Amanecía en Syrup, una isla bastante tranquila antaño, actualmente durante esa semana parecía haber un brote de piratería un poco preocupante en la isla. El gobierno local no podía con ese brote y pidió ayuda a la marina con ese asunto. Por ello habían contingentes desde hace un par de días ayudando a capturar tantos piratas como pudiesen, pero parece que por cada uno que atrapaban, habían diez para reemplazarlos, eran una especie de plaga. Entre el contingente se encontraba alguien un tanto particular, esta persona si es que se le puede llamar como tal, era un pacifista que hace poco regreso al servicio activo, Maxwell, quien paso toda la madrugada en una redada con un escuadrón de soldados. El grupo era lo bastante numeroso como para poner en problemas a las fuerzas del orden, pero luego que llego el Pacifista la situación se controlo bastante rápido, era digamos un poco tonto atacar con cadenas y palos a alguien como Maxwell.

El disturbio había sido controlado y el rubio se encontraba patrullando en solitario, no era por que estuviese sobrado, o alguna razón similar, sino porque no quería que otros compañeros marines se viesen involucrados en fuego cruzado, y dado su arsenal eso nunca estuvo mejor dicho. Su uniforme marine era el que siempre usaba, mangas largas, una capucha, pero no cargaba sus guantes, estaba de servicio así que cargaba los guanteletes puestos, pero las mangas de la chaqueta los cubrían hasta la altura de la muñeca. Cuando de la nada un grupo de marines notifica que están persiguiendo a un pirata, Maxwell no sabia nada hasta que el grupo paso junto a su lado mientras perseguían a ¿una vaca? Detuvo en seco a uno de los marines que pasaban frente a él - ¿Qué rayos pasa? – pregunta el pacifista – estamos persiguiendo a un pirata - ¿la vaca era un pirata? Difícil de creer, pero si era un criminal tendría que capturarlo.

Comienza a seguir al grupo pero pierden de vista al criminal cerca de una arboleda, parecían pensar que se les había escapado. Maxwell sabia que alguien como el pirata en cuestión no desaparecía sin mas. Se puso a inspeccionar con cuidado el área, las huellas de un cuerpo pesado se notaban en la tierra pero se detenían abruptamente cerca de los arboles. Examino los troncos notando como en uno habían hendiduras de presión, no eran normales en los animales pequeños de la isla. Alzo la mirada hacia arriba notando al criminal en cuestión, trepado al árbol como si fuese un mapache – entrégate sin oponer resistencia y no acumularas cargos adicionales – le decía el rubio a la extraña vaca que se encontraba subida al árbol.

¿Muu? parece que el pirata tenia de vaca no solo su apariencia. Maxwell esperaba una rendición tranquila, sin muchos inconvenientes pero como siempre las cosas nunca salían como se esperaban. Aquel criminal comenzó a correr de rama en rama, esa agilidad no era demasiado común que se dijera, pero se podían escuchar muchas veces el crepitar de las ramas, como si el pirata en cuestión pesara mucho. Detalles como esos no le importaban demasiado al pacifista, un criminal estaba en fuga y era su tarea atraparlo - objetivo marcado, iniciando protocolo de persecución - Maxwell al terminar esa frase comenzó a desplazarse por el suelo, siguiendo la misma línea que el pirata que se movía por los arboles.

La velocidad de ambos era bastante similar, pero el pacifista recuperaba algo de terreno pues su desplazamiento era bastante estable. Aun cuando el criminal estuviese en fuga, Maxwell decidió darle un ultimo aviso - Code: Bullseyes - en su brazo izquierdo comenzaron a moverse unos mecanismos, que terminaron en que inclinara su muñeca hacia abajo y por encima del reverso de la mano saliese un cañón - fijando objetivo - primera regla de disparar a un objetivo en movimiento, nunca disparar a la posición actual, siempre disparar hacia adelante, de ese modo la bala al momento de corregir su trayectoria terminaba dando en la posición del blanco, si disparabas encima del objetivo al estar en movimiento la bala daría hacia detrás de la posición.

Luego de ajustar por movimiento, el marine dispara accionando un mecanismo interno en el arma. La bala sale en dirección al pirata, pero no directo a su posición sino hacia unas ramas que tenia en frente, impactando en el árbol justo cuando la vaca le pasaba por un lado. Geometría pura y dura - Ultima advertencia, ya sus cargos incluyen huir de un oficial, si continua se le sumara resistirse al arresto - dijo sin detener el paso ni un momento. Esperaba con eso captar su atención, pero si insistía en correr tendría que tomar un enfoque mucho mas agresivo, ya no para capturarlo sino para derribarlo.

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La bala cumplió su objetivo, aunque mucho mejor de lo que se esperaba. El sonido de un objeto pesado y una nube de polvo arremolinándose alrededor del pirata. Maxwell retrae su cañón y detiene su paso, esperando lo que podría ocurrir a continuación, pero aparentemente el criminal decide entregarse – muy bien, dado que se esta entregando no acumulara mas cargos – el pacifista se le aproxima lentamente, su paso era firme, prefería darle el beneficio de la duda al pirata. No parecía tener ningún arma encima, pues el cañón se había ocultado completamente – dese la vuelta y coloque las manos por detrás de su espalda – era el procedimiento normal para la detención de criminales – Tiene derecho a guardar silencio, si renuncia a ese derecho, todo lo que diga sera usado en su contra – saco unas esposas de su bolsillo, equipo carcelario de rutina, sin muchos problemas.

Aun con todo lo que había mostrado Maxwell se mantenía alerta, si ese tipo estaba mintiendo y atacaba a traición, no seria una misión de captura, sino una de exterminación. Sus ojos se mantenían atentos, cualquier movimiento que no fuese el indicado podría ser una potencial señal de agresión, una tontería teniendo en cuenta que había un contingente de la marina buscando a ese pirata. También existía la posibilidad de que se entregase pacíficamente, en cuyo caso solo con cumplir una condena medianamente corta, saldría libre. Sin importar el resultado, Maxwell estaría haciendo cumplir la ley, de una manera u otra. Tan solo no deseaba una lucha innecesaria.

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La regla de todo buen oficial que ejercía la ley era que ningún criminal decía la verdad, aun así la ley también decía que toda persona era inocente hasta demostrarse lo contrario. Por ello era que daba el beneficio de la duda a los criminales, pues Maxwell aun cuando era un fiel seguidor de la justicia absoluta, las leyes daban cierto margen para que los criminales pudiesen defender su punto. El pacifista no era un cazador de brujas, si el criminal se rendía haría lo que pudiese para que su trato fuese justo. Aun así sus sospechas iniciales habían sido correctas, pues cuando se acerco lo suficiente el pirata se dio la vuelta, movimiento no indicado por el marine y seria tomado como una agresión – Objetivo cambiado – en el momento que una de las patadas del pirata avanzo hacia el rostro del marine, este lanzo un puñetazo con la mano derecha a la altura del tobillo del pirata – Iniciando protocolo de exterminación – el puño que viajaba por el aire de repente acelero, del codo de la diestra del marine salió una llamarada, quemando esa parte de la manga del uniforme.

El puño impacta en su rival desviando la patada de su trayectoria, pero el sonido del impacto de dos metales chocando daba a entender que el pirata en cuestión no era humano del todo. La sucesión de otras patadas que iban al rostro del pacifista también obtuvo respuesta, pues en el momento que se retraía la diestra, la mano izquierda avanzaba hacia adelante. Que al igual que como paso anteriormente, del codo izquierdo salió una llamarada propulsando el golpe – Code: Uzi – siguió una cadena de golpes que salían cual ráfaga bloqueando todos los ataques del pirata, era como un movimiento de pistón, en el momento que se retraía un brazo el otro salía hacia adelante.

Luego de unas cinco patadas el pirata parecía querer alejarse, pero Maxwell aun no había terminado con el, pues antes que pudiese hacerlo se le aproximo rápidamente lanzándole una ráfaga de cinco golpes, dos al rostro y los demás al torso. En total fue una cadena de diez golpes, todos tan fuertes como el anterior. El criminal había cometido un error, Maxwell le había tendido una mano y pero le habían escupido en la cara, ahora el pacifista arremetería con todo en contra de su rival, que si quería salir de ahí tendría que pasar por encima de Maxwell.

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La cadena de golpes había avanzado con toda intensión de moler a palos al pirata, pero había sido detenida, los reflejos de su rival habían sido bastante buenos, pero lo que le intrigo fue el chirriante sonido del metal impactando contra lo que parecía una herramienta. Si, cada golpe del pacifista había sido detenido pero no a mano limpia, sino con una especie de taladro que soltó chispas cada vez que se impactaba. Aun con todo eso el rostro de Maxwell no cambiaba, desde que bloqueo los golpes del pirata, se dio cuenta que su naturaleza era artificial, de modo que era muy posible que tuviese varios trucos bajo su manga. Los brazos del pacifista a pesar del taladro no habían recibido daño, el armazón mas denso le proporcionaba una defensa mas grande de la habitual en esa área.

A pesar de todo, el pirata no inicio de nuevo un ataque, tiempo que Maxwell no desaprovecho. Su cabeza procesaba información muy rápida, adaptando los parámetros de ataque. Si el rival era un Cyborg u otro pacifista, la lucha sería algo mas complicada de lo que aparentaba a inicios pero no era algo que amedrentara al marine. Analizando fríamente las acciones los dedos giraron como taladros, por lo tanto sus brazos eran mecánicos parcialmente, lo siguiente era ver hasta que punto lo eran. La mejor manera de averiguarlo era atacando, con algo mas de precisión.

Luego de que su ultimo golpe fuese detenido, la mano izquierda se retrajo saliendo, subió la mano derecha en un arco ascendente, similar a un gancho de boxeo. La diferencia en esa ocasión es que no apuntaba al mentón del rival, sino a su codo. Si resultaba que en ese punto también era artificial, solo quedaría una respuesta, golpearlo hasta derribarlo. No quedaría de otra.