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Creado por Elizabeth Hitze Miér Abr 06, 2016 9:13 pm
Recuerdo del primer mensaje :
Después de haber tenido aquel extraño encuentro con el perro mecánico y el de blanco la joven de cabellos plateados por alguna extraña y… tonta razón se había visto obligada en vestir un hermoso vestido de color blanco el cual con suaves listones azules lo adornaban bien. No era la mejor prenda que podría usar alguien tan masculino como ella, pero para haber ayudado a aquellos niños no tuvo ninguna opción. A su lado caminaba aquel ingeniero que si bien era el culpable de que aquella prenda cubriera su cuerpo una vez habiéndolo invitado a ser parte de la tripulación solo rogaba y esperaba que en el camino no se encontrasen a aquel par de los otros miembros que si la veían vestida de esa forma seguramente se la pasarían diciéndole de cosas… - No me gustan los vestido… - susurró la capitana hacia su ahora nuevo tripulante. - El plan es que una vez llegando al puerto me lo quitare, lo desgarraré si es necesario, espero no te importa. - Se le notaba el mal humor en la mirada y en su rostro permanecía aquel ceño fruncido fiel prueba de la incómodida de la joven.
- Te presentaré a Eber y Sho, el médico y artesano del barco. - Viéndole de reojo portaba su espada en la mano derecha y con la izquierda mantenía aquel trozo de tela que cubría la herida en su brazo apretando esta con suavidad mas una mueca de desagrado y algo de dolor se había formado en aquel fino rostro que la pirata bien presumía, ya manchada de sangre un par de gotitas caían por su brazo. - No creí que fuese tan profunda. Me duele aún… - Suspiró agachando un poco la cabeza sin perder paso manteniéndose a ritmo para llegar rápido al puerto y poder quitarse el vestido. - No sé si Wolf vendrá, si lo hace será grandioso, si declina.. Bueno… Habrá que pensar en algo más. - Se encogió de hombros, a lo lejos podía ver ya algunos barcos del puerto, sonriendo un poco estaba a nada de volver a ver a sus hombres.
Después de haber tenido aquel extraño encuentro con el perro mecánico y el de blanco la joven de cabellos plateados por alguna extraña y… tonta razón se había visto obligada en vestir un hermoso vestido de color blanco el cual con suaves listones azules lo adornaban bien. No era la mejor prenda que podría usar alguien tan masculino como ella, pero para haber ayudado a aquellos niños no tuvo ninguna opción. A su lado caminaba aquel ingeniero que si bien era el culpable de que aquella prenda cubriera su cuerpo una vez habiéndolo invitado a ser parte de la tripulación solo rogaba y esperaba que en el camino no se encontrasen a aquel par de los otros miembros que si la veían vestida de esa forma seguramente se la pasarían diciéndole de cosas… - No me gustan los vestido… - susurró la capitana hacia su ahora nuevo tripulante. - El plan es que una vez llegando al puerto me lo quitare, lo desgarraré si es necesario, espero no te importa. - Se le notaba el mal humor en la mirada y en su rostro permanecía aquel ceño fruncido fiel prueba de la incómodida de la joven.
- Te presentaré a Eber y Sho, el médico y artesano del barco. - Viéndole de reojo portaba su espada en la mano derecha y con la izquierda mantenía aquel trozo de tela que cubría la herida en su brazo apretando esta con suavidad mas una mueca de desagrado y algo de dolor se había formado en aquel fino rostro que la pirata bien presumía, ya manchada de sangre un par de gotitas caían por su brazo. - No creí que fuese tan profunda. Me duele aún… - Suspiró agachando un poco la cabeza sin perder paso manteniéndose a ritmo para llegar rápido al puerto y poder quitarse el vestido. - No sé si Wolf vendrá, si lo hace será grandioso, si declina.. Bueno… Habrá que pensar en algo más. - Se encogió de hombros, a lo lejos podía ver ya algunos barcos del puerto, sonriendo un poco estaba a nada de volver a ver a sus hombres.
Elizabeth Hitze
Hoja de personaje
Nivel:
(26/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 1 | 1 |
Creado por Elizabeth Hitze Jue Abr 21, 2016 2:32 pm
- Fueron unos marines, nada importante. - Respondió tranquila la albina ante la pregunta de Eber, y es que era verdad, no era nada relevante, ella era tan torpe y tan testaruda que hubiera sido capaz de dar su vida por aquellos niños. ¿Curioso, no?.. Pero algo que llamó bastante la atención de la joven capitán fue cuando el de cabellos rojos se quejó. Arqueando su ceja algo molesta vio a Sho. - ¿A ti qué te pasó, ah? - Regañó antes de esperar la respuesta del que era su segundo al mando.
Pero de un momento a otro toda su atención se había centrado en la otra fémina que se encontraba ahí… Elizabeth era una mujer de armas tomar, si alguien no le agradaba o sentía amenaza no dudaría en echársele encima cual fiera sólo con el fin de proteger aquellos hombres que celaba tanto, pero una mueca de sorpresa se dibujó en los labios de la albina, sorpresa y cierto deje de nostalgia. Apretó sus labios y su mandíbula soltando su propia espada haciendo que el choque del metal resonara, inclinándose apenas si escuchó las palabras de ella se hincó. - No, no, no… - Le susurró a la joven albina timándola con algo de brusquedad de los hombros evitando que siguiese arrodillándose ante ella y mucho menos que inclinara así su cabeza, no lo soportaba, simplemente lo odiaba, aborrecía aquella manera de ofrecerse. - Jamás lo hagas, jamás hagas eso, nadie vale que te arrodilles así, mucho menos yo. - Se le notaba un nudo en la garganta e incluso la voz le tembló por un instante abrazándola por instinto llevando sus labios al oído ajeno. - Si vuelves a hacer algo así juro que te mataré sin dudarlo.. - Murmuró apenas en un tenue hilo de voz donde sólo buscaba que la contraria la escuchara, cierto coraje salía de sus palabras y bueno… Para alguien que vivió casi toda su vida de esa manera ver a alguien más hacerlo hacía que le hirviera la sangre. - No eres herramienta, si Eber te tomó como alumna está bien, no te llameas así de nuevo. - Ordenó tras ponerse de pie y tomó su espada sin voltear a ver a nadie de los presentes comenzando a caminar al barco, odiaba los momentos de debilidad que solía tener. - Suban y carguen todo, esperaremos un rato más a ver si viene Wolf, quiero ir a la siguiente isla, debo conseguir un mapa de la Grand Line. - Ordenó como si nada y se detuvo girándose un poco sólo para ver de reojo a la otra alvina regalándole una sincera sonrisa. - Bienvenida a la familia. - Acotó siguiendo su camino al barco.
Pero de un momento a otro toda su atención se había centrado en la otra fémina que se encontraba ahí… Elizabeth era una mujer de armas tomar, si alguien no le agradaba o sentía amenaza no dudaría en echársele encima cual fiera sólo con el fin de proteger aquellos hombres que celaba tanto, pero una mueca de sorpresa se dibujó en los labios de la albina, sorpresa y cierto deje de nostalgia. Apretó sus labios y su mandíbula soltando su propia espada haciendo que el choque del metal resonara, inclinándose apenas si escuchó las palabras de ella se hincó. - No, no, no… - Le susurró a la joven albina timándola con algo de brusquedad de los hombros evitando que siguiese arrodillándose ante ella y mucho menos que inclinara así su cabeza, no lo soportaba, simplemente lo odiaba, aborrecía aquella manera de ofrecerse. - Jamás lo hagas, jamás hagas eso, nadie vale que te arrodilles así, mucho menos yo. - Se le notaba un nudo en la garganta e incluso la voz le tembló por un instante abrazándola por instinto llevando sus labios al oído ajeno. - Si vuelves a hacer algo así juro que te mataré sin dudarlo.. - Murmuró apenas en un tenue hilo de voz donde sólo buscaba que la contraria la escuchara, cierto coraje salía de sus palabras y bueno… Para alguien que vivió casi toda su vida de esa manera ver a alguien más hacerlo hacía que le hirviera la sangre. - No eres herramienta, si Eber te tomó como alumna está bien, no te llameas así de nuevo. - Ordenó tras ponerse de pie y tomó su espada sin voltear a ver a nadie de los presentes comenzando a caminar al barco, odiaba los momentos de debilidad que solía tener. - Suban y carguen todo, esperaremos un rato más a ver si viene Wolf, quiero ir a la siguiente isla, debo conseguir un mapa de la Grand Line. - Ordenó como si nada y se detuvo girándose un poco sólo para ver de reojo a la otra alvina regalándole una sincera sonrisa. - Bienvenida a la familia. - Acotó siguiendo su camino al barco.
Elizabeth Hitze
Hoja de personaje
Nivel:
(26/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 1 | 1 |
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