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Creado por Byakuren Vie Abr 08, 2016 5:41 pm
Por la tarde, en una parte de un puerto del Reino de Briss aquella mañana había sucedido una terrible catástrofe a pequeña escala, un gyojin había atacado y asesinado cruelmente a una jovencita, la había desmembrado y se la había comido llenando el agua y el aire con el olor de la sangre y de no ser por la intervención de otro habitante de las profundidades aquel ser terrible hubiera tenido una segunda víctima, una doctora y luchadora civil llamada Byakuren Hiziri, una jovencita que había intentado detener al monstruo sin resultados positivos.
Solo logro ganar tiempo para que otras personas pudieran retirarse y llamar a la marina, pero ese es su único merito, no solo fue incapaz salvar a la primera víctima sino que además ella misma estuvo combatiendo y a merced del depredador que le rompió costillas y un brazo, la arrastro por la playa de forma bastante atroz, pero ya todo había pasado y ahora la fémina de ojos grises y castaña cabellera se encontraba recostada cerca de la playa, a la espera de la ayuda que sabía que habría sido enviada a detener al monstruo y atender heridos.
El dolor inundaba el cuerpo de la jovencita que por sus ideales e ingenuidad habría acabado en aquella deplorable condición, estaba toda llena de arena y suciedad por haber sido arrastrada a través de la playa, su rostro estaba sucio y lleno de la humedad de sus lágrimas que habían esparcido aquella mugre dibujaba la tristeza y miseria en el blanco rostro de la salvadora fallida que tuvo que ser rescatada tras fracasar en su proeza.
A pesar del dolor la joven estaba agradecida, apenada en parte por su arrogancia, pero agradecida por tener una oportunidad de enmendar sus errores, aprender de ellos y tener la posibilidad de volverse más fuerte para proteger a la gente que podría ser víctima de otros individuos tan crueles y despiadados como aquel habitante de las profundidades que le habían enseñado el rostro del terror y el dolor del fracaso.
Solo logro ganar tiempo para que otras personas pudieran retirarse y llamar a la marina, pero ese es su único merito, no solo fue incapaz salvar a la primera víctima sino que además ella misma estuvo combatiendo y a merced del depredador que le rompió costillas y un brazo, la arrastro por la playa de forma bastante atroz, pero ya todo había pasado y ahora la fémina de ojos grises y castaña cabellera se encontraba recostada cerca de la playa, a la espera de la ayuda que sabía que habría sido enviada a detener al monstruo y atender heridos.
El dolor inundaba el cuerpo de la jovencita que por sus ideales e ingenuidad habría acabado en aquella deplorable condición, estaba toda llena de arena y suciedad por haber sido arrastrada a través de la playa, su rostro estaba sucio y lleno de la humedad de sus lágrimas que habían esparcido aquella mugre dibujaba la tristeza y miseria en el blanco rostro de la salvadora fallida que tuvo que ser rescatada tras fracasar en su proeza.
A pesar del dolor la joven estaba agradecida, apenada en parte por su arrogancia, pero agradecida por tener una oportunidad de enmendar sus errores, aprender de ellos y tener la posibilidad de volverse más fuerte para proteger a la gente que podría ser víctima de otros individuos tan crueles y despiadados como aquel habitante de las profundidades que le habían enseñado el rostro del terror y el dolor del fracaso.
Byakuren
Hoja de personaje
Nivel:
(25/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
Creado por Chun Hwa Vie Abr 08, 2016 10:02 pm
Hacia un tiempo que había ocurrido lo de Longuetown, su herida no había sido muy grave y dado su tamaño con su buena constitución física, esta fue cerrando sola aunque bueno, tardaría un poco en desaparecer por completo la molestia de la herida. Paso gran parte del tiempo nadando por el mar, no era muy habido a usar barcos mientras pudiera evitarlo y también le servía como método de entrenamiento. Eso fue lo que hizo que terminara en la isla que pertenecía al reino de brises. Sacaba de cuando en cuando su cabeza por el agua para poder ubicarse, siempre era mas cómodo salir cerca del puerto, había caminos y esas cosas que hacían mas sencillo ingresar a la ciudad, pero por alguna razón se veía un montón de gente moviéndose por todos lados. No le dio importancia y aprovecho de continuar su comida, un Atun que atrapo en su viaje y que aunque no era muy fan de comer pescado, por lo menos era gratis cazar.
Salio del agua en la playa, con el pescado entre sus manos faltándole un gran trozo del estomago y dándole un mordisco. Tras terminar de tragar se encuentra con una vista un tanto a típica, una mujer humana tirada en la playa llena de barro. Quizás fuese la curiosidad lo que hizo que se aproximara, o aburrimiento porque no tenia nada mejor que hacer, pero al final saliendo de la playa se le aproximo a la chica – no te vez demasiado bien – le dice mientras le da otro mordisco a un atún. Tenia su karategi de color negro sin mangas, no tenia sus guanteletes puestos pero si los llevaba en una mochila en el hombro.
Salio del agua en la playa, con el pescado entre sus manos faltándole un gran trozo del estomago y dándole un mordisco. Tras terminar de tragar se encuentra con una vista un tanto a típica, una mujer humana tirada en la playa llena de barro. Quizás fuese la curiosidad lo que hizo que se aproximara, o aburrimiento porque no tenia nada mejor que hacer, pero al final saliendo de la playa se le aproximo a la chica – no te vez demasiado bien – le dice mientras le da otro mordisco a un atún. Tenia su karategi de color negro sin mangas, no tenia sus guanteletes puestos pero si los llevaba en una mochila en el hombro.
Chun Hwa
Hoja de personaje
Nivel:
(30/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
Creado por Byakuren Lun Abr 11, 2016 5:09 pm
La medica humana se encontraba realmente cansada y adolorida, pero no era algo que no pudiera sobrellevar hasta cierto punto, sin embargo realmente estaba deseando que llegara pronto esa gente que con suerte le ayudaría atendiendo sus heridas, antes de lo esperado llegaron pasos al lugar donde la fémina se encontraba tumbada, pero eran pasos extraños, eran más pesados de lo que esperaba y eran más lentos, como si una persona grande caminara relajadamente entre la arena, al girar su cabeza quedo horrorizada.
Tal vez si no fuera por el terror de estar al borde de la muerte hubiera pensado de que este era el susto más grande de su vida, si no estuviera en ayunas tal vez hubiera tenido un accidente bastante vergonzoso por el susto ocasionado al ver aquella inmensa figura nuevamente, por un segundo confundió al ser marino de tres metros comiendo algo con el que fuera su agresor comiéndose la extremidad de alguien más, sin embargo tras el espanto inicial pudo confirmar que no se trataba del mismo individuo, sino que de uno diferente, otro ser de tres metros de altura se había acercado a ella ese día.
Tras recuperarse del espanto, la jovencita de cabellos castaños sonrió al recién llegado que estaba comiendo lo que pareciera ser algún pescado -Bu... buenas, estoy bastante herida de hecho señor, tengo costillas rotas y un brazo en la misma situación, perdón si me asuste al verlo, pero se parece un poco al monstruo a quien causó la destrucción del muelle y me produjo estas heridas, me disculpo por compararle con tan cruel criatura si es que eso le ofende, gh...- Hubiera seguido hablando, pero el dolor había vuelto a ser pulsante tras el esfuerzo de intentar conversar, así que con una dolorosa mueca la joven se quedó callada.
Tal vez si no fuera por el terror de estar al borde de la muerte hubiera pensado de que este era el susto más grande de su vida, si no estuviera en ayunas tal vez hubiera tenido un accidente bastante vergonzoso por el susto ocasionado al ver aquella inmensa figura nuevamente, por un segundo confundió al ser marino de tres metros comiendo algo con el que fuera su agresor comiéndose la extremidad de alguien más, sin embargo tras el espanto inicial pudo confirmar que no se trataba del mismo individuo, sino que de uno diferente, otro ser de tres metros de altura se había acercado a ella ese día.
Tras recuperarse del espanto, la jovencita de cabellos castaños sonrió al recién llegado que estaba comiendo lo que pareciera ser algún pescado -Bu... buenas, estoy bastante herida de hecho señor, tengo costillas rotas y un brazo en la misma situación, perdón si me asuste al verlo, pero se parece un poco al monstruo a quien causó la destrucción del muelle y me produjo estas heridas, me disculpo por compararle con tan cruel criatura si es que eso le ofende, gh...- Hubiera seguido hablando, pero el dolor había vuelto a ser pulsante tras el esfuerzo de intentar conversar, así que con una dolorosa mueca la joven se quedó callada.
Byakuren
Hoja de personaje
Nivel:
(25/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
Creado por Chun Hwa Miér Abr 13, 2016 7:45 pm
La manera en la que hablaba la chica era un tanto extraña, no por el hecho de que se asustara al verlo, sino por la extraña amabilidad con la que hablaba – ustedes los humanos son tan raros – le dio otro mordisco al atún. El interés que tenia el agente en la humana era muy bajo, al punto que estaba a punto de irse. No tenia ganas de perder su día hablando con una humana a medio morir, al menos hasta que la escucho la mención a un monstruo que ataco el muelle – interesante – se agacho un poco frente a ella – y dime ¿Qué me puedes contar de ese monstruo? – seguramente seria un rival fuerte, no era fácil causar ese nivel de destrozo sin el apoyo de aliados o de las llamadas Akuma no Mi. La idea de ver un criminal digno de luchar seria interesante, aunque viendo el estado de la chica en el suelo, seguro moría antes de darle alguna información relevante.
Se sentó en el suelo junto a ella sacando de su bolso una caja, de ahí saco unas pinzas y un frasco de cristal con un liquido transparente – veamos, seguro te mueres si no hago algo y toda esa bella información se ira por el garete – un cuchillo, plateado de forma particular. Para todo el que supiera de medicina esas cosas eran herramientas de cirugía, lo que normalmente usaba un medico para atender heridas o realizar alguna operación – así que si evito que te mueras tirada en la arena ¿me cuentas todo lo que sepas de ese sujeto? - comienza a colocar las cosas sobre la arena – pero te va a doler y mucho
Se sentó en el suelo junto a ella sacando de su bolso una caja, de ahí saco unas pinzas y un frasco de cristal con un liquido transparente – veamos, seguro te mueres si no hago algo y toda esa bella información se ira por el garete – un cuchillo, plateado de forma particular. Para todo el que supiera de medicina esas cosas eran herramientas de cirugía, lo que normalmente usaba un medico para atender heridas o realizar alguna operación – así que si evito que te mueras tirada en la arena ¿me cuentas todo lo que sepas de ese sujeto? - comienza a colocar las cosas sobre la arena – pero te va a doler y mucho
Chun Hwa
Hoja de personaje
Nivel:
(30/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
Creado por Byakuren Jue Abr 14, 2016 8:36 pm
La jovencita escucho atentamente cada una de las palabras dichas por aquel gran habitante de las profundidades prestando tanta atención como le era posible a sus movimientos y las herramientas que preparaba con la tranquilidad propia de un profesional antes de trabajar, aquel hombre era un colega en la profesión de sanar las heridas de los cuerpos ajenos.
-Bueno...agh... parece que realmente sabes lo que estas...ha... haciendo y tienes las herramientas adecuadas para hacerlo...- Una vez más el destino demostraba no ser tan cruel con la jovencita que había pasado por aquella terrorífica experiencia tan solo unos momentos atrás, aquello lleno su corazón de alegría y su espíritu de Determinación que le permitió sonreír ante aquel curandero de desconocida identidad.
Los orbes pardos de la joven enfocaron tranquilamente al masculino mientras intentaba ver un poco más de aquel carada -Estoy de acuerdo en contarle todo lo que se después del tratamiento... soy Hiziri Byakuren, muchas gracias por su consideración al advertirme del dolor... ya estoy lista.- El terror ya se había terminado de apartar completamente de la dulce voz ocupada por aquella doncella, el dolor seguía arrugando un poco sus ojos y labios, sin embargo su expresión carecía del miedo al dolor y demostraba su confianza inmerecida para con el desconocido que ahora sabría su identidad para el peor de los casos.
Como doctora sabía lo que vendría, ella normalmente trabajaba con anestesia incluso por las pequeñas lesiones de sus pacientes, tal vez le hombre frente a ella no tenía más suministros de ese tipo o simplemente tenía sus razones para no utilizarlos en ella, sin importar la razón que hubiera detrás de aquella advertencia y el modo de actuar del ajeno, ella lo aceptaría confiando una vez más en este individuo que presentaba ante ella el hecho de poder ser tratada y seguir con su vida una vez más después de ello.
-Bueno...agh... parece que realmente sabes lo que estas...ha... haciendo y tienes las herramientas adecuadas para hacerlo...- Una vez más el destino demostraba no ser tan cruel con la jovencita que había pasado por aquella terrorífica experiencia tan solo unos momentos atrás, aquello lleno su corazón de alegría y su espíritu de Determinación que le permitió sonreír ante aquel curandero de desconocida identidad.
Los orbes pardos de la joven enfocaron tranquilamente al masculino mientras intentaba ver un poco más de aquel carada -Estoy de acuerdo en contarle todo lo que se después del tratamiento... soy Hiziri Byakuren, muchas gracias por su consideración al advertirme del dolor... ya estoy lista.- El terror ya se había terminado de apartar completamente de la dulce voz ocupada por aquella doncella, el dolor seguía arrugando un poco sus ojos y labios, sin embargo su expresión carecía del miedo al dolor y demostraba su confianza inmerecida para con el desconocido que ahora sabría su identidad para el peor de los casos.
Como doctora sabía lo que vendría, ella normalmente trabajaba con anestesia incluso por las pequeñas lesiones de sus pacientes, tal vez le hombre frente a ella no tenía más suministros de ese tipo o simplemente tenía sus razones para no utilizarlos en ella, sin importar la razón que hubiera detrás de aquella advertencia y el modo de actuar del ajeno, ella lo aceptaría confiando una vez más en este individuo que presentaba ante ella el hecho de poder ser tratada y seguir con su vida una vez más después de ello.
Byakuren
Hoja de personaje
Nivel:
(25/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
Creado por Chun Hwa Vie Abr 15, 2016 11:34 pm
Luego de que la chica supiera que no iba a ser fácil salir de eso, y que le dolería bastante, el agente comenzó la operación. Sus ojos se tornaron completamente blancos, era el poder de su visión de mantis, con ello podía apreciar bastantes mas detalles y con ello darse cuenta de varias cosas. Con sus dedos índice y medio dio ligeros toques por los brazos de la chica, uno parecía tener síntomas de hematomas y el otro soltó un ligero crujido, seguramente tuviese una fisura. Lo mas raro fue cuando toco la parte del costado, en el preciso segundo que no sintió la firmeza de las costillas se detuvo, era un evidente signo de fracturas y si hubiese empujado un poco mas podría haberle causado una perforación – espero que no seas muy pudorosa – normalmente lo que iba a hacer era muy poco bien aceptado por pacientes femeninos, pero era algo necesario, sino no podría arreglarle el pecho.
Tomando con sus manos la ropa de la humana, hizo fuerza rasgando su atiendo dejándole el torso desnudo, con ello ahora podía ver como la zona de los costados y cerca del diafragma estaba morada, síntomas de sangrado interno - ¿saliste de una licuadora o que? – el gran tamaño de las manos del agente era un problema a la hora de tratar humanos. Ese detalle afortunadamente ya lo tenia previsto, por ello de la caja saco unas tenazas, estas tenían en las puntas lo normal de instrumentos médicos, solo que la punta de los mismos era bastante mas pequeña. Fue así como hizo una incisión en el costado derecho de la mujer, dejando salir presión de aire que seguramente le estuviese compactando los pulmones. Luego observo lo maltrecho que tenia el pecho por dentro – cobardes asquerosos – era referente al hecho de que uno de su propia raza le hiciera ese daño. No había diversión en herir a alguien mas débil, y era un desperdicio total de fuerza.
Con la tenaza coloco lo mejor que pudo los fragmentos movidos de las costillas de vuelta en su sitio, sacando las astillas para que no se le clavaran en los pulmones. Usando las mismas tenazas suturo la herida, con aguja e hilo de tamaño “humano”, y repitió el mismo proceso del otro lado. Durante todo el proceso apenas hubo sangre, pese a lo aparentemente tosco y bruto que aparentaba, el agente tenia la habilidad y el pulso de un cirujano – creo que ya esta – le echa del liquido transparente encima, era alcohol para limpiarle la sangre del cuerpo aunque seguro le generaría un ardor bastante bueno. Posteriormente se quita la parte superior de su karategi y se la coloca encima a la humana, ya habiendo hecho el tratamiento, seguro que ella agradecería un poco tener algo encima – ¿sigues ahí? – sus ojos retornaron el color normal – si no andas inconsciente es hora que cumplas tu parte del trato
Tomando con sus manos la ropa de la humana, hizo fuerza rasgando su atiendo dejándole el torso desnudo, con ello ahora podía ver como la zona de los costados y cerca del diafragma estaba morada, síntomas de sangrado interno - ¿saliste de una licuadora o que? – el gran tamaño de las manos del agente era un problema a la hora de tratar humanos. Ese detalle afortunadamente ya lo tenia previsto, por ello de la caja saco unas tenazas, estas tenían en las puntas lo normal de instrumentos médicos, solo que la punta de los mismos era bastante mas pequeña. Fue así como hizo una incisión en el costado derecho de la mujer, dejando salir presión de aire que seguramente le estuviese compactando los pulmones. Luego observo lo maltrecho que tenia el pecho por dentro – cobardes asquerosos – era referente al hecho de que uno de su propia raza le hiciera ese daño. No había diversión en herir a alguien mas débil, y era un desperdicio total de fuerza.
Con la tenaza coloco lo mejor que pudo los fragmentos movidos de las costillas de vuelta en su sitio, sacando las astillas para que no se le clavaran en los pulmones. Usando las mismas tenazas suturo la herida, con aguja e hilo de tamaño “humano”, y repitió el mismo proceso del otro lado. Durante todo el proceso apenas hubo sangre, pese a lo aparentemente tosco y bruto que aparentaba, el agente tenia la habilidad y el pulso de un cirujano – creo que ya esta – le echa del liquido transparente encima, era alcohol para limpiarle la sangre del cuerpo aunque seguro le generaría un ardor bastante bueno. Posteriormente se quita la parte superior de su karategi y se la coloca encima a la humana, ya habiendo hecho el tratamiento, seguro que ella agradecería un poco tener algo encima – ¿sigues ahí? – sus ojos retornaron el color normal – si no andas inconsciente es hora que cumplas tu parte del trato
Chun Hwa
Hoja de personaje
Nivel:
(30/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
Creado por Byakuren Lun Abr 18, 2016 8:06 am
Aquel hombre no hacia que la amabilidad fuera reciproca en las palabras, sin embargo sus acciones en si mismas eran una muestra de amabilidad y preocupación por el dolor que la jovencita recibía, la forma en la que cuidadosamente realizó el chequeo que confirmaba las heridas en el cuerpo de Byakuren era muy preciso y delicado a pesar de lo fácil que sería ser un poco más brusco, tal vez fuera por la experiencia y habilidad medica más que por preocuparse en lo delicada que ella pudiera llegar a ser, sabía de médicos que hubieran confirmado las cosas con menos delicadeza y aún así no hubieran dañado al paciente, pero ella tomo aquello como un gesto de amabilidad.
Serio, distante, de voz y pulso firmes, aquel hombre solo mostraba delicadeza en su forma de realizar el tratamiento médico al cuerpo de la muchacha, era el único de sus aspectos que no lo hacía verse tan sólido y áspero como las rocas, aquel hombre hizo un comentario que la joven no supo bien como tomar incluso después de ver la facilidad con la que rasgaba sus ropas como si de hojas de papel se trataran, como doctora misma entendía lo que hacía y sabía lo que era tratar con gente pudorosa así que realmente no le molestaba que un camarada de oficio viera su cuerpo, pero no pudo evitar abrir sus ojos y dejar ver la sorpresa en su rostro al verse tan fácilmente despojada de sus prendas.
Una vez que empezó la parte más delicada del tratamiento la joven dejo su mano sana apoyada en el suelo lejos de su cuerpo, cerro su boca con todas sus fuerzas para no gritar e hizo lo imposible para controlar las reacciones instintivas de su cuerpo ante el dolor, al menos las que pudiera afectar la operación, su puño se había cerrado contra el suelo dejando claras marcas mientras que hacia toda la fuerza que podía para contenerse, apretó bien los dientes mientras que abundantes lagrimas recorrían su rostro, nuevamente estaba llorando sin cesar ahora por el dolor en lugar del terror, podía controlar su respiración lo suficiente para no entorpecer el tratamiento.
Una vez que la operación estuvo concluida y llego la hora de la sutura la joven pudo relajarse un poco más, aún era muy doloroso, pero comparado a lo que había estado sintiendo antes era como la picadura de un mosquito, una vez que terminaba todo dejo salir un grito aojado por el ardor del alcohol, lo hizo para dejar salir una parte de lo que había sufrido durante la operación y que no había podido dejar salir con tal de que fuera todo bien.
El masculino entrego una prenda de ropa a la joven que con su brazo sano arrastro la prenda para cubrirse lo suficiente mientras seguía tirada en el suelo, moverse sin más sería demasiado doloroso para ella -Le di mi palabra...y cumpliré... deme un momento para recuperarme un poco, no serán más que uno o dos minutos.- todavía no lograba terminar de recuperarse del dolor y ardor que había en su cuerpo al momento de decir aquellas palabras, había dejado de hacer fuerza y su cuerpo estaba caído sin fuerza, como un títere cuyos hilos fueron cortados, aunque tenía una resistencia al dolor y tolerancia sobre la media le tomaría al menos algunos minutos estar nuevamente en condiciones de siquiera dar una explicación como la solicitada por aquel hombre.
Serio, distante, de voz y pulso firmes, aquel hombre solo mostraba delicadeza en su forma de realizar el tratamiento médico al cuerpo de la muchacha, era el único de sus aspectos que no lo hacía verse tan sólido y áspero como las rocas, aquel hombre hizo un comentario que la joven no supo bien como tomar incluso después de ver la facilidad con la que rasgaba sus ropas como si de hojas de papel se trataran, como doctora misma entendía lo que hacía y sabía lo que era tratar con gente pudorosa así que realmente no le molestaba que un camarada de oficio viera su cuerpo, pero no pudo evitar abrir sus ojos y dejar ver la sorpresa en su rostro al verse tan fácilmente despojada de sus prendas.
Una vez que empezó la parte más delicada del tratamiento la joven dejo su mano sana apoyada en el suelo lejos de su cuerpo, cerro su boca con todas sus fuerzas para no gritar e hizo lo imposible para controlar las reacciones instintivas de su cuerpo ante el dolor, al menos las que pudiera afectar la operación, su puño se había cerrado contra el suelo dejando claras marcas mientras que hacia toda la fuerza que podía para contenerse, apretó bien los dientes mientras que abundantes lagrimas recorrían su rostro, nuevamente estaba llorando sin cesar ahora por el dolor en lugar del terror, podía controlar su respiración lo suficiente para no entorpecer el tratamiento.
Una vez que la operación estuvo concluida y llego la hora de la sutura la joven pudo relajarse un poco más, aún era muy doloroso, pero comparado a lo que había estado sintiendo antes era como la picadura de un mosquito, una vez que terminaba todo dejo salir un grito aojado por el ardor del alcohol, lo hizo para dejar salir una parte de lo que había sufrido durante la operación y que no había podido dejar salir con tal de que fuera todo bien.
El masculino entrego una prenda de ropa a la joven que con su brazo sano arrastro la prenda para cubrirse lo suficiente mientras seguía tirada en el suelo, moverse sin más sería demasiado doloroso para ella -Le di mi palabra...y cumpliré... deme un momento para recuperarme un poco, no serán más que uno o dos minutos.- todavía no lograba terminar de recuperarse del dolor y ardor que había en su cuerpo al momento de decir aquellas palabras, había dejado de hacer fuerza y su cuerpo estaba caído sin fuerza, como un títere cuyos hilos fueron cortados, aunque tenía una resistencia al dolor y tolerancia sobre la media le tomaría al menos algunos minutos estar nuevamente en condiciones de siquiera dar una explicación como la solicitada por aquel hombre.
Byakuren
Hoja de personaje
Nivel:
(25/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
Creado por Chun Hwa Miér Abr 20, 2016 12:52 pm
La reacción de la mujer tras el tratamiento era normal en los humanos, sus cuerpos eran relativamente frágiles y no soportaban muy bien operaciones directas sin medicación adecuada. Al menos la mujer se mantenía consciente, aunque a ratos parecía que se le iban las luces – claro, descansa lo que necesites – su conocimiento medico le dictaba que ante un paciente en shock y conmoción post operatoria, forzarlo a hablar era una tontería, podría desmayarse o terminar muriendo por culpa del dolor. Lo mejor seria que se repusiera, de ese modo podría ser mas útil que un peso muerto si se le iban permanentemente las luces. Simplemente se sentó a un lado de la humana a comerse el atún. No tenia muchas cosas que hacer aparte de esperarla, nada mas disfrutar de su comida y hacer guardia para que ningún intruso se aproximara demasiado. De momento la mera presencia del agente mantenía a curiosos alejados pero ahora tenia que estarlos ahuyentando para que no fastidiaran.
Pasado el tiempo y ya con su pescado completamente comido, se paro sobre sus manos y se puso a hacer flexiones verticales. No iba a descuidar su entrenamiento aun cuando estuviese hablando con otro paciente – ¿ya recuperaste el aliento? – pregunta mientras continua sus ejercicios – porque sino creo que por aquí hay un sitio que ustedes llaman posada, seguro para los de piel delicada es mejor una cama que estar acostado en la arena – estaba acostumbrado a las necesidades tan extrañas de los humanos. Eso de tener que acostarse en una cama, o similares era algo un poco incomprensible para él, que estaba acostumbrado a tener que dormir en medio del mar y en el suelo de diversos climas.
Pasado el tiempo y ya con su pescado completamente comido, se paro sobre sus manos y se puso a hacer flexiones verticales. No iba a descuidar su entrenamiento aun cuando estuviese hablando con otro paciente – ¿ya recuperaste el aliento? – pregunta mientras continua sus ejercicios – porque sino creo que por aquí hay un sitio que ustedes llaman posada, seguro para los de piel delicada es mejor una cama que estar acostado en la arena – estaba acostumbrado a las necesidades tan extrañas de los humanos. Eso de tener que acostarse en una cama, o similares era algo un poco incomprensible para él, que estaba acostumbrado a tener que dormir en medio del mar y en el suelo de diversos climas.
Chun Hwa
Hoja de personaje
Nivel:
(30/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
Creado por Byakuren Jue Abr 21, 2016 1:02 pm
Lentamente la joven se recuperaba del dolor generado por la operación, muy a su ritmo mientras que la escuchaba como su petición era aceptada por parte del ser marino que la tratara, ella lo observo mientras comía y antes de ponerse a hacer flexiones verticales, una forma interesante de pasar el tiempo, estaba claro que se trataba de un hombre determinado a no desperdiciar ni un segundo de su entrenamiento, no, convertía a su entrenamiento en parte de su vida, como él había sido enseñado a ella en el monasterio donde se criara hasta un par de meses atrás.
Aquel inmenso hombre que realizaba flexiones verticales como cosa sencilla de todos los días demostró su preocupación por la fémina, a su modo se lo estaba demostrando, cosa que le causo que hizo que su característica sonrisa fuera seguida por una pequeña risilla -Los de piel delicada podemos aguantar un rato en la arena jeje- Aunque sonreía no era en burla, era un tono humorístico que avisaba sutilmente de la mejoría que estaba teniendo la fémina en cuanto a su estado.
Tras un momento de pausa para controlar su respiración al completo la joven sonrió alegre -Muchas gracias por su amabilidad buen hombre, pero creo que ya estoy en condiciones de empezar a hablarle mientras mi cuerpo continua la recuperación- Dijo tranquilamente mientras que dirigía su mirada al gyojin, intentando recordar con claridad la información concreta que le había sido solicitada por aquel desconocido.
Tras un momento de pensar y recordar los detalles que le eran posibles la joven asintió con la cabeza antes de empezar a narrar lo que le parecía la información más útil -Se trataba de un monstruo tiburón, diría que un tiburón blanco por lo que se de estos animales, tenía el mismo tamaño que usted, en sus antebrazos tenía aletas y la aleta dorsal en su espalda era bastante notoria, una musculatura diría que superior a la suya señor, por ropa llevaba solo unos pantalones azules hasta donde recuerdo, su color era de piel también era más azulado que blanco, pero sus fauces eran más como las del tiburón mencionado, además de que sus ojos eran oscuros con un centro azul y negro... -
Pese al terror que le generaban los recuerdos donde aparecía tan abominable criatura como la que le había hecho quedar en aquellas condiciones, ella se limitó a dar una descripción concreta de su apariencia sin dejar que su opinión personal y miedos influyeran en la descripción.
Aquel inmenso hombre que realizaba flexiones verticales como cosa sencilla de todos los días demostró su preocupación por la fémina, a su modo se lo estaba demostrando, cosa que le causo que hizo que su característica sonrisa fuera seguida por una pequeña risilla -Los de piel delicada podemos aguantar un rato en la arena jeje- Aunque sonreía no era en burla, era un tono humorístico que avisaba sutilmente de la mejoría que estaba teniendo la fémina en cuanto a su estado.
Tras un momento de pausa para controlar su respiración al completo la joven sonrió alegre -Muchas gracias por su amabilidad buen hombre, pero creo que ya estoy en condiciones de empezar a hablarle mientras mi cuerpo continua la recuperación- Dijo tranquilamente mientras que dirigía su mirada al gyojin, intentando recordar con claridad la información concreta que le había sido solicitada por aquel desconocido.
Tras un momento de pensar y recordar los detalles que le eran posibles la joven asintió con la cabeza antes de empezar a narrar lo que le parecía la información más útil -Se trataba de un monstruo tiburón, diría que un tiburón blanco por lo que se de estos animales, tenía el mismo tamaño que usted, en sus antebrazos tenía aletas y la aleta dorsal en su espalda era bastante notoria, una musculatura diría que superior a la suya señor, por ropa llevaba solo unos pantalones azules hasta donde recuerdo, su color era de piel también era más azulado que blanco, pero sus fauces eran más como las del tiburón mencionado, además de que sus ojos eran oscuros con un centro azul y negro... -
Pese al terror que le generaban los recuerdos donde aparecía tan abominable criatura como la que le había hecho quedar en aquellas condiciones, ella se limitó a dar una descripción concreta de su apariencia sin dejar que su opinión personal y miedos influyeran en la descripción.
Byakuren
Hoja de personaje
Nivel:
(25/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
Creado por Chun Hwa Vie Abr 22, 2016 12:25 am
Nuevamente la mujer comenzaba a hablar en ese tono tan extraño, seguramente tuviese algo malo en el cerebro. Pero aun así, mientras el agente seguía haciendo sus ejercicios comenzó a escuchar atentamente la información que le entregaban – tiburón ¿eh? – comenta ante lo primero mencionado – por lo que describes es también un Gyojin, de los mas comunes que hay en el mar, y su actitud también es bastante del montón – un simple busca pleitos era la imagen que tenia del criminal, aunque que ella dijera que era mas fuerte capto el interés inmediato - ¿así que fuerte? – comenzó a unir todas las piezas de la descripción en su cabeza. Hwa no era precisamente de las personas mas dotadas del mundo, pero era lo suficientemente inteligente como para poder armar en su cabeza, una descripción muy similar a la de una foto con los datos que la mujer le estaba dando – creo que se quien es ese tipo – los carteles de wanted e información pertinente de criminales no eran algo desconocido para nadie en el Cipher Pol – creo que su nombre es Ryder Bolt, según recuerdo forma parte de una agrupación de la armada revolucionaria, no es alguien demasiado discreto a decir verdad – a los cargos de esa agrupación habían cosas siempre muy llamativas – si es el en verdad quien hizo todo este desastre tengo que decir que no tiene muy buen gusto, es simplemente como un niño que no sabe comportarse, vaya desperdicio de potencial – se detiene un momento, haciendo una pirueta para terminar parado en la arena – seria útil saber tu nombre, el mío es Wu Geng – era el nombre fabricado por la agencia para su identidad como cazador de recompensas
Chun Hwa
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Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
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