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Creado por Daishi Kurai Vie Feb 19, 2016 11:24 pm
Recuerdo del primer mensaje :
Aquella isla sin duda era muy similar a los lugares a donde gustaba moverse, si, era definitivo, pero una cosa era cierta, si no tenía cuidado, su cabeza rodaría por el suelo ¿no? Esa fue la percepción que poseía desde aquella ventana en la que se encontraba observando el panorama completo. Había rentado una habitación en uno de los mesones que se encontraban en la zona baja de la ciudad, la menos indicada para pasear y deambular, pero la zona perfecta para que él pudiese ocultarse de cualquier tipo de problemas. Lo bueno era que la habitación tenía una vista maravillosa, por ello lo había rentado, era tan predilecta que podía notar varias zonas altas de la parte rica -Sucia aristocracia... continua apacible y descansa pequeño reino... pronto recibirás una visita- aquel muchacho sonrió mientras se alejaba de la ventana.
Salió a la ruidosa calle en esa tarde, el sol continuaba sobre la cabeza de todos, por lo tanto, podría ser que eran tipo 3 de la tarde, quizá un poco más tarde, era el momento propicio para dar un paseo por aquella zona, debía observarla, entenderla, comprenderla y, sobre todo, memorizarla. Aquellas calles serían dentro de poco un lugar propicio para huir, pero de momento sólo caminaba por el lugar. Vestía con un traje de fondo amarillo y saco azul oscuro, unos pantalones azules oscuros de igual forma y zapatos negros, nada de él debía gritar de quien se trataba, y a la vez, su pinta formal le ayudaría a andar entre sus próximas victimas, no había duda, todo aquello era un trajín más y un poco de trabajo extra, pero no podía hacerse nada, si no conocía la zona, podía fracasar en su labor.
Así fue como el joven Kurai andaría por sobre un parque local, bastante tranquilo había que mencionar, parecía ser un lugar propicio para usarlo como ruta de perdida, en caso que le siguieran, poseía variedad de árboles,lo cual lo colocaba como una ruta perfecta para escabullirse en caso de ser necesario, todos esos por menores eran detalles de suma importancia para lo que él deseaba hacer, pero tanto andar generaba un poco de cansancio o aburrimiento, más lo segundo que lo primero, como hora y media andando por la zona aprendiendo del lugar y de su gente, para que el espectáculo iniciara al anochecer. Pero vio un lugar, una de esas bancas largas en los parques donde tomar un descanso, así que decidió hacerlo, después de todo, aun faltaba para que la negrura de la noche abarcara el cielo y ocultase sus actos en el anonimato.
Salió a la ruidosa calle en esa tarde, el sol continuaba sobre la cabeza de todos, por lo tanto, podría ser que eran tipo 3 de la tarde, quizá un poco más tarde, era el momento propicio para dar un paseo por aquella zona, debía observarla, entenderla, comprenderla y, sobre todo, memorizarla. Aquellas calles serían dentro de poco un lugar propicio para huir, pero de momento sólo caminaba por el lugar. Vestía con un traje de fondo amarillo y saco azul oscuro, unos pantalones azules oscuros de igual forma y zapatos negros, nada de él debía gritar de quien se trataba, y a la vez, su pinta formal le ayudaría a andar entre sus próximas victimas, no había duda, todo aquello era un trajín más y un poco de trabajo extra, pero no podía hacerse nada, si no conocía la zona, podía fracasar en su labor.
Así fue como el joven Kurai andaría por sobre un parque local, bastante tranquilo había que mencionar, parecía ser un lugar propicio para usarlo como ruta de perdida, en caso que le siguieran, poseía variedad de árboles,lo cual lo colocaba como una ruta perfecta para escabullirse en caso de ser necesario, todos esos por menores eran detalles de suma importancia para lo que él deseaba hacer, pero tanto andar generaba un poco de cansancio o aburrimiento, más lo segundo que lo primero, como hora y media andando por la zona aprendiendo del lugar y de su gente, para que el espectáculo iniciara al anochecer. Pero vio un lugar, una de esas bancas largas en los parques donde tomar un descanso, así que decidió hacerlo, después de todo, aun faltaba para que la negrura de la noche abarcara el cielo y ocultase sus actos en el anonimato.
Daishi Kurai
Hoja de personaje
Nivel:
(9/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel |
Creado por Daishi Kurai Vie Mayo 20, 2016 4:46 am
El adiós se había realizado, comenzó con unos pasos para alejarse, pudo dejar una sonrisa en la dama, algo que nadie podría negarselo, o al menos, él mismo no podía negarlo, un gran avance la verdad. Caminó lento y observó a sus espaldas, viendo que ella se alejara y luego retomaba el camino, a paso lento, observando las calles que guiaban a todos en aquella isla, los árboles y el contorno que existía, las casas y donde los tejados llegaban, de un momento a otro volvió a ser él mismo, pero sin olvidar aquellos orbes dorados.
Comenzó a correr, era casi la hora, había dejado un momento de paz atrás, un momento donde no fue más que Daishi Kurai, un mago y ya, pudo mostrar su magia simple pero eficaz, ahora debía hacer nuevos trucos, trucos que le permitiesen lograr que la marina se viera como una total inepta al tratar de detenerlo, cosa fácil en ocasiones, difíciles en otras pero hasta el momento, había logrado salirse con la suya. Tras pasar por unos árboles ya no hubo más muchacho normal, sino, aquel ladrón cuyo rostro se encontraba en los carteles de recompensa, con su capa y sombrero de copa, siendo acompañado por el traje blanco y un monóculo en el ojo, todo el conjunto que reflejaba al Baron Puppet, ladrón de profesión, mago de invención.
Hizo lo que debía hacer, ahora usaba la ruta de escape que ya había planteado, esperaba no ver los ojos dorados, no en ese momento donde no era el mismo muchacho que conoció, evitaba a la marina pero era mejor enfrentarse a ellos que ver los orbes de oro de aquella dama tan amable, Byakuren. ¿Qué más sucedió aquella noche? No lo sabría, o más bien, no es momento de contarlo, más allá que el ladrón se salió con la suya, las demás historias de su vida no se pueden contar más por acá, sino, hasta cuando un nuevo capitulo de su pasado sea revelado.
Comenzó a correr, era casi la hora, había dejado un momento de paz atrás, un momento donde no fue más que Daishi Kurai, un mago y ya, pudo mostrar su magia simple pero eficaz, ahora debía hacer nuevos trucos, trucos que le permitiesen lograr que la marina se viera como una total inepta al tratar de detenerlo, cosa fácil en ocasiones, difíciles en otras pero hasta el momento, había logrado salirse con la suya. Tras pasar por unos árboles ya no hubo más muchacho normal, sino, aquel ladrón cuyo rostro se encontraba en los carteles de recompensa, con su capa y sombrero de copa, siendo acompañado por el traje blanco y un monóculo en el ojo, todo el conjunto que reflejaba al Baron Puppet, ladrón de profesión, mago de invención.
Hizo lo que debía hacer, ahora usaba la ruta de escape que ya había planteado, esperaba no ver los ojos dorados, no en ese momento donde no era el mismo muchacho que conoció, evitaba a la marina pero era mejor enfrentarse a ellos que ver los orbes de oro de aquella dama tan amable, Byakuren. ¿Qué más sucedió aquella noche? No lo sabría, o más bien, no es momento de contarlo, más allá que el ladrón se salió con la suya, las demás historias de su vida no se pueden contar más por acá, sino, hasta cuando un nuevo capitulo de su pasado sea revelado.
- Off:
- Disculpe el no aparecerme, pero he vuelto para cerrar el tema como es debido, muchas gracias por su tiempo y su bello rol.
Daishi Kurai
Hoja de personaje
Nivel:
(9/100)
Haki:
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