoso, se negaba a seguir por ese camino.
-¿Máquina autónoma?- Musitó por lo bajo, sudando, a la vez que entendía cierta afirmación. ¿Acaso la Gyojin había comprendido lo que el rubio pensaba? Diablos, esperaba que no. Ya parecía que la femenina lo odiaba por vaya a saber qué motivo como para darle margen mayor de debilidad. Suspiró por lo bajo, tratando de enfocarse en otra cosa, enfocándose en la mujer felino, en sus facciones, movimientos y modismos al hablar. Sus orbes se enfocaron puntualmente en la mano que tocó una zona indebida, impropia para la situación. El carmesí furioso se hizo presente en sus mejillas, signo inequívoco de su timidez. Esperando que nadie lo hubiese notado desvió la mirada, ocultando su rostro en la oscuridad misma.
Ante el movimiento de muchos inició el trayecto, manteniéndose cerca del navegante pelirrojo. Podía notar cierta emoción en su forma de hablar y expresarse, cosa que lo sorprendía gratamente. ¿Acaso Ray podía ser capaz de experimentar sentimientos “buenos”? –Oh bueno… No lo tomes tan personal.- Pronunció Jonathan por lo bajo, con su diestra en alto a modo de disculpa. No sabía porque lo hacía, solo sintió la necesidad de hacerlo. -¡Mucha suerte!- Fue lo último que llegó a expresar, antes de volver a una expresión seria, acorde al humor en el que todos aportaban.
Su trayecto finalizó en un barco que los esperaba, alejado de todo rastro de vida. -Aquí vamos.- Los nervios se hacían presente en su cuerpo, en su alma misma. Todo esto era indicio de una cosa: Una nueva misión había iniciado.
-¿Máquina autónoma?- Musitó por lo bajo, sudando, a la vez que entendía cierta afirmación. ¿Acaso la Gyojin había comprendido lo que el rubio pensaba? Diablos, esperaba que no. Ya parecía que la femenina lo odiaba por vaya a saber qué motivo como para darle margen mayor de debilidad. Suspiró por lo bajo, tratando de enfocarse en otra cosa, enfocándose en la mujer felino, en sus facciones, movimientos y modismos al hablar. Sus orbes se enfocaron puntualmente en la mano que tocó una zona indebida, impropia para la situación. El carmesí furioso se hizo presente en sus mejillas, signo inequívoco de su timidez. Esperando que nadie lo hubiese notado desvió la mirada, ocultando su rostro en la oscuridad misma.
Ante el movimiento de muchos inició el trayecto, manteniéndose cerca del navegante pelirrojo. Podía notar cierta emoción en su forma de hablar y expresarse, cosa que lo sorprendía gratamente. ¿Acaso Ray podía ser capaz de experimentar sentimientos “buenos”? –Oh bueno… No lo tomes tan personal.- Pronunció Jonathan por lo bajo, con su diestra en alto a modo de disculpa. No sabía porque lo hacía, solo sintió la necesidad de hacerlo. -¡Mucha suerte!- Fue lo último que llegó a expresar, antes de volver a una expresión seria, acorde al humor en el que todos aportaban.
Su trayecto finalizó en un barco que los esperaba, alejado de todo rastro de vida. -Aquí vamos.- Los nervios se hacían presente en su cuerpo, en su alma misma. Todo esto era indicio de una cosa: Una nueva misión había iniciado.
Jonathan Wayland
Hoja de personaje
Nivel:
(25/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
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