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Creado por Ray Kazaragi Sáb Abr 02, 2016 1:21 am
En el último tiempo el pelirrojo había empezado a tener misiones con más importancias comparadas con las que hacia cuando recién se unió a la armada revolucionaria, a pesar de que aún seguía siendo un simple soldado en la pirámide organizacional, sin duda más temprano que tarde terminaría subiendo obteniendo más responsabilidades y quién sabe si misiones que representaran un mayor peligro. Ahora se encontraba en la isla de Ilusia ubicada en el West Blue para encontrarse con otro miembro de la armada, era la primera vez que lo veía y por el momento solo sabía cuál era el punto de reunión dentro de la isla, al parecer el día de hoy no tendría que ir de infiltrado ni nada similar, tendría que esperar ver a su compañero para saber que tendrían que hacer en la isla.
Donde se reunirían los dos revolucionarios se trataba de las profundidades de un bosque que se encontraba cerca del principal pueblo de la isla, la cual generalmente era una isla pacifica alejada de los problemas. El bosque quedaba a tan solo unos minutos caminando del pueblo, en el cual sobresalían unos árboles con una forma redonda como si de una pelota se tratase, era un buen lugar para poder conversar sin que nadie los interrumpiera en un inicio para luego poder ir a realizar lo que debieran para la misión al encontrarse cerca del principal pueblo de la isla, y un poco más distanciados del muelle como de la playa. Ray se encontraba apoyado sobre uno de los arboles con los brazos cruzados esperando a que llegara pronto — No debe faltar mucho para que llegue —. Quedaban tan solo unos minutos para que se cumpliera la hora en la cual debían encontrarse.
Donde se reunirían los dos revolucionarios se trataba de las profundidades de un bosque que se encontraba cerca del principal pueblo de la isla, la cual generalmente era una isla pacifica alejada de los problemas. El bosque quedaba a tan solo unos minutos caminando del pueblo, en el cual sobresalían unos árboles con una forma redonda como si de una pelota se tratase, era un buen lugar para poder conversar sin que nadie los interrumpiera en un inicio para luego poder ir a realizar lo que debieran para la misión al encontrarse cerca del principal pueblo de la isla, y un poco más distanciados del muelle como de la playa. Ray se encontraba apoyado sobre uno de los arboles con los brazos cruzados esperando a que llegara pronto — No debe faltar mucho para que llegue —. Quedaban tan solo unos minutos para que se cumpliera la hora en la cual debían encontrarse.
Ray Kazaragi
Hoja de personaje
Nivel:
(30/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
Creado por Jonathan Wayland Sáb Abr 09, 2016 10:53 pm
El pecho del joven se inflaba de aire y se desinflaba con la misma rapidez. Su cuerpo, inclinado hacia adelante, se veía impulsado por aquellos largos pasos que daba, estirando sus piernas a más no poder para acortar la distancia que lo separaba de su objetivo. Jonathan Wayland había sido encargo por sus superiores de acudir al encuentro con alguien que “ya conocía de misiones anteriores”. Aunque temeroso de que sea el pacifista que tanto aborrecía, generador de sus peores pesadillas en la última temporada, decidió no hacerlo esperar, por una cuestión de decencia y buen aprender por parte del rubio, más que por una preocupación genuina por el interés ajeno de TR, si es que era este de quien se trataba.
Para fortuna del joven, iba vestido con aquellas prendas casuales, con su largo saco negro cubriendo su cuerpo y, más que nada, la espada que se encontraba a un lado de su cintura, firme y a la espera de entrar en acción. Sus pies rompían pequeñas ramas que se topaban en su camino, generando un leve eco en aquel abandonado bosque en el que se encontraba. Gotas de sudor resbalaban por sus mejillas, mientras su mente divagaba, tratando de averiguar quién era el que lo estaría esperando. Para su fortuna, era una cara conocida, y agradable.
-¡Ray!- La alegría en el rostro angelical del joven no podía ser descripta con palabras mortales. De no ser por estar en una misión, hasta lloraría de felicidad por no encontrarse con aquel autómata que tanto odiaba. Se acercó al conocido con una carta extendida, aquella que le indicaba a Jonathan el acudir al encuentro con el revolucionario. –Parece que estaremos juntos en esta misión.-
Para fortuna del joven, iba vestido con aquellas prendas casuales, con su largo saco negro cubriendo su cuerpo y, más que nada, la espada que se encontraba a un lado de su cintura, firme y a la espera de entrar en acción. Sus pies rompían pequeñas ramas que se topaban en su camino, generando un leve eco en aquel abandonado bosque en el que se encontraba. Gotas de sudor resbalaban por sus mejillas, mientras su mente divagaba, tratando de averiguar quién era el que lo estaría esperando. Para su fortuna, era una cara conocida, y agradable.
-¡Ray!- La alegría en el rostro angelical del joven no podía ser descripta con palabras mortales. De no ser por estar en una misión, hasta lloraría de felicidad por no encontrarse con aquel autómata que tanto odiaba. Se acercó al conocido con una carta extendida, aquella que le indicaba a Jonathan el acudir al encuentro con el revolucionario. –Parece que estaremos juntos en esta misión.-
Jonathan Wayland
Hoja de personaje
Nivel:
(25/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
Creado por Ray Kazaragi Dom Abr 10, 2016 10:01 pm
La información que le habían entregado al momento de encargarle esta nueva misión al pelirrojo era que se encontraría con alguien que no conocía nuevamente pero que si llevaba un tiempo dentro de la Armada Revolucionaria casi igual que él, era extraño ya que conocía a varios de los soldados de esa generación, aunque sin duda quedaban muchos más por conocer. Se encontraba en el punto de reunión un par de minutos antes a lo acordado para un encuentro, escucho unos sonidos de unas ramas quebrándose así que gira su cabeza a ver de quien se trataba, para su sorpresa se trataba de un rubio que conocía anteriormente con quienes misiones un par de veces, — Jonathan — saludo respondiendo a su compañero recibiendo la carta que le estaba entregando leyéndola rápidamente — Se supone que vendría alguien a quien no conocía anteriormente —
Volvió a leer la carta para luego entregársela al rubio — Por lo que tenía entendido hoy quien vendría me entregaría información importante y luego realizaríamos una misión en esta isla —. Estaba tratando de pensar que estaba ocurriendo, era extraño que los informantes de la armada cometieran un error como ese, generalmente eran bastante precisos a la hora de entregar información para realizar misiones en diferentes formas para no levantar sospecha alguna. Miro nuevamente a su compañero — ¿Sabes algo sobre por qué te mandaron a la isla? —, entre ambos deberían reconocer que es lo que estaba pasando para realizar la misión a como de lugar. Esperaba apoyado sobre el mismo árbol una respuesta por parte de su compañero mientras pensaba en que estaba pasando.
Volvió a leer la carta para luego entregársela al rubio — Por lo que tenía entendido hoy quien vendría me entregaría información importante y luego realizaríamos una misión en esta isla —. Estaba tratando de pensar que estaba ocurriendo, era extraño que los informantes de la armada cometieran un error como ese, generalmente eran bastante precisos a la hora de entregar información para realizar misiones en diferentes formas para no levantar sospecha alguna. Miro nuevamente a su compañero — ¿Sabes algo sobre por qué te mandaron a la isla? —, entre ambos deberían reconocer que es lo que estaba pasando para realizar la misión a como de lugar. Esperaba apoyado sobre el mismo árbol una respuesta por parte de su compañero mientras pensaba en que estaba pasando.
Ray Kazaragi
Hoja de personaje
Nivel:
(30/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
Creado por Jonathan Wayland Dom Abr 10, 2016 10:45 pm
Jonathan se encontraba con sus manos sobre sus rodillas, respirando agitado, ligeramente transpirado, nada que el paso de los segundos no pudiera revertir. Observó hacía todos lados en busca de algo que estuviese fuera de lugar, alguna presencia indebida, demasiadas aves acumuladas en un mero rincón, hojas de colores distintos… Nada. Estaba todo tan ridículamente cargado de paz que era difícil de creer. –La verdad es que…- Tomó la carta, la partió en cuatro y guardó los pedazos en uno de los bolsillos “secretos” de su saco negro. –Hubo ciertos problemas a la hora de dar esta misión.- Se encogió de hombros antes de suspirar pesadamente. Prefería resumir todo en su mente antes de tener que explicar lo ocurrido.
-La persona que iba a participar contigo en esta misión desapareció completamente, sin dejar rastro.- Se recargó contra un árbol, a unos escasos centímetros del que Ray ocupaba como respaldo. Sus ojos esmeraldas se alzaron hacía el cielo. –La misión en la que iban a participar consistía en investigar un pequeño grupo de marines presentes en esta isla. Su actividad es dudosa, pero sumamente activa, o eso es lo que pude averiguar antes de llegar.- Volvió a suspirar, negando con la cabeza repetidas veces. No le agradaba lo que estaba por decir.
-Hay dos opciones. O el novato fue capturado…- Tragó en seco. Decir esas palabras, de alguien que podría ser su “hermano de armas” dolería, y mucho. Mas nada le quedaba hacer, salvo seguir las ordenes que le fueron impartidas. –No muy lejos de este lugar está el puesto de marines. No quieren que los matemos, solo quieren que robemos todo lo que podamos acerca de su pequeña actividad en la zona.- Se recompuso e inició camino hacia donde se suponía estaría su objetivo, sobre la costa.
-La persona que iba a participar contigo en esta misión desapareció completamente, sin dejar rastro.- Se recargó contra un árbol, a unos escasos centímetros del que Ray ocupaba como respaldo. Sus ojos esmeraldas se alzaron hacía el cielo. –La misión en la que iban a participar consistía en investigar un pequeño grupo de marines presentes en esta isla. Su actividad es dudosa, pero sumamente activa, o eso es lo que pude averiguar antes de llegar.- Volvió a suspirar, negando con la cabeza repetidas veces. No le agradaba lo que estaba por decir.
-Hay dos opciones. O el novato fue capturado…- Tragó en seco. Decir esas palabras, de alguien que podría ser su “hermano de armas” dolería, y mucho. Mas nada le quedaba hacer, salvo seguir las ordenes que le fueron impartidas. –No muy lejos de este lugar está el puesto de marines. No quieren que los matemos, solo quieren que robemos todo lo que podamos acerca de su pequeña actividad en la zona.- Se recompuso e inició camino hacia donde se suponía estaría su objetivo, sobre la costa.
Jonathan Wayland
Hoja de personaje
Nivel:
(25/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
Creado por Ray Kazaragi Lun Abr 11, 2016 12:55 am
Su compañero se veía notablemente cansando llegando al punto de apoyar sus manos sobre sus rodillas recuperando así el aliento más rápido, quizás porque cosas tuvo que pasar para llegar hasta el punto de reunión. Todo seguía igual de tranquilo en el lugar, el punto de encuentro había sido bien planeado por los informantes de los revolucionarios para que nadie los molestara y pudieran conversar tranquilamente. Lo peor que podía pasar es que hubiera problemas como lo estaba diciendo ahora Jonathan, podía ser un problema con quien iba a venir a la isla o los informantes se habían confundido entregando notas que no correspondían a las personas adecuadas.
Escucho atentamente a las palabras del rubio quien explicaba la situación ahora apoyado en un árbol como el pelirrojo estaba haciendo, no sé encontraba preocupado por lo que pudo pasarle a quien iba a ir a la misión en lugar de Jonathan, si era un miembro de los revolucionarios sabía defenderse perfectamente y seguramente quien quisiera hacerle algo tendría que pasar por mucho trabajo para poder hacerlo. La misión se trataba sobre un grupo de marines, perfecto a su manera de ver, el odio que sentía hacia ellos no desaparecía en ningún momento de hecho crecía entre más los conocía y actitudes que podía ver con sus propios ojos, — Por mi parte no tengo problemas ¿Qué se encuentra haciendo el grupo de marines? — las posibilidades eran bastante: podían estar usando mal uso de sus poderes, robando, mercado negro o cualquier cosa y gracias a su fachada de Marines no tendrían problemas en ocultarlo.
Por palabras de su compañero un puesto de marines se encontraba cerca, así que dejo de apoyarse en el árbol como lo había estado haciendo todo el momento mientras estaban conversando esperando al rubio para ponerse en marcha. En aquel lugar se podría encontrar quien iba originalmente si es que tenían algo de suerte — Si hacemos un buen movimiento puede que nos encontremos con quien venía originalmente, además de robar lo que debemos —. Apoyo su brazo izquierdo sobre las tres Katanas que llevaba en ese mismo lado del cuerpo.
Escucho atentamente a las palabras del rubio quien explicaba la situación ahora apoyado en un árbol como el pelirrojo estaba haciendo, no sé encontraba preocupado por lo que pudo pasarle a quien iba a ir a la misión en lugar de Jonathan, si era un miembro de los revolucionarios sabía defenderse perfectamente y seguramente quien quisiera hacerle algo tendría que pasar por mucho trabajo para poder hacerlo. La misión se trataba sobre un grupo de marines, perfecto a su manera de ver, el odio que sentía hacia ellos no desaparecía en ningún momento de hecho crecía entre más los conocía y actitudes que podía ver con sus propios ojos, — Por mi parte no tengo problemas ¿Qué se encuentra haciendo el grupo de marines? — las posibilidades eran bastante: podían estar usando mal uso de sus poderes, robando, mercado negro o cualquier cosa y gracias a su fachada de Marines no tendrían problemas en ocultarlo.
Por palabras de su compañero un puesto de marines se encontraba cerca, así que dejo de apoyarse en el árbol como lo había estado haciendo todo el momento mientras estaban conversando esperando al rubio para ponerse en marcha. En aquel lugar se podría encontrar quien iba originalmente si es que tenían algo de suerte — Si hacemos un buen movimiento puede que nos encontremos con quien venía originalmente, además de robar lo que debemos —. Apoyo su brazo izquierdo sobre las tres Katanas que llevaba en ese mismo lado del cuerpo.
Ray Kazaragi
Hoja de personaje
Nivel:
(30/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
Creado por Jonathan Wayland Lun Abr 11, 2016 10:29 pm
Para fortuna de ambos, el trayecto hasta la cosa se encontraba despejado totalmente. No había ni siquiera transeúntes paseando por la zona, lo que en cierto modo aumentaba lo sospechoso de aquel lugar. Jonathan seguía pensando en el revolucionario desaparecido, considerando la otra opción que barajeaban sus superiores acerca de su estado: corrían rumores que el novato en realidad era un traidor. Su oportuna ausencia no era más que una reafirmación de dicho chisme, pasado de lengua en lengua como un secreto muy mal guardado. ¿Acaso su compañero de hermanas sabía de todo esto? Lo dudaba, sino lo más probable es que estaría recalcando todo lo que le haría una vez se cruce con el presunto “doble agente”.
-No lo vas a creer.- Comenzó a hablar el rubio, mientras trataba de no dar grandes zancadas para estar a la par con el pelirrojo. -Varios informantes concuerdan en que se encuentran retirando algo del fondo del mar.- Esas palabras le produjeron cierto escalofrío, pues sabía que si los perros del gobierno se encontraban en aquel lugar en busca de algo, ese algo no debía ser nada bueno. –Dicen que es Kairoseki, pero dudo que haya algo de eso cerca de la cosa, lo que nos deja con…- Un silencio prolongado se hizo presente cuando el skypean se detuvo, justo detrás de un árbol, donde acababa el bosque en el que se encontraban. Al estar en una zona relativamente elevada, podrían apreciar la cosa con suma facilidad.
La zona ocupada por marines se encontraba ligeramente resguardada por los mismos. Se podía ver a los lejos como se alejaban pequeños navíos de los mismos, yendo a quien sabe dónde. Sobre la cosa había tres tiendas de campaña ubicadas a la misma distancia una de otra, en un círculo. –No quiero saltar a conclusiones apresuradas.- Tragó saliva, antes de indicar con su mentón una de las carpas, la vigilada de las tres por tres guardias. –Por la información que disponemos, aparentemente es esa la que tiene toda la información, pero…- Sus orbes verdes pasaron a las otras tiendas, mirándolas, dudoso de su futuro accionar. –No nos vendría mal echarle un vistazo al resto. Es tu decisión.-
-No lo vas a creer.- Comenzó a hablar el rubio, mientras trataba de no dar grandes zancadas para estar a la par con el pelirrojo. -Varios informantes concuerdan en que se encuentran retirando algo del fondo del mar.- Esas palabras le produjeron cierto escalofrío, pues sabía que si los perros del gobierno se encontraban en aquel lugar en busca de algo, ese algo no debía ser nada bueno. –Dicen que es Kairoseki, pero dudo que haya algo de eso cerca de la cosa, lo que nos deja con…- Un silencio prolongado se hizo presente cuando el skypean se detuvo, justo detrás de un árbol, donde acababa el bosque en el que se encontraban. Al estar en una zona relativamente elevada, podrían apreciar la cosa con suma facilidad.
La zona ocupada por marines se encontraba ligeramente resguardada por los mismos. Se podía ver a los lejos como se alejaban pequeños navíos de los mismos, yendo a quien sabe dónde. Sobre la cosa había tres tiendas de campaña ubicadas a la misma distancia una de otra, en un círculo. –No quiero saltar a conclusiones apresuradas.- Tragó saliva, antes de indicar con su mentón una de las carpas, la vigilada de las tres por tres guardias. –Por la información que disponemos, aparentemente es esa la que tiene toda la información, pero…- Sus orbes verdes pasaron a las otras tiendas, mirándolas, dudoso de su futuro accionar. –No nos vendría mal echarle un vistazo al resto. Es tu decisión.-
Jonathan Wayland
Hoja de personaje
Nivel:
(25/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
Creado por Ray Kazaragi Mar Abr 12, 2016 7:19 pm
Espero a que Jonathan estuviera listo para partir a donde antes le había dicho, por lo mismo pensaba que en el camino se encontrarían con uno que otro marine el cual podría reconocerlos o con la gente que vivía en el pueblo, sin embargo fue todo lo contrario el camino se encontraba totalmente despejado para suerte de ambos revolucionarios, puedo así disfrutar del camino viendo como algunas hojas caían lentamente desde las copa de los arboles hasta tocar el suelo por donde iban caminando, el viento movía las ramas de un lado a otro haciendo que las hojas también se movieron produciendo un sonido, era de las pocas cosas que podía calmar a Ray.
No tardaron mucho en llegar a donde debían manteniendo la distancia por un par de metros para observar antes de realizar un movimiento que los delatara y arruinara la misión. Por su parte el rubio comenzó hablar sobre lo que podrían estar haciendo los marines en ese lugar, estaban sacando algo del mar y parecía ser que se trataba de Kairoseki — Dudo que se trate de ese material, apostaría más a que se tratase de tesoro o algo similar —, guardo silencio unos segundos — No ha habido accidentes en las últimas semanas en el lugar — con eso podrían descartar que se tratara de algún cuerpo.
Desde donde se encontraban no podían ver a detalle lo que necesitaban, ¿La razón? Tres tienda resguardadas por marines estaban tapando la visión de lo que requerían ver. Para poder encontrar lo que necesitaban tendrían que pasar por encima de ellos — Primero tenemos que encargarnos de los marines que están vigilando, luego de eso podríamos revisar las tiendas sin problema alguno —, era una de las opciones que manejan ya que si los marines informaban que se encontraban en el lugar ambos revolucionarios pasarían por más de un aprieto para salir de ese lugar con vida. — Si tienes otra opción dila —.
No tardaron mucho en llegar a donde debían manteniendo la distancia por un par de metros para observar antes de realizar un movimiento que los delatara y arruinara la misión. Por su parte el rubio comenzó hablar sobre lo que podrían estar haciendo los marines en ese lugar, estaban sacando algo del mar y parecía ser que se trataba de Kairoseki — Dudo que se trate de ese material, apostaría más a que se tratase de tesoro o algo similar —, guardo silencio unos segundos — No ha habido accidentes en las últimas semanas en el lugar — con eso podrían descartar que se tratara de algún cuerpo.
Desde donde se encontraban no podían ver a detalle lo que necesitaban, ¿La razón? Tres tienda resguardadas por marines estaban tapando la visión de lo que requerían ver. Para poder encontrar lo que necesitaban tendrían que pasar por encima de ellos — Primero tenemos que encargarnos de los marines que están vigilando, luego de eso podríamos revisar las tiendas sin problema alguno —, era una de las opciones que manejan ya que si los marines informaban que se encontraban en el lugar ambos revolucionarios pasarían por más de un aprieto para salir de ese lugar con vida. — Si tienes otra opción dila —.
Ray Kazaragi
Hoja de personaje
Nivel:
(30/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
Creado por Jonathan Wayland Mar Abr 12, 2016 9:41 pm
Se mantuvo en silencio mientras escuchaba el pensamiento de su compañero de misión. Asintió ante sus comentarios, los cuales podrían ser igual de valiosos y certeros como los propios. Ciertamente había sido demasiado irregular la misión en la que se encontraban, pero ya nada podrían hacer al respecto. No les quedaba de otra más que aceptar lo que estaba ocurriendo y averiguar la verdad, los planes de la marina y lo que sea que estuviesen haciendo tan recelosamente en aquel lugar, tan alejado de su sector predilecto y a escondidas del resto del mundo.
-¿Sabes?- Una sonrisa sincera se formó el rostro del portador de brillantes esmeraldas. Sus hombros se habían elevado, para luego descender con la misma velocidad con la que habían subido. Su diestra ya se encontraba sobre la empuñadura de su espada, que ahora apuntaba hacía Ray. –Puede que hacer las cosas a tu manera no sea tan malo después de todo.- La espada salió de aquella funda ostentosa que descansaba sostenida de su cintura. Su zurda comenzó a recorrer sus bolsillos, asegurándose que su plan de repuesto y seguro estuviese preparando, los diales que hacía un tiempo no había puesto en práctica, debido a la inseguridad que le generaba el usarlos lejos de Skypea.
-Vamos.- Casi con tono de líder se lanzó hacía uno de los caminos que descendía por una colina, justo donde había un pequeño puesto de vigilancia con dos marines que, como era de esperarse, se encontraban de espaldas, hablando de cosas meramente superficiales. Se dirigió al que se encontraba a la derecha y, tapando su boca desde atrás, lo atravesó de atrás hacia delante, dejando el filo de su espada salir por el estómago ajeno, con sangre resbalando por el filo de su espada. Para ese momento asumía que Ray se había encargado del otro marine sin mucho problema. -¿Qué quieres hacer?- Preguntó, removiendo su arma del cuerpo muerto bañado en sangre. –Podríamos encargarnos de cada uno, o separarnos y dejar las carpas para el final. Este lugar parece minado de uniformados.- Era cierto lo que comentaba, pues desde el lugar donde estaban se podía apreciar varios hombres, no solo los de las carpas, que vigilaban los alrededores. No faltaría mucho para que fuesen descubiertos.
-¿Sabes?- Una sonrisa sincera se formó el rostro del portador de brillantes esmeraldas. Sus hombros se habían elevado, para luego descender con la misma velocidad con la que habían subido. Su diestra ya se encontraba sobre la empuñadura de su espada, que ahora apuntaba hacía Ray. –Puede que hacer las cosas a tu manera no sea tan malo después de todo.- La espada salió de aquella funda ostentosa que descansaba sostenida de su cintura. Su zurda comenzó a recorrer sus bolsillos, asegurándose que su plan de repuesto y seguro estuviese preparando, los diales que hacía un tiempo no había puesto en práctica, debido a la inseguridad que le generaba el usarlos lejos de Skypea.
-Vamos.- Casi con tono de líder se lanzó hacía uno de los caminos que descendía por una colina, justo donde había un pequeño puesto de vigilancia con dos marines que, como era de esperarse, se encontraban de espaldas, hablando de cosas meramente superficiales. Se dirigió al que se encontraba a la derecha y, tapando su boca desde atrás, lo atravesó de atrás hacia delante, dejando el filo de su espada salir por el estómago ajeno, con sangre resbalando por el filo de su espada. Para ese momento asumía que Ray se había encargado del otro marine sin mucho problema. -¿Qué quieres hacer?- Preguntó, removiendo su arma del cuerpo muerto bañado en sangre. –Podríamos encargarnos de cada uno, o separarnos y dejar las carpas para el final. Este lugar parece minado de uniformados.- Era cierto lo que comentaba, pues desde el lugar donde estaban se podía apreciar varios hombres, no solo los de las carpas, que vigilaban los alrededores. No faltaría mucho para que fuesen descubiertos.
Jonathan Wayland
Hoja de personaje
Nivel:
(25/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
Creado por Ray Kazaragi Miér Abr 13, 2016 1:29 am
El pelirrojo miraba sorprendido a su compañero de tripulación con quien estaba haciendo una misión en la isla de Ilusia, la sorpresa se podía notar en su boca un poco abierta y en la forma que lo miraba, era extraño que aquel ángel de rubia cabellera pudiera decir las palabras que acababa de pronunciar, por lo general se encontraba en medio de las ideas más pacifistas de William o las más extremistas de Ray, y esta vez por decisión propia decidiera usar la fuerza para ir contra la marina — No pensé que tuvieras ideas como esas —, aun se encontraban a unos cuantos metros observando las tiendas con marines a su alrededor que estaban ocultando lo que querían ver para realizar la misión.
Jonathan fue el primero en ir hacia adelante contra los marines que se encontraban resguardando las tiendas con su arma lista para iniciar una batalla si es que llegara a existir una, ambos revolucionarios no se comparaban en número ante todos los marines del lugar por lo que debería de tratar de usar movimientos rápidos y sigilosos para no llamar la atención de nadie. Ray iba unos pasos detrás de su compañero con su mano derecha afirmando el mango de Yuki no Kage, al frente se encontraban dos marines los cuales uno fue asesinado por el rubio antes de que pudiera verlo. Sin embargo el otro al darse cuenta se dio vuelta viendo al pelirrojo cara a cara, el revolucionario desenfundo su Wazamono tomando una postura un poco extraña a quien la veía por primera vez. Estaba de lado mirando al marine con las rodillas dobladas con el brazo flectado que sostenía la Katana apoyando la hoja sobre su hombro izquierdo sin cortarse, antes de que el marine pudiera hacer un movimiento Ray se lanzó hacia abajo como si estuviera cayendo al suelo pero antes de tocar el suelo se impulsa recortando la distancia entre el revolucionario con el marine y con un movimiento de su Katana desde abajo corta a su enemigo sin que pudiera hacer algo.
Con eso ambos marines ya no podría avisarle a nadie más, por su parte los revolucionarios deberían esperar a que nadie encontrara sus cuerpos hasta que terminaran la misión — Deberíamos revisar la tienda evitando a los otros marines para ver que hay más allá de lo que podías ver inicialmente —.
Jonathan fue el primero en ir hacia adelante contra los marines que se encontraban resguardando las tiendas con su arma lista para iniciar una batalla si es que llegara a existir una, ambos revolucionarios no se comparaban en número ante todos los marines del lugar por lo que debería de tratar de usar movimientos rápidos y sigilosos para no llamar la atención de nadie. Ray iba unos pasos detrás de su compañero con su mano derecha afirmando el mango de Yuki no Kage, al frente se encontraban dos marines los cuales uno fue asesinado por el rubio antes de que pudiera verlo. Sin embargo el otro al darse cuenta se dio vuelta viendo al pelirrojo cara a cara, el revolucionario desenfundo su Wazamono tomando una postura un poco extraña a quien la veía por primera vez. Estaba de lado mirando al marine con las rodillas dobladas con el brazo flectado que sostenía la Katana apoyando la hoja sobre su hombro izquierdo sin cortarse, antes de que el marine pudiera hacer un movimiento Ray se lanzó hacia abajo como si estuviera cayendo al suelo pero antes de tocar el suelo se impulsa recortando la distancia entre el revolucionario con el marine y con un movimiento de su Katana desde abajo corta a su enemigo sin que pudiera hacer algo.
Con eso ambos marines ya no podría avisarle a nadie más, por su parte los revolucionarios deberían esperar a que nadie encontrara sus cuerpos hasta que terminaran la misión — Deberíamos revisar la tienda evitando a los otros marines para ver que hay más allá de lo que podías ver inicialmente —.
Ray Kazaragi
Hoja de personaje
Nivel:
(30/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
Creado por Jonathan Wayland Miér Abr 13, 2016 11:53 am
El puesto de vigilancia que habían tomado se encontraba a unos cuantos metros desde aquellas carpas, desde donde se podía apreciar casi con perfección los movimientos de los marines que ocupaban esa parte de la isla. El joven de rubia cabellera limpió el filo de su espada con las prendas del soldado que había muerto en sus manos, mientras escuchaba las palabras de su compañero de equipo. -¿En serio? Y yo que pensé que aprovecharías esta oportunidad para matar a todos los que pudieras.- Comentó con cierta gracia, en lo que sus manos recorrían la ropa de los cuerpos frente a él. Era un proceso estándar que empleaban para ver si tenían algo de valor para la arma. Sin embargo, los asesinados no eran más que meros soldados rasos, era obvio que no tendrían nada relativamente importante.
-Muy bien, vamos.- Tomando el liderazgo de la misión, el skypean comenzó a caminar lentamente hacía las carpas que se encontraban enfrentadas entre si, como si formaran un triángulo. Los “guardias” de la zona se movían constantemente, por lo que era cuestión de moverse de forma inteligente entre que estos cambiaban de posiciones. Poco tardaron ambos de llegar a su objetivo, donde se suponía debían estar los planes de lo que hacían en aquel lugar.
Sin temor alguno se adentró a la que anteriormente se encontraba resguardada, notando una gran mesa larga en el medio, con decenas de papeles dispersos por la superficie de la misma, con lápices desparramados por doquier. Sus ojos se enfocaron en un gran mapa de la isla, con varias anotaciones, círculos y garabatos, pero que había algo que llamaba potencialmente su atención: la zona que ahora ocupaban tenía cientos de flechas, con una gran aclaración de “Importante”. –Barco pirata… Tesoro… Secreto…- Rápidamente pasaba de reporte en reporte que sus manos podían tomar. Parecía que Ray tenía razón, y el accionar del gobierno era una suerte de búsqueda del grial. Quizá se parecían más a los piratas de lo que creían.
-Muy bien, vamos.- Tomando el liderazgo de la misión, el skypean comenzó a caminar lentamente hacía las carpas que se encontraban enfrentadas entre si, como si formaran un triángulo. Los “guardias” de la zona se movían constantemente, por lo que era cuestión de moverse de forma inteligente entre que estos cambiaban de posiciones. Poco tardaron ambos de llegar a su objetivo, donde se suponía debían estar los planes de lo que hacían en aquel lugar.
Sin temor alguno se adentró a la que anteriormente se encontraba resguardada, notando una gran mesa larga en el medio, con decenas de papeles dispersos por la superficie de la misma, con lápices desparramados por doquier. Sus ojos se enfocaron en un gran mapa de la isla, con varias anotaciones, círculos y garabatos, pero que había algo que llamaba potencialmente su atención: la zona que ahora ocupaban tenía cientos de flechas, con una gran aclaración de “Importante”. –Barco pirata… Tesoro… Secreto…- Rápidamente pasaba de reporte en reporte que sus manos podían tomar. Parecía que Ray tenía razón, y el accionar del gobierno era una suerte de búsqueda del grial. Quizá se parecían más a los piratas de lo que creían.
Jonathan Wayland
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