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Creado por Mei Haiba Jue Dic 10, 2015 4:45 pm
Baterilla
Hace pocos meses
Hace pocos meses
La soldado refunfuñaba en voz baja mientras, situada de pie frente al exterior del cuartel de la Marina en Baterilla, fijaba su mirada hacia delante. Allí estaba, el tablón de Wanted del cuartel de la ciudad, una enorme tabla de madera sujeta a la pared exterior principal del edificio en el que a su vez se colgaban todos cuantos carteles de Búsqueda y Captura se pudiera, priorizando a los criminales que hubieran sido vistos en los Mares Cardinales y, especialmente, en el propio South Blue. Aunque realmente aquel espacio era suficientemente espacioso cómo para permitirse el lujo de añadir las recompensas de los piratas más famosos, de aquellos cuyas hazañas llegaban hasta islas tan alejadas de la Grand Line cómo lo era Baterilla. Y aunque ella no tuviera cómo objetivos a criminales cuyas recompensas se extendían más allá de las ocho cifras, sí que había fijado los ojos en malhechores de poca monta que habían acumulado un poco de dinero por sus cabezas a base de armar problemas en los Cardinales. Roma no se construyó en un día, eso era cierto, pero también lo era el hecho de que a ella ni siquiera le estaban dando el permiso para colocar la primera piedra. Se había unido a la Marina con un propósito claro, imponer justicia. Pero hasta el momento lo único que había impuesto había sido el sello del cuerpo en informes, hecho rondas de patrulla y realizado entrenamientos físicos y mentales que había superado con absurda facilidad. Pero en ningún momento había aparecido su oportunidad. El momento en el que viera que todo aquello terminara y pudiera lanzarse finalmente a la búsqueda de una presa a la que capturar.
La joven se mordió el labio inferior cuando vio cómo uno de los cazadores de recompensas que solían pasar por el cuartel se acercaba al tablón y retiraba con un movimiento brusco uno de los carteles que estaba mirando. Ellos tenían más suerte que ella en ese aspecto, pues su trabajo se resumía en ser perros de caza humanos. Elegían, localizaban, perseguían y finiquitaban el trabajo. Luego cobraban su recompensa y se iban a casa tranquilamente, con los bolsillos llenos y la satisfacción que otorga el trabajo bien hecho. No eran pocas las veces las que Deka se había planteado que hubiera preferido ser una Cazadora antes que una recluta, pero entonces recordaba los innumerables nombres de increíbles guerreros que habían fallado en su intento de capturar a un pirata. Su vida era dura y el obtener dinero siempre venía ligado al peligro. - Maldita sea... - maldijo por lo bajo, mientras pateaba el suelo furiosa. En aquellos momentos la rabia contenida la carcomía por dentro.
Mei Haiba
Hoja de personaje
Nivel:
(41/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
Creado por Toshiro Hitsugaya Vie Dic 11, 2015 3:57 pm
No sabía muy bien como había terminado siendo un cazador de recompensas, en el pueblo donde su hermana lo dejo en aquel Dojo cuando ya era mayor salía con algunos de sus compañeros para hacer rondas cuidando el lugar por pedido del dueño debido a que los marines en algunas épocas del año descuidaban la seguridad del pueblo momento en el que algunos piratas se aprovechan para ir a causar algunos problemas. Cuando se encontraba con un grupo de piratas haciendo de las suyas y debía ir a detenerlos era cuando notaba que tanto aprendió con la Katana desde que llego al Dojo cuando era tan solo un niño, con el paso del tiempo la gente del pueblo comenzó a reconocerlo por su trabajo indicándole que cobrara a la marina por quienes iba capturando aunque no fuera mucho lo que no ganaba no era malo un poco de dinero extra para ayudar al dueño del Dojo a quien respetaba mucho. Así fue como inicio el camino de cazador de recompensas para el espadachín, cuando salió de viaje dejando el lugar donde nació y entreno toda su vida viajo por distintas islas en busca de trabajos lo cual era bastante difícil ya que siempre se encuentra en competencia con la marina con quienes por ahora no tiene como competirles el número de personas que tienen en sus filas es mayor entre muchas otra, pero lo que no cambiaría nunca era la tranquilidad de ser su propio “jefe”, trabajar por si mismo y arreglárselas como pudiera en toda situación.
Ahora se encontraba en Baterilla una isla en el South Blue en busca de algún trabajo que pudiera hacer porque en las islas cercanas no tuvo mucha suerte, como tiene conocimientos de navegación llegar no fue muy difícil solo tuvo que seguir un par de indicaciones a los pueblerinos de donde estuvo anteriormente. El clima un poco tropical le agradaba a pesar de su vestimenta casi de cuerpo completo, las palmeras y cabañas le daban un toque con el cual se distraía cada tanto mientras caminaba en dirección al cuartel de la Marina en la isla, si buscaba a alguien a quien capturar lo más seguro es que los carteles de búsqueda se encontraran ahí. Caminaba con su mano izquierda apoyado sobre sus Katanas que llevaba siempre en ese lado, a los pocos minutos ya podía ver cuartel de la marina a una persona que iba mirando un cartel de búsqueda por lo que probablemente fuera un cazador de recompensas igual que él y a lo lejos fuera del cartel a una chica de cabellos rubios los cuales llegaban hasta casi la mitad de su espalda, en menos de un par de minutos se encontraba subiendo la escalera del cuartel de la Marina quedando a la misma altura que aquella mujer la cual era bastante alta con el cabello suelto sobre sus espaldas y vestía con una especie de uniforme pero era diferente del típico uniforme de los marines por lo que podía tratarse de una cazadora al igual que él que buscaba a quien capturar aunque parecía estar molesta por la patada al suelo que da — ¿Qué podría molestar tanto a una cazadora como tú? — poseía una sonrisa amplia que no podía ocultar así que para no demostrarla se colocó al lado derecho de la chica mirando los carteles de búsqueda para ver cuál tomar — Algún día podríamos trabajar juntos para atrapar a algún pirata… Mi nombre es Okita — no la miro directamente aunque quisiera ver la cara de quien se estaba dirigiendo, al verla dar esa patada no podía evitar molestarla era un pasatiempo un poco molesto pero que sin duda alguna disfrutaba mucho, puso su mano derecha sobre uno de los carteles dudoso si sobre sacarlo o no.
Ahora se encontraba en Baterilla una isla en el South Blue en busca de algún trabajo que pudiera hacer porque en las islas cercanas no tuvo mucha suerte, como tiene conocimientos de navegación llegar no fue muy difícil solo tuvo que seguir un par de indicaciones a los pueblerinos de donde estuvo anteriormente. El clima un poco tropical le agradaba a pesar de su vestimenta casi de cuerpo completo, las palmeras y cabañas le daban un toque con el cual se distraía cada tanto mientras caminaba en dirección al cuartel de la Marina en la isla, si buscaba a alguien a quien capturar lo más seguro es que los carteles de búsqueda se encontraran ahí. Caminaba con su mano izquierda apoyado sobre sus Katanas que llevaba siempre en ese lado, a los pocos minutos ya podía ver cuartel de la marina a una persona que iba mirando un cartel de búsqueda por lo que probablemente fuera un cazador de recompensas igual que él y a lo lejos fuera del cartel a una chica de cabellos rubios los cuales llegaban hasta casi la mitad de su espalda, en menos de un par de minutos se encontraba subiendo la escalera del cuartel de la Marina quedando a la misma altura que aquella mujer la cual era bastante alta con el cabello suelto sobre sus espaldas y vestía con una especie de uniforme pero era diferente del típico uniforme de los marines por lo que podía tratarse de una cazadora al igual que él que buscaba a quien capturar aunque parecía estar molesta por la patada al suelo que da — ¿Qué podría molestar tanto a una cazadora como tú? — poseía una sonrisa amplia que no podía ocultar así que para no demostrarla se colocó al lado derecho de la chica mirando los carteles de búsqueda para ver cuál tomar — Algún día podríamos trabajar juntos para atrapar a algún pirata… Mi nombre es Okita — no la miro directamente aunque quisiera ver la cara de quien se estaba dirigiendo, al verla dar esa patada no podía evitar molestarla era un pasatiempo un poco molesto pero que sin duda alguna disfrutaba mucho, puso su mano derecha sobre uno de los carteles dudoso si sobre sacarlo o no.
Toshiro Hitsugaya
Hoja de personaje
Nivel:
(31/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 3 |
Creado por Mei Haiba Dom Dic 13, 2015 11:46 am
Apenas tuvo tiempo para refunfuñar cuando el sonido de una voz cercana la sacó de su ensimismamiento. Al principio no supo exactamente si se estaban refiriendo a ella al haber hablado de una "cazadora" pero rápidamente reaccionó al darse cuenta de que era una de las pocas personas allí fuera y, curiosamente, la única mujer. El problema había sido que aquella voz se había equivocado, ella no era cazadora aunque tampoco le culpaba por haber cometido un desliz como aquel. La joven no vestía el uniforme habitual de los marines, sino simplemente unos pantalones de tela marrón y una camisa blanca en aquella ocasión ni tan siquiera llevaba su gorra, sino que tenía el pelo recogido en una cola de caballo que le era mucho más cómoda para cuando trabajaba en el interior del cuartel haciendo papeleo. Una apariencia que distaba bastante del típico recluta marine con su chaqueta blanca, su gorra con el símbolo del cuerpo y la aparente cara de bobo que todos tenían al empezar. Una imagen bastante prototípica y cliché, pero que se cumplía en bastantes casos, aunque evidentemente no fuera el de la Soldado Kozlov que aparentaba ser una persona totalmente ajena al cuerpo, especialmente por su actitud y vestiduras.
Finalmente la joven soldado dirigió su mirada brevemente hacia la posición de la que habían provenido aquellas palabras, encontrándose con que quién había hablado era un hombre de edad aparentemente similar a la suya. Vestía con ropa peculiar cómo aquella chaqueta de color negro con detalles amarillos, quizás algo demasiada abrigada para una isla tropical cómo Baterilla y que hacía intuir que no había nacido ni había pasado demasiado tiempo en ella. - ¿Cazadora? - respondió, formulando una pregunta retórica que usaría para dar pie a la explicación del error cometido por el joven. - Te equivocas en eso, Okita. Tenemos el mismo trabajo, pero me temo que llevamos uniformes distintos, yo estoy en la Marina. - su respuesta pudo parecer algo distante, teniendo en cuenta la aparente amabilidad con la que el joven se había presentado. Pero la verdad era que la rubia tenía una forma de ser peculiar y cualquier mínimo amago de calidez o cercanía era un extraño fenómeno. - Lo que tú me propones sería, precisamente, lo que calmaría un poco el enfado que tengo... - respondió, dejando escapar un largo suspiro de desengaño al terminar la frase. Le gustaría aceptar esa propuesta, pero sabía perfectamente que no podía. - Pero me temo que mis superiores no son tan expeditivos cómo vosotros... - dijo, usando el mismo tono semi-decaído de la frase anterior, terminando de nuevo con otro suspiro. - Perdona mi descortesía, Okita, puedes llamarme Deka. ¿Has venido en busca de un objetivo? - finiquitó, presentándose únicamente con su nombre e interesándose por los planes futuros de su acompañante. Una mera cortesía, cierto, pero al fin y al cabo tampoco le costaba nada intentar aprender un poco de aquel individuo.
Finalmente la joven soldado dirigió su mirada brevemente hacia la posición de la que habían provenido aquellas palabras, encontrándose con que quién había hablado era un hombre de edad aparentemente similar a la suya. Vestía con ropa peculiar cómo aquella chaqueta de color negro con detalles amarillos, quizás algo demasiada abrigada para una isla tropical cómo Baterilla y que hacía intuir que no había nacido ni había pasado demasiado tiempo en ella. - ¿Cazadora? - respondió, formulando una pregunta retórica que usaría para dar pie a la explicación del error cometido por el joven. - Te equivocas en eso, Okita. Tenemos el mismo trabajo, pero me temo que llevamos uniformes distintos, yo estoy en la Marina. - su respuesta pudo parecer algo distante, teniendo en cuenta la aparente amabilidad con la que el joven se había presentado. Pero la verdad era que la rubia tenía una forma de ser peculiar y cualquier mínimo amago de calidez o cercanía era un extraño fenómeno. - Lo que tú me propones sería, precisamente, lo que calmaría un poco el enfado que tengo... - respondió, dejando escapar un largo suspiro de desengaño al terminar la frase. Le gustaría aceptar esa propuesta, pero sabía perfectamente que no podía. - Pero me temo que mis superiores no son tan expeditivos cómo vosotros... - dijo, usando el mismo tono semi-decaído de la frase anterior, terminando de nuevo con otro suspiro. - Perdona mi descortesía, Okita, puedes llamarme Deka. ¿Has venido en busca de un objetivo? - finiquitó, presentándose únicamente con su nombre e interesándose por los planes futuros de su acompañante. Una mera cortesía, cierto, pero al fin y al cabo tampoco le costaba nada intentar aprender un poco de aquel individuo.
Mei Haiba
Hoja de personaje
Nivel:
(41/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
Creado por Toshiro Hitsugaya Miér Dic 16, 2015 9:35 pm
Saco su mano derecha para pasarla un par de veces sobre su mentón ya que finalmente no tomaría aquel cartel de búsqueda, pensándolo bien seguramente necesitaría la ayuda de un par de personas para poder asegurar la captura lo cual lo llevaría a tener que repartir el dinero conseguido por lo que tanto esfuerzo y trabajo no valdría la pena para el poco dinero que le llegaría al finalizar el trabajo, es cierto que necesita el dinero pero no por eso hará cualquier trabajo para obtenerlo si tiene que hacer uno más pequeño por el momento lo hará sin problemas. El calor de la isla comenzaba a notarlo gracias a su vestimenta casi completa de color negra salvo por unos detalles en la chaqueta lo cual hacia que su sensación del calor aumentara más rápido que si vistiera otros colores, por lo que desabrocho los primeros botones de la chaqueta para refrescarse un poco.
Miraba de lado a la chica de cabello rubio que tenía a su lado aun sin alguna respuesta, quizás por el enfado que tenía las palabras del espadachín no fueron las mejores en ese momento. El tono de voz de la joven la saco de sus pensamientos sobre el cartel que quería sacar girando la cabeza para ver a la joven, con lo que dijo aunque fuera un palabra demostraba que se equivocó al indicarla como una Cazadora, al escucharla decir que era de la marina asintió con la cabeza un par de veces — Con que eres de la Marina… Como tu uniforme es distinto al que usan la mayoría de los Marines pensé que podrías ser una Cazadora además de que estás viendo los carteles de búsqueda, nunca vi a un marine que los viera durante tanto tiempo por lo general nunca los ven por más de un minuto — sacudía su chaqueta con la mano derecha por el calor que comenzó a sentir por el clima que hacía en la isla — Entonces podri… — no termina de hablar cuando noto el suspiro de la chica así que callo unos segundos mientras volvió a hablar con el mismo tono desganado — Entonces no hay de que preocuparse, con que no sepan tus superiores no deberías tener problemas — termino de hablar con una sonrisa en su rostro esperando que pudiera aceptar aquella propuesta de trabajar juntos. Escucho el nombre de la chica y lo repitió un par de veces antes de que se le olvidara — Si, he venido en busca de un objetivo en las islas cercanas no tuve mucha suerte, la gran mayoría estaban tomados y los que quedaban no me llamaban mucho la atención —, giro su cabeza hacia el tablón de anuncios buscando alguno que pudiera hacer luego volviendo a mirar a Deka — ¿Qué hay de ti? Porque simplemente no tomas uno y lo haces, es raro que los marines vean los carteles de esta forma a los que he conocido lo hacen exclusivamente para memorizar los rostros de algunos criminales pero tú pareces querer capturar a uno de ellos igual que un Cazador, tampoco vistes igual que ellos— con su dedo pulgar indica los carteles que se encontraban en el anuncio
Miraba de lado a la chica de cabello rubio que tenía a su lado aun sin alguna respuesta, quizás por el enfado que tenía las palabras del espadachín no fueron las mejores en ese momento. El tono de voz de la joven la saco de sus pensamientos sobre el cartel que quería sacar girando la cabeza para ver a la joven, con lo que dijo aunque fuera un palabra demostraba que se equivocó al indicarla como una Cazadora, al escucharla decir que era de la marina asintió con la cabeza un par de veces — Con que eres de la Marina… Como tu uniforme es distinto al que usan la mayoría de los Marines pensé que podrías ser una Cazadora además de que estás viendo los carteles de búsqueda, nunca vi a un marine que los viera durante tanto tiempo por lo general nunca los ven por más de un minuto — sacudía su chaqueta con la mano derecha por el calor que comenzó a sentir por el clima que hacía en la isla — Entonces podri… — no termina de hablar cuando noto el suspiro de la chica así que callo unos segundos mientras volvió a hablar con el mismo tono desganado — Entonces no hay de que preocuparse, con que no sepan tus superiores no deberías tener problemas — termino de hablar con una sonrisa en su rostro esperando que pudiera aceptar aquella propuesta de trabajar juntos. Escucho el nombre de la chica y lo repitió un par de veces antes de que se le olvidara — Si, he venido en busca de un objetivo en las islas cercanas no tuve mucha suerte, la gran mayoría estaban tomados y los que quedaban no me llamaban mucho la atención —, giro su cabeza hacia el tablón de anuncios buscando alguno que pudiera hacer luego volviendo a mirar a Deka — ¿Qué hay de ti? Porque simplemente no tomas uno y lo haces, es raro que los marines vean los carteles de esta forma a los que he conocido lo hacen exclusivamente para memorizar los rostros de algunos criminales pero tú pareces querer capturar a uno de ellos igual que un Cazador, tampoco vistes igual que ellos— con su dedo pulgar indica los carteles que se encontraban en el anuncio
Toshiro Hitsugaya
Hoja de personaje
Nivel:
(31/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 3 |
Creado por Mei Haiba Jue Dic 17, 2015 4:40 am
La joven mantuvo su mirada fija en Okita durante toda su conversación, analizándolo todavía más, pero sin llegar a ninguna nueva conclusión más. Sin embargo, por su lenguaje corporal pudo notar que el joven cazarecompensas parecía estar pasando calor. A ella ya le parecía que con la ropa que llevaba iba a asarse vivo, y así lo parecía pues a los pocos minutos de empezar a conversar, el joven se desabrochó los botones superiores de su chaqueta, dejando que su torso se aireara un poco más. En cambio, la camisa blanca de la joven era lo suficientemente ligera cómo para que el calor tropical de Baterilla fuera soportable. Por eso, aunque aquel estilo de ropa no fuera excesivamente de su agrado, debía reconocer que le daba la formalidad mínima para ser bien vista por sus superiores y le permitía no morir abrasada por el calor.
La soldado dejó que su interlocutor hablara, sin interrumpirle en ningún momento, mientras le exponía su idea para solucionar el "problema" de la joven, que no pudo evitar esbozar una media sonrisa ante las palabras de Okita. Su idea era simple, sencilla y, aparentemente, efectiva. Cómo decían las malas lenguas, "ojos que no ven, corazón que no siente". Si sus superiores no estaban al tanto de sus actos, no pasaba nada. El problema venía con el hecho de que burlar la vigilancia de sus superiores era difícil, por no decir imposible. Escapar de la vigilancia de la Marina era una tarea difícil, mucho más desde el momento en el que ingresabas en sus filas. Los turnos, las guardias, las inspecciones, asignaciones,... No eran pocas las maneras que tenía los Mandos de revisar el estado de sus subordinados y aquel que osaba incumplir las normas lo terminaba pagando, Deka lo había visto con sus propios ojos. - Ojalá fuera tan fácil, Okita. - respondió cuando el joven finalmente dejó de hablar. - Me encantaría hacer lo que tú dices y tomar uno de esos carteles y hacerme cargo yo misma, pero aquí las cosas no funcionan así. - la joven dejó escapar un suspiro de nuevo, pero esta vez cargado más de frustración que de pesar. - Hay que respetar la cadena de mando. Y si no recibo órdenes de hacerlo, no puedo empezar la caza de un pirata. - le explicó. Las palabras del cazador le habían dejado entrever que no sabía cómo funcionaba internamente la Marina, por lo que se había tomado la libertad de explicárselo a rasgos muy generales. - Así que me temo que voy a tener que aguantarme... Pero nada me impide ayudarte a ti a escoger un objetivo. No tengo demasiados datos extra que ofrecerte, pero quizás te sean de ayuda. - dijo, ofreciéndose a ayudar al joven. Y aunque le hubiera gustado poder trabajar mano a mano con el cazador, sabía que no era posible, por eso le ofrecía darle un pequeño empujón logístico para su siguiente trabajo.
La soldado dejó que su interlocutor hablara, sin interrumpirle en ningún momento, mientras le exponía su idea para solucionar el "problema" de la joven, que no pudo evitar esbozar una media sonrisa ante las palabras de Okita. Su idea era simple, sencilla y, aparentemente, efectiva. Cómo decían las malas lenguas, "ojos que no ven, corazón que no siente". Si sus superiores no estaban al tanto de sus actos, no pasaba nada. El problema venía con el hecho de que burlar la vigilancia de sus superiores era difícil, por no decir imposible. Escapar de la vigilancia de la Marina era una tarea difícil, mucho más desde el momento en el que ingresabas en sus filas. Los turnos, las guardias, las inspecciones, asignaciones,... No eran pocas las maneras que tenía los Mandos de revisar el estado de sus subordinados y aquel que osaba incumplir las normas lo terminaba pagando, Deka lo había visto con sus propios ojos. - Ojalá fuera tan fácil, Okita. - respondió cuando el joven finalmente dejó de hablar. - Me encantaría hacer lo que tú dices y tomar uno de esos carteles y hacerme cargo yo misma, pero aquí las cosas no funcionan así. - la joven dejó escapar un suspiro de nuevo, pero esta vez cargado más de frustración que de pesar. - Hay que respetar la cadena de mando. Y si no recibo órdenes de hacerlo, no puedo empezar la caza de un pirata. - le explicó. Las palabras del cazador le habían dejado entrever que no sabía cómo funcionaba internamente la Marina, por lo que se había tomado la libertad de explicárselo a rasgos muy generales. - Así que me temo que voy a tener que aguantarme... Pero nada me impide ayudarte a ti a escoger un objetivo. No tengo demasiados datos extra que ofrecerte, pero quizás te sean de ayuda. - dijo, ofreciéndose a ayudar al joven. Y aunque le hubiera gustado poder trabajar mano a mano con el cazador, sabía que no era posible, por eso le ofrecía darle un pequeño empujón logístico para su siguiente trabajo.
Mei Haiba
Hoja de personaje
Nivel:
(41/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
Creado por Toshiro Hitsugaya Jue Dic 17, 2015 2:57 pm
Con los botones que desabrocho ya soportaba mejor el calor que estaba haciendo en la isla la cual al inicio no le pego tan fuerte pero con el paso de los minutos comenzó a sentirlo sin mucho que hacer, si se encontrara solo no tendría problema de ir con el torso desnudo caminando por la isla hasta sacar un cartel de búsqueda para retirarse del lugar pero no lo hacía porque se encontraba hablando con Deka a la cual conocía hace tan solo unos minutos así que no sabía si eso la podía molestar o no pero por como se veía seria no lo haría aunque estuviera asándose vivo con las ropas que andaba trayendo.
Por las palabras de Deka al parecer no sería tan simple el hecho de que pudiera cazar a un pirata porque si, a menos que uno de sus superiores se lo pidiera, eso mismo era la gran diferencia entre los Cazadores y los miembros de la marina, los Cazadores podían hacer lo que quisieran cuando quisiera aparentemente sin problema alguno a menos que sus acciones se le escaparan de las manos mientras que los miembros de la marina principalmente los que se encuentran en los rangos más abajo tienen que seguir las ordenes de sus superiores o tendrían un castigo por sus actos de indisciplina, una cadena de mando muy estricta para alguien que lo ve desde afuera. — Ya veo con que la cadena de mando es bastante estricta dentro de la Marina — aquella situación de no poder hacer lo que quisiera parecía molestarla e incluso llegar a frustrarla — Si te molesta la situación ¿Por qué no te conviertes en una Cazadora? De esa forma podrías tomar cualquier cartel sin problema alguno — sabía que lo que estaba diciendo podía ser complicado, quizás dejar la marina de un día para otro sería un proceso muy burocrático que tomara bastante tiempo en llevarse a cabo o simplemente no estuvieran en los planes de la joven. La ayuda que le ofrecía si le parecía una muy buena idea, para un Cazador tener información siempre era algo bueno ya que las decisiones que pudiera tomar tendrían un menor riesgo al momento de ir a capturar a alguien — Me parece una buena idea que me ayudaras con un poco de información la cual nunca viene mal — el espadachín esperaría la respuesta de Deka aunque una idea un poco extraña paso por la mente del Cazador — ¿Si le pido a un superior tuyo que me ayudes en la captura de un pirata qué pasaría? — ahora también esperaba una respuesta ante aquella pregunta la cual le interesaba porque la joven marine se veía como alguien fuerte por lo que podían formar un buen grupo de trabajo.
Por las palabras de Deka al parecer no sería tan simple el hecho de que pudiera cazar a un pirata porque si, a menos que uno de sus superiores se lo pidiera, eso mismo era la gran diferencia entre los Cazadores y los miembros de la marina, los Cazadores podían hacer lo que quisieran cuando quisiera aparentemente sin problema alguno a menos que sus acciones se le escaparan de las manos mientras que los miembros de la marina principalmente los que se encuentran en los rangos más abajo tienen que seguir las ordenes de sus superiores o tendrían un castigo por sus actos de indisciplina, una cadena de mando muy estricta para alguien que lo ve desde afuera. — Ya veo con que la cadena de mando es bastante estricta dentro de la Marina — aquella situación de no poder hacer lo que quisiera parecía molestarla e incluso llegar a frustrarla — Si te molesta la situación ¿Por qué no te conviertes en una Cazadora? De esa forma podrías tomar cualquier cartel sin problema alguno — sabía que lo que estaba diciendo podía ser complicado, quizás dejar la marina de un día para otro sería un proceso muy burocrático que tomara bastante tiempo en llevarse a cabo o simplemente no estuvieran en los planes de la joven. La ayuda que le ofrecía si le parecía una muy buena idea, para un Cazador tener información siempre era algo bueno ya que las decisiones que pudiera tomar tendrían un menor riesgo al momento de ir a capturar a alguien — Me parece una buena idea que me ayudaras con un poco de información la cual nunca viene mal — el espadachín esperaría la respuesta de Deka aunque una idea un poco extraña paso por la mente del Cazador — ¿Si le pido a un superior tuyo que me ayudes en la captura de un pirata qué pasaría? — ahora también esperaba una respuesta ante aquella pregunta la cual le interesaba porque la joven marine se veía como alguien fuerte por lo que podían formar un buen grupo de trabajo.
Toshiro Hitsugaya
Hoja de personaje
Nivel:
(31/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 3 |
Creado por Mei Haiba Dom Dic 20, 2015 4:20 pm
Las intenciones de Okita eran buenas, su simple presencia le hacía ver cómo un joven amable y con buenas intenciones, pero sus palabras también denotaban cierta inocencia. Sus propuestas estaban impregnadas de aquella falta de conocimiento del reglamente "no-escrito" interno de la Marina que tanto diferenciaba a los miembros o ex-miembros de esta de las demás personas. ¿Abandonar la Marina? Sí, era posible, claro que lo era. Que fuera fácil era otra cosa y que te marcara de por vida, también. Si desertar era lanzarte de cabeza a un abismo sin fondo, abandonar por los medios burocráticos era más o menos lo mismo. A partir de ese momento, semejante hecho te marcaba de por vida para bien o, habitualmente, para mal. Y aunque la propia Deka era consciente de que era mejor abandonar siendo una Soldado que no un Teniente, hacerlo requería de agallas y muchas ganas de hacerlo. Le sobraba de lo primero, le faltaba todavía lo segundo.
Por sus palabras, parecía que el joven había captado mejor que la cadena de mando en la Marina era algo que uno no podía simplemente ignorar, un gaje del oficio con el que tenían que lidiar todos y al que, de igual manera, todos terminaban acostumbrándose aunque a algunos les costara más tiempo. - Me temo que tampoco me interesa eso, Okita. Ser cazador tiene esa ventaja, sí. Pero la Marina también tiene sus cosas buenas. Es una cuestión de balance. - la soldado se explicó, intentando dar a entender de forma sencilla y rápida el porqué no se había planteado abandonar su puesto para convertirse en una cazarecompensas. Le hubiera gustado poder hacerlo más detalladamente, pero el joven había aceptado el ofrecimiento que Deka le había hecho para proporcionarle un poco de información extra para su siguiente objetivo así que rápidamente echó una rápida ojeada de nuevo al tablón mientras respondía a la pregunta que le formulaba el joven. - Sin ser un cazador conocido, ni siquiera te recibirían. - dijo, siendo tan directa y franca cómo solía. Los oficiales no solían tener tiempo para recibir ni a los simples soldados rasos ni a los cazarecompensas que no poseyeran cierto renombre, eso era un hecho. - Y bueno, que tipo de objetivo barajabas. ¿Mayor recompensa, menor? - preguntó, sólo era una suposición pero creía que el joven optaría más por una presa menor. Se le veía un buen luchador, pero la soldado debía admitir que seguía palideciendo frente a otros Marines o cazadores que ella había visto. Fuera cual fuera la respuesta, en su mente ya barajaba varias sugerencias de las cuales conocía algún que otro detalle que podría serle de utilidad a su compañero.
Por sus palabras, parecía que el joven había captado mejor que la cadena de mando en la Marina era algo que uno no podía simplemente ignorar, un gaje del oficio con el que tenían que lidiar todos y al que, de igual manera, todos terminaban acostumbrándose aunque a algunos les costara más tiempo. - Me temo que tampoco me interesa eso, Okita. Ser cazador tiene esa ventaja, sí. Pero la Marina también tiene sus cosas buenas. Es una cuestión de balance. - la soldado se explicó, intentando dar a entender de forma sencilla y rápida el porqué no se había planteado abandonar su puesto para convertirse en una cazarecompensas. Le hubiera gustado poder hacerlo más detalladamente, pero el joven había aceptado el ofrecimiento que Deka le había hecho para proporcionarle un poco de información extra para su siguiente objetivo así que rápidamente echó una rápida ojeada de nuevo al tablón mientras respondía a la pregunta que le formulaba el joven. - Sin ser un cazador conocido, ni siquiera te recibirían. - dijo, siendo tan directa y franca cómo solía. Los oficiales no solían tener tiempo para recibir ni a los simples soldados rasos ni a los cazarecompensas que no poseyeran cierto renombre, eso era un hecho. - Y bueno, que tipo de objetivo barajabas. ¿Mayor recompensa, menor? - preguntó, sólo era una suposición pero creía que el joven optaría más por una presa menor. Se le veía un buen luchador, pero la soldado debía admitir que seguía palideciendo frente a otros Marines o cazadores que ella había visto. Fuera cual fuera la respuesta, en su mente ya barajaba varias sugerencias de las cuales conocía algún que otro detalle que podría serle de utilidad a su compañero.
Mei Haiba
Hoja de personaje
Nivel:
(41/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
Creado por Toshiro Hitsugaya Miér Dic 23, 2015 2:09 am
Al parecer la cadena de mando dentro de la marina era bastante complicada, sobre todo cuando hay cosas que los civiles desconocen de la organización como era el caso de Okita quien tenía como conocimiento solamente sobre lo que se escuchaba siempre en las islas o cosas sobre el reglamento escrito que posee la marina, pero hablando con Deka aquellas cosas que creía conocer resultaban que no eran como él se las planteaba hasta ese momento. Cosas que a alguien de afuera podría ver como simple como ir a capturar un pirata, hacer lo que deseen, entre otras cosas diarias sin la autorización de un superior se podían volver un verdadero calvario para quien lo vivía en carne propia, principalmente los rangos más bajos en aquella cadena de mando.
Escuchaba con atención las palabras de la joven soldado sobre que no le interesaba ser una Cazadora, que en la Marina tenía sus ventajas — Sí, puede que tenga sus ventajas pertenecer a la Marina. Es una gran organización con diferentes ventajas como contar con buques de guerra, gran cantidad de soldados, entre otras… — se le notaba un poco desanimado al notar aquellas diferencias incluso bajando un poco los hombros pero nunca perdiendo la sonrisa en su rostro. La propuesta de hablar con un superior seguía en pie sin embargo fue desechada rápidamente por las palabras de Deka que en resumen por aun no ser un Cazador con cierta fama no me recibirían — Tienes razón, aunque no perdía nada intentándolo — a pesar de no ser un miembro de la Marina al no tener el suficiente reconocimiento no podría ser recibido por un superior así que entendía un poco mejor como se podía sentir la marine de cabello rubio sobre algunas situaciones. Ante la pregunta recordó la ayuda de Deka, se había ido en pensamientos sobre las ventajas que tenían los marines sobre todo los de alto cargo al tener a los de rango más bajo a su disposición como también buque para ellos, poder hacer lo que quisieran dentro de la ley sin que nadie les pudiera decir nada, miro los carteles en el muro que se encontraba al lado de ellos con detención no quería tomar uno el cual no pudiera terminar por si solo o uno que le entregara poca recompensa por su trabajo así que estira su mano para sacar uno con una recompensa media entre todos los que se encontraban en el muro, lo movió un poco para verlo detenidamente — Haré este de aquí —, y cuando se encontraba seguro mostrarlo a Deka para que lo viera esperando que conociera algunos detalles para hacer más fácil el trabajo — Si tienes cualquier tipo de información me seria de ayuda, entre más pueda obtener mejor — esperaba alguna respuesta positiva de la joven que si lo ayudaba le agradecería de alguna manera que su estricto horario de la Marina se lo permitiera.
Escuchaba con atención las palabras de la joven soldado sobre que no le interesaba ser una Cazadora, que en la Marina tenía sus ventajas — Sí, puede que tenga sus ventajas pertenecer a la Marina. Es una gran organización con diferentes ventajas como contar con buques de guerra, gran cantidad de soldados, entre otras… — se le notaba un poco desanimado al notar aquellas diferencias incluso bajando un poco los hombros pero nunca perdiendo la sonrisa en su rostro. La propuesta de hablar con un superior seguía en pie sin embargo fue desechada rápidamente por las palabras de Deka que en resumen por aun no ser un Cazador con cierta fama no me recibirían — Tienes razón, aunque no perdía nada intentándolo — a pesar de no ser un miembro de la Marina al no tener el suficiente reconocimiento no podría ser recibido por un superior así que entendía un poco mejor como se podía sentir la marine de cabello rubio sobre algunas situaciones. Ante la pregunta recordó la ayuda de Deka, se había ido en pensamientos sobre las ventajas que tenían los marines sobre todo los de alto cargo al tener a los de rango más bajo a su disposición como también buque para ellos, poder hacer lo que quisieran dentro de la ley sin que nadie les pudiera decir nada, miro los carteles en el muro que se encontraba al lado de ellos con detención no quería tomar uno el cual no pudiera terminar por si solo o uno que le entregara poca recompensa por su trabajo así que estira su mano para sacar uno con una recompensa media entre todos los que se encontraban en el muro, lo movió un poco para verlo detenidamente — Haré este de aquí —, y cuando se encontraba seguro mostrarlo a Deka para que lo viera esperando que conociera algunos detalles para hacer más fácil el trabajo — Si tienes cualquier tipo de información me seria de ayuda, entre más pueda obtener mejor — esperaba alguna respuesta positiva de la joven que si lo ayudaba le agradecería de alguna manera que su estricto horario de la Marina se lo permitiera.
Toshiro Hitsugaya
Hoja de personaje
Nivel:
(31/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 3 |
Creado por Mei Haiba Jue Dic 24, 2015 10:25 am
Al final, sus explicaciones algo simples y generales fueron suficiente para que el joven entendiera bastante bien lo que era la cadena de mando y lo que implicaba para todos los miembros de la Marina. Cómo él mismo había comentado, tenía sus cosas buena y sus cosas malas, pero unas terminaban compensando a las otras y generaban un equilibrio que hacía que, al menos a la mayoría de Marines entre los que Deka se incluía, les saliera rentable recibir y obedecer órdenes para luego gozar de las ventajas que estar en las filas de una entidad como aquella proporcionaba. - Veo que lo has entendido a la perfección. Es algo que vale la pena recordar, te podría venir bien si tienes tratos con nosotros en un futuro. - fue lo último que tuvo que decir respecto a aquel tema, dejando en el aire un consejo bastante valioso para el joven cazarecompensas. Si su carrera profesional despegaba, terminaría teniendo que tratar más con la Marina de lo que podría imaginarse y saber del funcionamiento interno de esta era una baza que podía ser muy útil llegado el momento de la verdad.
Finalmente, Okita estiró el brazo y dirigió su mano hacia uno de los muchos carteles que colgaban de la parte baja del tablón, sacándolo de este tras haber meditado la elección durante unos momentos. El joven directamente no había sopesado capturar una presa mayor, situadas siempre en la parte mediana de la tabla de madera justo debajo de los piratas mundialmente famosos situados a millares de millas náuticas de distancia, criminales que sembraban el terror en la Grand Line y con los que simples peones cómo lo eran la marine y su acompañante todavía no podían ni soñar. - Así que vas a ir a por LeBarrett... - mencionó, cuando pudo ver finalmente el cartel que había tomado. Se trataba de un pirata bastante nuevo, que había aparecido pocos meses atrás y había causado pequeños escándalos en pueblecitos costeros del South Blue. Un hombre no demasiado peligroso pero por cuya cabeza se podía sacar una tajada más que interesante al haber puesto el Gobierno algo menos de dos millones de Berries de recompensa por él. - Es un buen objetivo, pero me temo que no tengo demasiada información fiable sobre él. - le confeso, mientras repasaba mentalmente los informes que había recibido recientemente sobre aquel criminal. - Sólo se le ha visto aquí, en el South Blue y se desconoce su paradero habitual pero los últimos informes parecen indicar que su escondrijo suele ser el Reino de Torino. La naturaleza le sirve de cobijo, pero si alguien busca con ímpetu no debería ser difícil encontrarle. - sabía que aquello no era un gran chivatazo sino más bien una pista muy vaga levemente contrastada por la Marina. Pero era todo lo que tenía, mucho se temía que el joven iba a tener que conformarse con aquello. - Entonces... ¿intentarás ir a por él? - preguntó, queriendo saber si Okita aceptaría el reto que podía suponer rastrear un pirata por los bosques de Torino y finalmente darle caza, una aventura que ella aceptaría sin duda, pero sabía que todavía quedaba fuera de sus posibilidades.
Finalmente, Okita estiró el brazo y dirigió su mano hacia uno de los muchos carteles que colgaban de la parte baja del tablón, sacándolo de este tras haber meditado la elección durante unos momentos. El joven directamente no había sopesado capturar una presa mayor, situadas siempre en la parte mediana de la tabla de madera justo debajo de los piratas mundialmente famosos situados a millares de millas náuticas de distancia, criminales que sembraban el terror en la Grand Line y con los que simples peones cómo lo eran la marine y su acompañante todavía no podían ni soñar. - Así que vas a ir a por LeBarrett... - mencionó, cuando pudo ver finalmente el cartel que había tomado. Se trataba de un pirata bastante nuevo, que había aparecido pocos meses atrás y había causado pequeños escándalos en pueblecitos costeros del South Blue. Un hombre no demasiado peligroso pero por cuya cabeza se podía sacar una tajada más que interesante al haber puesto el Gobierno algo menos de dos millones de Berries de recompensa por él. - Es un buen objetivo, pero me temo que no tengo demasiada información fiable sobre él. - le confeso, mientras repasaba mentalmente los informes que había recibido recientemente sobre aquel criminal. - Sólo se le ha visto aquí, en el South Blue y se desconoce su paradero habitual pero los últimos informes parecen indicar que su escondrijo suele ser el Reino de Torino. La naturaleza le sirve de cobijo, pero si alguien busca con ímpetu no debería ser difícil encontrarle. - sabía que aquello no era un gran chivatazo sino más bien una pista muy vaga levemente contrastada por la Marina. Pero era todo lo que tenía, mucho se temía que el joven iba a tener que conformarse con aquello. - Entonces... ¿intentarás ir a por él? - preguntó, queriendo saber si Okita aceptaría el reto que podía suponer rastrear un pirata por los bosques de Torino y finalmente darle caza, una aventura que ella aceptaría sin duda, pero sabía que todavía quedaba fuera de sus posibilidades.
Mei Haiba
Hoja de personaje
Nivel:
(41/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
Creado por Toshiro Hitsugaya Sáb Dic 26, 2015 8:24 pm
Ahora que tenía más frescos las ventajas de pertenecer a la Marina en su mente, se cuestionaba por qué no entrar a pesar de su alta edad, pero a pesar de todos los buques de guerra, armas, cuando sea un alto rango tener a subordinados, si lo pensaba bien no era algo que lo llenara al final de atrapar a alguien. Además de poder hacer lo que quisiera mientras no interrumpa con las leyes no era lo que lo hacía ser un Cazador, la verdadera razón era la de combatir en la mayoría de los casos solo contra el adversario, demostrar quién es mejor y si todo sale bien poder entregar a la marina teniendo una recompensa por el trabajo hecho y con la satisfacción de que derroto a alguien solo con su habilidad. Siendo un miembro de la Marina tendría que esperar mucho tiempo para llegar a eso, así que ser un Cazador ahora era lo que más le interesaba, es lo que en menor tiempo conseguiría lo que quiere, ser el mejor espadachín del mundo. — Lo tendré en mente para cuando hable con algún marine… Si sigo como un Cazador tendré muchos tratos con ustedes — para cuando eso pasara, esperaba que la joven también lo hiciera, de esta manera por lo menos tendría algún conocido con quien hablar cuando el momento lo requiera.
El cartel que había tomado no era uno de los más altos en el South Blue, tomar alguno de los carteles que se encontraban en la parte alta del tablón sería tratar de ir por alguno de los que se encontraba en Gran Line, algo que era impensable para el espadachín en ese momento, aun no tenía muy claro cómo llegar a ese lugar siendo que se trataba de un navegante. — Si, voy por el… — esperaba alguna respuesta de Deka quien se veía pensando en si conocía algo de quien aparecía en el cartel, por como lo llamo un tal LeBarrett. Cuando le contó que no tenía demasiada información fiable dio un suspiro, la información entre más fiable mejor era pero en ese punto todo servía, — Ya veo, con que se encuentra en el Reino de Torino… Nunca he estado ahí antes pero me sirve para comenzar la búsqueda — pensó un poco en como llegaría al Reino recién nombrado por la soldado, entre antes llegara al lugar menor era la posibilidad de que escapara del lugar. Deka lo ayudo de forma desinteresada, algo que lo incomodaba ya que por el momento no tenía algo que darle además de las gracias, así que hablo teniendo en mente que no perdería al hacerlo — ¿Quieres ir a tomar algo? Quizás suene un poco extraño, pero solo quiero darte las gracias por la ayuda que me has dado… — sabía que lo que estaba pidiendo era un poco difícil, quizás debía seguir con su trabajo en la oficina o en alguna otra parte, sin embargo Okita le quería agradecer lo que hizo.
El cartel que había tomado no era uno de los más altos en el South Blue, tomar alguno de los carteles que se encontraban en la parte alta del tablón sería tratar de ir por alguno de los que se encontraba en Gran Line, algo que era impensable para el espadachín en ese momento, aun no tenía muy claro cómo llegar a ese lugar siendo que se trataba de un navegante. — Si, voy por el… — esperaba alguna respuesta de Deka quien se veía pensando en si conocía algo de quien aparecía en el cartel, por como lo llamo un tal LeBarrett. Cuando le contó que no tenía demasiada información fiable dio un suspiro, la información entre más fiable mejor era pero en ese punto todo servía, — Ya veo, con que se encuentra en el Reino de Torino… Nunca he estado ahí antes pero me sirve para comenzar la búsqueda — pensó un poco en como llegaría al Reino recién nombrado por la soldado, entre antes llegara al lugar menor era la posibilidad de que escapara del lugar. Deka lo ayudo de forma desinteresada, algo que lo incomodaba ya que por el momento no tenía algo que darle además de las gracias, así que hablo teniendo en mente que no perdería al hacerlo — ¿Quieres ir a tomar algo? Quizás suene un poco extraño, pero solo quiero darte las gracias por la ayuda que me has dado… — sabía que lo que estaba pidiendo era un poco difícil, quizás debía seguir con su trabajo en la oficina o en alguna otra parte, sin embargo Okita le quería agradecer lo que hizo.
Toshiro Hitsugaya
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