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Creado por Rida Sarwick Miér Sep 28, 2016 11:25 am
Increíblemente, Liana superó mis expectativas en cuanto a su estómago. Era una verdadera bestia comiendo. Mientras lo hacía, no podía más que reír de manera escandalosa, a la vez que el cúmulo de pueblerinos que la observaban dejaban caer las quijadas hasta el suelo. Todo el banquete fue desapareciendo poco a poco. No sabía si todas las ningyo tendrían tal apetito. ¿Cómo era posible que se mantuviera en forma y con perfecta figura comiendo de esa manera? Era un gran misterio de la vida. Al parecer, Liana se sintió muy conforme con lo que había preparado, incluso sugiriéndome zarpar juntos al mar para poder seguir contando con mi cocina. Ante ello, reí burlonamente sin contestar nada en específico. Además, ella estaba tan ocupada comiendo que daba igual.
— ¡Así que no era mentira, Sirena-chan! Tu estómago es tan poderoso como tanto decías —dije, sorprendido y muy feliz de haber enfrentado el reto de semejante apetito. Sin duda, aquello probaba que había recorrido un largo trecho desde que comencé a entrenarme como cocinero viajando por los Blues.
Una vez finalizado el banquete, Liana habiéndose comido la gran mayoría, estaba lista para seguir insistiendo con retarme a un combate amistoso. No creía poder decirle que no a la sirena, visto ya su ímpetu y determinación. Por esta razón, me quité el delantal, lo dejé en mis cosas en la cocina del restaurante y me sacudí de manos, haciendo ver a la sirena que la enfrentaría como ella tanto quería. Tras haber puesto en práctica mis dotes culinarias, quizá no vendría mal poner a prueba mis habilidades en batalla: todo cuanto el Viejo Jago me había enseñado.
— Pelearé contigo, pero no me contendré; como que no es mucho mi estilo —le contesté, sonriendo de manera algo macabra en contraposición al comportamiento amistoso que había estado teniendo hasta entonces.
Media hora después...
Nos habíamos trasladado otra vez al lago en el cual había conocido a Liana, junto a la casa del viejo Saorishi. Caminé por el lugar, alrededor de aquel ojo de agua, y me asomé para mirar si sería muy profundo. No es que supiera algo de las sirenas, pero era de sentido común imaginar que no tendría mucha ventaja si me caía en ese estanque. Debía evitarlo a toda costa, así que mi estancia de batalla sería de pie, a convenientes cinco metros del lago y tres de Liana. Llevaba mi sansetsukon sujeto de manera plegada en la mano derecha; de un tirón, extendí las tres barras, dando tres rápidos giros sobre mi propio eje a medida que me desplazaba dos pasos a la derecha y quedaba en posición defensiva, mirando a la ningyo divertido.
— Entonces, ¿me muestras de qué está hecha la futura Reina de los Piratas? —reté, sonriendo de manera más pronunciada.
— ¡Así que no era mentira, Sirena-chan! Tu estómago es tan poderoso como tanto decías —dije, sorprendido y muy feliz de haber enfrentado el reto de semejante apetito. Sin duda, aquello probaba que había recorrido un largo trecho desde que comencé a entrenarme como cocinero viajando por los Blues.
Una vez finalizado el banquete, Liana habiéndose comido la gran mayoría, estaba lista para seguir insistiendo con retarme a un combate amistoso. No creía poder decirle que no a la sirena, visto ya su ímpetu y determinación. Por esta razón, me quité el delantal, lo dejé en mis cosas en la cocina del restaurante y me sacudí de manos, haciendo ver a la sirena que la enfrentaría como ella tanto quería. Tras haber puesto en práctica mis dotes culinarias, quizá no vendría mal poner a prueba mis habilidades en batalla: todo cuanto el Viejo Jago me había enseñado.
— Pelearé contigo, pero no me contendré; como que no es mucho mi estilo —le contesté, sonriendo de manera algo macabra en contraposición al comportamiento amistoso que había estado teniendo hasta entonces.
Media hora después...
Nos habíamos trasladado otra vez al lago en el cual había conocido a Liana, junto a la casa del viejo Saorishi. Caminé por el lugar, alrededor de aquel ojo de agua, y me asomé para mirar si sería muy profundo. No es que supiera algo de las sirenas, pero era de sentido común imaginar que no tendría mucha ventaja si me caía en ese estanque. Debía evitarlo a toda costa, así que mi estancia de batalla sería de pie, a convenientes cinco metros del lago y tres de Liana. Llevaba mi sansetsukon sujeto de manera plegada en la mano derecha; de un tirón, extendí las tres barras, dando tres rápidos giros sobre mi propio eje a medida que me desplazaba dos pasos a la derecha y quedaba en posición defensiva, mirando a la ningyo divertido.
— Entonces, ¿me muestras de qué está hecha la futura Reina de los Piratas? —reté, sonriendo de manera más pronunciada.
Rida Sarwick
Hoja de personaje
Nivel:
(12/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel |
Creado por Liana Miér Sep 28, 2016 12:03 pm
Después de comer tan sabroso banquete hecho por musculitos venia la gran esperada batalla, de hecho antes de ir a la zona de combate le respondo - ¡deeereshishishishi! No esperaba menos de ti musculitos, yo tampoco me contendré, de hecho... ¿podras aguantar los cortes como un hombrecito?-.
Pasada media hora…
Noto como musculitos estudia el campo, por lo que veo es muy precavido, no se si alguna vez a peleado contra una ningyo o gyojin, pero creo que es de lógica que si cae al lago tendrá muchísima desventaja. Al ponerse en posición de batalla yo enciendo mi burbuja, desenvaino dos de mis tres espadas y exclamo seriamente – jejeje… ya verás, solo te digo una cosa musculitos… de seriedad paso a una cara completamente feliz con mis manos en mis cachetes… ¡ESTOY FELIZ DE PELEAR CONTRA ALGUIEN! ¡SERA EMOCIONANTE!... vuelvo a mi cara seria… Así que bueno no te defraudare musculitos- voy hacia el con toda mi velocidad, sentí que podía atinarle este ataque ya que estaba cerca y mi poseo una gran velocidad gritando -¡SUSHI!- (un ataque que normalmente lo hago con tres espadas pero aún no quería usar la tercera) le lanzaría mis cortes de forma de X.
Pasada media hora…
Noto como musculitos estudia el campo, por lo que veo es muy precavido, no se si alguna vez a peleado contra una ningyo o gyojin, pero creo que es de lógica que si cae al lago tendrá muchísima desventaja. Al ponerse en posición de batalla yo enciendo mi burbuja, desenvaino dos de mis tres espadas y exclamo seriamente – jejeje… ya verás, solo te digo una cosa musculitos… de seriedad paso a una cara completamente feliz con mis manos en mis cachetes… ¡ESTOY FELIZ DE PELEAR CONTRA ALGUIEN! ¡SERA EMOCIONANTE!... vuelvo a mi cara seria… Así que bueno no te defraudare musculitos- voy hacia el con toda mi velocidad, sentí que podía atinarle este ataque ya que estaba cerca y mi poseo una gran velocidad gritando -¡SUSHI!- (un ataque que normalmente lo hago con tres espadas pero aún no quería usar la tercera) le lanzaría mis cortes de forma de X.
- Reposo de tecnicas usadas:
- Tecnica: SUSHI... Served || Reposo: 2 Turnos (0/2)
Última edición por Liana el Miér Sep 28, 2016 2:05 pm, editado 1 vez
Liana
Hoja de personaje
Nivel:
(25/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
Creado por Rida Sarwick Miér Sep 28, 2016 1:59 pm
La sirena y su determinación estaban por ser puestas a prueba. Ya la había visto practicar con blancos tan pequeños como lo eran colibríes. ¿Qué tan precisos serían sus cortes? Cuando menos, sabía bien la debilidad que tenían las guerreras como ella, y esa era la dependencia de sus espadas. Desarmada, la ningyo no supondría una amenaza para mí, mientras que mi sansetsukon era simplemente una extensión de mi poder. Sin éste, era igual de peligroso, caso contrario a Liana.
Me encontraba aferrando el arma con una mano por cada extremo, extendiendo la derecha al frente y dejando la zurda pegada al torso. Estaba listo. Liana, feliz de combatir conmigo, realizó su primer movimiento. Los escasos tres metros que nos separaban se acortaron conforme su escamado cuerpo se deslizaba con rapidez. Me sorprendí por la velocidad que incluso podía llegar a tener en tierra. Su carencia de piernas no era una limitante. Sonreí, afincando la pierna izquierda hacia atrás para que fuera mi principal soporte de resistencia, y sujeté el sansetsukon por ambos extremos de manera horizontal. Liana envió dos cortes en forma de X, uno con cada sable. En el punto de intersección de los cortes, el filo de sus espadas chocaron con el metal de la barra central del sansetsukon. Enseguida sentí la fuerza de la sirena hacer presión contra la mía propia.
— ¡Ja! Eres fuerte —susurré, justo antes de empujar con fuerza hacia el frente, para apartar a Liana de mí; ya tenía sujeto el sansetsukon en la postura correcta (una mano en cada barra) para la realización de la siguiente técnica— Ryūsandan... —la pierna que había fungido de soporte para resistir el ataque de Liana ahora se lanzó al frente, pisando con furia para adelantarme y llegar frente a ella— ¡Daburu Sutetchi! —arrojé violentamente una lluvia de golpes distribuidos por el pecho de la sirena, en forma de estocada con las barras.
Me encontraba aferrando el arma con una mano por cada extremo, extendiendo la derecha al frente y dejando la zurda pegada al torso. Estaba listo. Liana, feliz de combatir conmigo, realizó su primer movimiento. Los escasos tres metros que nos separaban se acortaron conforme su escamado cuerpo se deslizaba con rapidez. Me sorprendí por la velocidad que incluso podía llegar a tener en tierra. Su carencia de piernas no era una limitante. Sonreí, afincando la pierna izquierda hacia atrás para que fuera mi principal soporte de resistencia, y sujeté el sansetsukon por ambos extremos de manera horizontal. Liana envió dos cortes en forma de X, uno con cada sable. En el punto de intersección de los cortes, el filo de sus espadas chocaron con el metal de la barra central del sansetsukon. Enseguida sentí la fuerza de la sirena hacer presión contra la mía propia.
— ¡Ja! Eres fuerte —susurré, justo antes de empujar con fuerza hacia el frente, para apartar a Liana de mí; ya tenía sujeto el sansetsukon en la postura correcta (una mano en cada barra) para la realización de la siguiente técnica— Ryūsandan... —la pierna que había fungido de soporte para resistir el ataque de Liana ahora se lanzó al frente, pisando con furia para adelantarme y llegar frente a ella— ¡Daburu Sutetchi! —arrojé violentamente una lluvia de golpes distribuidos por el pecho de la sirena, en forma de estocada con las barras.
- Acciones realizadas:
- - Agarro el arma por las barras de los extremos horizontalmente y la uso como escudo para frenar con la barra central los dos cortes simultáneos.
- Empujo de inmediato hacia atrás para hacerte retroceder.
- Ataco con:
Ryūsandan Daburu Sutetchi (Metralla de Doble Puntada) [Lv1]
Ráfaga de golpes con dos barras. Se aferra el sansetsukon con ambas manos, sujetando ambas barras de los extremos y atacando con las dos. Tras eso efectúa 10 golpes directos contundentes repartidos por el cuerpo del rival. Este ataque produce un menor daño pero tiene una velocidad mayor.
- Reposo: 3 turnos.
- Evolución: +5 golpes cada 10 niveles; a partir de nivel 10, esta técnica puede arrojar ondas de choque con un rango de 1 metro y un alcance de 5, que aumentan en 1 de rango y 2 de alcance cada 10 niveles.
- En reposo:
- - Ryūsandan Daburu Sutetchi: 0/3
- Aclaratoria:
- Aunque mi nivel dice 10, este es un pasado lejano y por lo tanto mi personaje aún es nivel 1 en esta instancia de su aventura.
Rida Sarwick
Hoja de personaje
Nivel:
(12/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel |
Creado por Liana Miér Sep 28, 2016 2:45 pm
-Lo mismo digo - le exclame con una sonrisa seria a musculitos mientras comenzaba volar en el aire, durante la volada me inclino un poco hacia atrás para caer parada mientras observo como se acerca a mí, note que se movió un poco mas lento que yo,entonces pense, o me está tomando el pelo o yo soy más rápida. Cuando caigo parada grito –SASHIMI- donde comienzo a lanzarle espadazos muy precisos a su arma mientras grito –GRAN ESPECTACULO- con la intensión de despejarla, me esforcé al máximo en darle esos golpes, pensé en voz alta mientras chocaban golpes con una cara muy seria - debo admitir que musculitos tiene un arma muy genial-.
Al terminar esa gran ronda de ataques simultáneos mantengo una sonrisa de felicidad mientras digo –Me ¿estás dando ventaja musculitos? ¡SASHIMI!- lanzo mi mejor corte con gran precisión utilizando todo el poder posible con mi mejor espada para generar un corte más peligroso de lo habitual de manera diagonal de arriba a abajo justo en las costillas, solo que como no estoy peleando en serio justo antes de comenzar a emplearlo voltee la espada 180 grados para pegar con la parte de atrás sin filo alguno, al máximo si se lo pegaba y se cortaba era un poco.
-PERFECT CUT- exclamaría al terminar el ataque. ese golpe fue con la intensión de lanzarlo al lago, seria una muy buena oportunidad si cae ahi.
Al terminar esa gran ronda de ataques simultáneos mantengo una sonrisa de felicidad mientras digo –Me ¿estás dando ventaja musculitos? ¡SASHIMI!- lanzo mi mejor corte con gran precisión utilizando todo el poder posible con mi mejor espada para generar un corte más peligroso de lo habitual de manera diagonal de arriba a abajo justo en las costillas, solo que como no estoy peleando en serio justo antes de comenzar a emplearlo voltee la espada 180 grados para pegar con la parte de atrás sin filo alguno, al máximo si se lo pegaba y se cortaba era un poco.
-PERFECT CUT- exclamaría al terminar el ataque. ese golpe fue con la intensión de lanzarlo al lago, seria una muy buena oportunidad si cae ahi.
- Reposo de tecnicas usadas:
Tecnica: SUSHI... Served || Reposo: 2 Turnos (1/2)
Tecnica: Sashimi GRAN ESPECTACULO || Reposo: 5 Turnos (0/3)
Tecnica: Sashimi PERFECT CUt || Reposo: 3 Turnos (0/3)
Última edición por Liana el Miér Sep 28, 2016 4:11 pm, editado 1 vez
Liana
Hoja de personaje
Nivel:
(25/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
Creado por Rida Sarwick Miér Sep 28, 2016 3:25 pm
Liana no se quedó de brazos cruzados mientras me abalanzaba contra ella para efectuar mi sucesión de golpes. Una vez más, demostraría que era una guerrera competente, empuñando sus armas y manteniéndose de pie sobre su burbuja. ¿Iría a intercambiar ataques? No tenía pinta de retroceder. Me gustaba eso, me alegraba que encarara a los oponentes sin rodeos. Mi sonrisa se hizo aún más grande cuando comenzó su espectáculo de cortes con las espadas. Para mi sorpresa, no intentó cortarme. Realizó tajos certeros que desviaban el trayecto de las barras del sansetsukon, anulando mi ataque con el suyo propio.
Jadeando un poco luego del intercambio, me detuve, aún sonriendo. Por los momentos, el combate hacía la adrenalina recorrer mi cuerpo como fuego expandiéndose por mis venas. ¡Eso era vida!
— No lo sé, ¿tú que piensas? —respondí a su interrogante sobre si le estaba dando ventaja o no, siempre buscando meterme con ella. Atacó de nuevo, usando una técnica en la que arrojaba un corte veloz y potente. Sujeté con velocidad el sansetsukon alrededor de mi cuerpo, por detrás de la nuca, asumiendo una rápida postura para evitar cualquier maniobra de ataque que se le ocurriera— Furēku Gādian —la espada de Liana se estrelló en la barra central nuevamente, que cubría mi torso de manera diagonal, protegiendo mis costillas; esta vez, su ataque demostró más energía y potencia, por lo que usé todas mis fuerzas para aguantar el golpe de pie, volviendo a alargar una pierna hacia atrás, consiguiendo mayor soporte.
Inmediatamente, al rebotar el filo de su espada con mi arma, deshice la postura del guardián, jalando el sansetsukon con la mano derecha. Conecté el tirón con una abanicada horizontal, haciendo que el sansetsukon se aproximara con su barra central peligrosamente hacia la cabeza de Liana desde su flanco izquierdo, buscando impactar un potente golpe. La inercia del mismo causaría que la barra del otro extremo se enroscase hacia adentro, golpeando a la sirena por segunda vez si no hacía nada.
Jadeando un poco luego del intercambio, me detuve, aún sonriendo. Por los momentos, el combate hacía la adrenalina recorrer mi cuerpo como fuego expandiéndose por mis venas. ¡Eso era vida!
— No lo sé, ¿tú que piensas? —respondí a su interrogante sobre si le estaba dando ventaja o no, siempre buscando meterme con ella. Atacó de nuevo, usando una técnica en la que arrojaba un corte veloz y potente. Sujeté con velocidad el sansetsukon alrededor de mi cuerpo, por detrás de la nuca, asumiendo una rápida postura para evitar cualquier maniobra de ataque que se le ocurriera— Furēku Gādian —la espada de Liana se estrelló en la barra central nuevamente, que cubría mi torso de manera diagonal, protegiendo mis costillas; esta vez, su ataque demostró más energía y potencia, por lo que usé todas mis fuerzas para aguantar el golpe de pie, volviendo a alargar una pierna hacia atrás, consiguiendo mayor soporte.
Inmediatamente, al rebotar el filo de su espada con mi arma, deshice la postura del guardián, jalando el sansetsukon con la mano derecha. Conecté el tirón con una abanicada horizontal, haciendo que el sansetsukon se aproximara con su barra central peligrosamente hacia la cabeza de Liana desde su flanco izquierdo, buscando impactar un potente golpe. La inercia del mismo causaría que la barra del otro extremo se enroscase hacia adentro, golpeando a la sirena por segunda vez si no hacía nada.
- Acciones realizadas:
- - Me protejo del Sashimi Perfect Cut con:
Furēku Gādian (Escama del Guardián) [Lv1]
Posición defensiva. Asume una postura con el sansetsukon tras la nuca que le permite cubrir con las tres barras al mismo tiempo distintas partes del cuerpo. En cuanto a proyectiles, solo podría detener flechas, necesitando Kenbun Shoku Haki de grado 2 o superior para balas (imagen de la postura: Link)
- Reposo: 2 turnos.
- Evolución: --
(el corte se estrella en la barra central)
- Ataco lanzando un golpe horizontal por el lado izquierdo de la cabeza de Liana, deshaciendo la postura anterior con una sencilla brazada de la mano derecha. De impactar, la inercia del golpe hará que la otra barra también golpee a Liana por el otro costado de su cabeza.
- En reposo:
- - Ryūsandan Daburu Sutetchi: 1/3
- Furēku Gādian: 0/2
Rida Sarwick
Hoja de personaje
Nivel:
(12/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel |
Creado por Liana Miér Sep 28, 2016 3:57 pm
Esta batalla entre más avanzaba más me sentía viva, no podía ver el resultado de tan parejos reflejos y choques, era una batalla muy digna de presenciar, esto de seguro lo contaremos bebiendo sake en algún futuro y quedara escrito en nuestra historia.
Le respondo – pienso que esto es la mejor decisión ¡YEEEEEHAAAA!- musculitos bloquea mi ataque con una gran postura la cual me sorprendió y me saco una sonrisota de oreja a oreja.
Al ver cómo Rida me lanzaba ese ataque pongo mis espadas en forma de equis y con el golpe en vez de defenderme lo uso como trampolín para lanzarme al lago, se puede ver como las chispas al chocar ambas armas salían por doquier y antes de usarlo como catapulta le guiño el ojo con una sonrisota y le digo – por favor hacia el lago chofer- uso ese impulso del ataque y lo ayudo con un colazo. Cuando iba por los aires hacia el lago hago un movimiento para agarrar mi tercera espada con la boca de forma muy precisa mientras caigo al agua gritando –¡NEO SWIM!-.
Dentro del agua, me alejo lo más posible de la posición de Rida y me pongo con mis espadas en posición de ataque, grito –¡ROLLING!- con todas mis fuerzas y me devuelvo nadando de forma giratoria con mis tres espadas y al salir del agua como un trompo cortante le lanzo 3 cortes simultáneos con todo mi poder de manera random entre el torso y la cara (obviamente antes de salir voltee mis espadas para no cortarlo).
Pense... ohhh rida este ataque se que te dara
Le respondo – pienso que esto es la mejor decisión ¡YEEEEEHAAAA!- musculitos bloquea mi ataque con una gran postura la cual me sorprendió y me saco una sonrisota de oreja a oreja.
Al ver cómo Rida me lanzaba ese ataque pongo mis espadas en forma de equis y con el golpe en vez de defenderme lo uso como trampolín para lanzarme al lago, se puede ver como las chispas al chocar ambas armas salían por doquier y antes de usarlo como catapulta le guiño el ojo con una sonrisota y le digo – por favor hacia el lago chofer- uso ese impulso del ataque y lo ayudo con un colazo. Cuando iba por los aires hacia el lago hago un movimiento para agarrar mi tercera espada con la boca de forma muy precisa mientras caigo al agua gritando –¡NEO SWIM!-.
Dentro del agua, me alejo lo más posible de la posición de Rida y me pongo con mis espadas en posición de ataque, grito –¡ROLLING!- con todas mis fuerzas y me devuelvo nadando de forma giratoria con mis tres espadas y al salir del agua como un trompo cortante le lanzo 3 cortes simultáneos con todo mi poder de manera random entre el torso y la cara (obviamente antes de salir voltee mis espadas para no cortarlo).
Pense... ohhh rida este ataque se que te dara
- Reposo de tecnicas usadas:
Tecnica: SUSHI... Served || Reposo: 2 Turnos (2/2)
Tecnica: Sashimi GRAN ESPECTACULO || Reposo: 5 Turnos (1/3)
Tecnica: Sashimi PERFECT CUt || Reposo: 3 Turnos (1/3)
Tecnica: NEO SWIN ROLLING || Reposo: 4 Turnos (0/3)
Liana
Hoja de personaje
Nivel:
(25/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
Creado por Rida Sarwick Miér Sep 28, 2016 4:57 pm
— Cuidado con el otro —al arrojar mi golpe horizontal, sonreí triunfante al ver cómo Liana elevó sus espadas, formando una X defensiva para amortiguar el primer trallazo del sansetsukon, con la barra central. Sin embargo, la inercia causó que la barra del otro extremo, automáticamente, se devolviera para impactar en el costado opuesto de la cabeza de la sirena.
Sin embargo, no concebía que aquel golpe causara mayores problemas para mi adversaria, quien dio un gran impulso con la cola hacia atrás para arrojarse al lago. De inmediato sostuve el sansetsukon otra vez por los extremos, con cada mano, en guardia. No tenía idea de qué podría hacer Liana escapando de mí en el agua, pero perseguirla no era una opción.
— ¿Qué estás tramando, Sirena-chan? —susurré, sonriendo con curiosidad.
La respuesta vendría muy pronto. La ningyo rompió la superficie del lago, saliendo disparada como un cohete en mi dirección a la vez que giraba como un torbellino, dejando una estela de agua tras de sí. Incrédulo, abriendo los ojos de par en par, intenté cubrirme con mi propia arma, pero la velocidad que alcanzó la sirena al salir disparada del agua fue tal, que prácticamente tenía un tiempo de reacción nulo. La distancia entre el lago y yo, aún así, era de cinco metros, por lo que al menos interpuse el sansetsukon entre ella y yo. Hubiera estado más cerca, y ni hubiera visto a la ningyo mientras me cortaba.
Me había tomado desprevenido y pagaba el precio por ello. Una de sus espadas golpeó la barra central de mi arma, pero no hice fuerza suficiente y el corte simplemente se desvió hasta rozar mis costillas. Sentí el desgarre de la ropa y de la piel. Cerré un ojo ante la punzada de dolor. Con todo, hace un segundo había tenido la hoja de su espada en las narices; pudo haber cortado mi cara. No solo me había cortado en las costillas, había recibido un corte en el abdomen y otro en el pecho.
La velocidad de la ningyo la ubicaría tras de mí; se me doblaron las rodillas y estuve a punto de caer postrado por el impacto de su ataque, pero resistí. El ojo que había cerrado por el dolor se abrió repentinamente. Quizá debía ponerme serio.
— Furīdamu —salté con todas las fuerzas que tenía, flexionando las rodillas; el salto era hacia atrás, dirigiéndome hacia Liana. En pleno salto, giré el cuerpo, rotando como un trompo, emulando el mismo movimiento rotatorio que la sirena al salir del lago. El sansetsukon giró conmigo, alrededor de mi cuerpo, ganando velocidad de impulso. Entonces me precipité sobre la ningyo, desenrollando el arma para golpearla con toda la potencia posible en la cabeza— ¡Doragon! —
Sin embargo, no concebía que aquel golpe causara mayores problemas para mi adversaria, quien dio un gran impulso con la cola hacia atrás para arrojarse al lago. De inmediato sostuve el sansetsukon otra vez por los extremos, con cada mano, en guardia. No tenía idea de qué podría hacer Liana escapando de mí en el agua, pero perseguirla no era una opción.
— ¿Qué estás tramando, Sirena-chan? —susurré, sonriendo con curiosidad.
La respuesta vendría muy pronto. La ningyo rompió la superficie del lago, saliendo disparada como un cohete en mi dirección a la vez que giraba como un torbellino, dejando una estela de agua tras de sí. Incrédulo, abriendo los ojos de par en par, intenté cubrirme con mi propia arma, pero la velocidad que alcanzó la sirena al salir disparada del agua fue tal, que prácticamente tenía un tiempo de reacción nulo. La distancia entre el lago y yo, aún así, era de cinco metros, por lo que al menos interpuse el sansetsukon entre ella y yo. Hubiera estado más cerca, y ni hubiera visto a la ningyo mientras me cortaba.
Me había tomado desprevenido y pagaba el precio por ello. Una de sus espadas golpeó la barra central de mi arma, pero no hice fuerza suficiente y el corte simplemente se desvió hasta rozar mis costillas. Sentí el desgarre de la ropa y de la piel. Cerré un ojo ante la punzada de dolor. Con todo, hace un segundo había tenido la hoja de su espada en las narices; pudo haber cortado mi cara. No solo me había cortado en las costillas, había recibido un corte en el abdomen y otro en el pecho.
La velocidad de la ningyo la ubicaría tras de mí; se me doblaron las rodillas y estuve a punto de caer postrado por el impacto de su ataque, pero resistí. El ojo que había cerrado por el dolor se abrió repentinamente. Quizá debía ponerme serio.
— Furīdamu —salté con todas las fuerzas que tenía, flexionando las rodillas; el salto era hacia atrás, dirigiéndome hacia Liana. En pleno salto, giré el cuerpo, rotando como un trompo, emulando el mismo movimiento rotatorio que la sirena al salir del lago. El sansetsukon giró conmigo, alrededor de mi cuerpo, ganando velocidad de impulso. Entonces me precipité sobre la ningyo, desenrollando el arma para golpearla con toda la potencia posible en la cabeza— ¡Doragon! —
- Acciones realizadas:
- - Recibo la técnica Neo Swim Rolling, amortiguando uno de los cortes para desviarlo y que no cortase mi cara. Poseo tres cortes, dos de daño completo y uno de daño reducido, repartidos en el torso.
- Ataco con:
Furīdamu Doragon (Liberación del Dragón) [Lv1]
Golpe giratorio en picada. El usuario salta con gran fuerza, pudiendo cubrir una longitud de 5 metros hacia adelante y 3 de altura. A la vez aplica un movimiento rotatorio de trompo mientras desciende sobre el rival, desenrollando el sansetsukon para azotarlo con un golpe de gran impacto, normalmente en la cabeza.
- Reposo: 2 turnos.
- Evolución: --
(el salto cubrió 2 metros de altura y 1.5 de largo, la distancia a la que interpreto quedó Liana posicionada tras atacar a Rida)
- En reposo:
- - Ryūsandan Daburu Sutetchi: 2/3
- Furēku Gādian: 1/2
- Furīdamu Doragon: 0/2
Rida Sarwick
Hoja de personaje
Nivel:
(12/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel |
Creado por Liana Miér Sep 28, 2016 6:57 pm
En el momento que estaba haciendo el ataque lo hacía con todo pero por dentro me dio cosita ya que no quería lastimar a mi querido amigo musculitos, pero si no le pegaba luego se burlaría de mí como siempre JUM.
Pude notar que al momento de atacarlo estaba muy impresionado, no se lo espero nunca, me imagino que jamás había peleado con alguien del mar, su cara era un poema para mí ya que reflejaba que lo estaba haciendo bien.
Al terminar el ataque quede en el piso con estilo pero con cautela ya que él tiene toda la pinta de que no es de los que se quedan paralizados luego de recibir tal ataque, efectivamente, venía a por mí de forma aérea menos mal ese ataque que use no me deja mareada porque si no además de mareada recibiría un gran ataque, esquivo el ataque de Rida lanzándome a su derecha quedando cerca del lago.
Me levanto en posición de batalla, mientras lo veo y le digo al mismo tiempo que me quito la espada de la boca de la forma más seria y satisfecha posible –Rida estoy orgullosa de que seas mi primer oponente en mucho tiempo, déjame decirte que peleas muy bien pero mi pelea llega hasta aquí- acto seguido me quede dormida mientras susurraba –Cocíname algo-.
Pude notar que al momento de atacarlo estaba muy impresionado, no se lo espero nunca, me imagino que jamás había peleado con alguien del mar, su cara era un poema para mí ya que reflejaba que lo estaba haciendo bien.
Al terminar el ataque quede en el piso con estilo pero con cautela ya que él tiene toda la pinta de que no es de los que se quedan paralizados luego de recibir tal ataque, efectivamente, venía a por mí de forma aérea menos mal ese ataque que use no me deja mareada porque si no además de mareada recibiría un gran ataque, esquivo el ataque de Rida lanzándome a su derecha quedando cerca del lago.
Me levanto en posición de batalla, mientras lo veo y le digo al mismo tiempo que me quito la espada de la boca de la forma más seria y satisfecha posible –Rida estoy orgullosa de que seas mi primer oponente en mucho tiempo, déjame decirte que peleas muy bien pero mi pelea llega hasta aquí- acto seguido me quede dormida mientras susurraba –Cocíname algo-.
Liana
Hoja de personaje
Nivel:
(25/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
Creado por Rida Sarwick Miér Sep 28, 2016 8:20 pm
Puse muchas de mis fuerzas en aquel golpe, y probablemente habría causado un daño considerable en la sirena de haber impactado. Había dicho que no me contendría, y así fue. Sin embargo, al ver la velocidad de la ningyo, muy dentro de mí sabía que no podría golpearla. Esquivó con facilidad, y el sansetsukon golpeó el suelo con potencia. Aterricé agachado, enderezándome lentamente mientras reposaba mi arma sobre el hombro, sujetándola por detrás de la nuca del otro extremo. Era una postura relajada, tratando de despejarme un poco y tomar un respiro. Jadeaba tras el esfuerzo que me había supuesto resistir el último ataque e intentar atinar aquel.
Liana, de pronto, quitó la espada de su boca. Las siguientes palabras que me dirigió me tomaron por sorpresa. En primer lugar, por lo que decía. ¿Hasta aquí había llegado su pelea? En segundo, por la seriedad que empleó. Aquella era una Liana totalmente distinta a la sirena entusiasta y gritona de siempre. El hecho de que usara mi nombre en vez de llamarme "Musculitos" también me hizo entender que era una de las pocas veces en las que se tomaba las cosas en serio.
Y entonces... se quedó dormida. Pidiendo que le cocinara.
— ¡¿Cómo puedes dormirte así?! —espeté con total incredulidad. Sin embargo, tuve que aceptar el misterio que era Liana y reír, observando los cortes en mi cuerpo. Fue entonces cuando me di cuenta de que había sido cortado muy levemente, probablemente con el reverso de sus espadas. Aquellas heridas no eran nada, sanarían por sí solas. Plegué mi arma, me estiré y, con mi sonrisa de duende, caminé hacia la ningyo para recoger sus espadas y cargarla en brazos una vez más— La Reina de los Piratas, ¿eh? —dije en voz baja, alejándome del lago para volver a Villa Foosha— Podría ser, Sirena-chan. Podría ser —me aventuré a decir, tras haber tenido la experiencia de enfrentarme a ella y comprobar de qué estaba hecha realmente.
La caminata hasta el pueblo fue algo larga, pero todavía era de día cuando llegamos, y estaba seguro de que el estómago de la ningyo resistiría un pequeño reto adicional. Los pueblerinos volvieron a alegrarse de vernos. Bueno, de ver a Liana, ella era el principal foco de atención, pero una amable enfermera de avanzada edad se ofreció a vendar los cortes en mi cuerpo, aunque no hacía tanta falta, y a ponerle una curita en el golpe que tenía la ningyo en la cabeza.
El postre estaba listo desde antes, pero era una sorpresa para la sirena para cuando volviéramos de combatir. Cuando despertase, en la mesa del restaurante, tendría un gran pastel frente a ella.
— Si alguien toca un sólo centímetro de este pastel —miré de manera muy peligrosa a todos y cada uno de los aldeanos, hundiendo las manos en los bolsillos y prácticamente encendiendo mis pupilas en llamas— lo cocinaré vivo —algunas personas se miraron con cierto temor, después de todo era un pirata, pero la mayoría se lo tomó a broma. No es que estuviera bromeando, pero no tocaron el pastel de Liana.
Mientras atardecía, saldría a fumar un cigarrillo a las afueras del restaurante, apoyado contra la pared del mismo. Pensaba que mi tiempo en aquella villa se había agotado. Había tenido experiencias bastante agradables, pero siempre había otra isla y otra aventura esperándome en el horizonte.
Liana, de pronto, quitó la espada de su boca. Las siguientes palabras que me dirigió me tomaron por sorpresa. En primer lugar, por lo que decía. ¿Hasta aquí había llegado su pelea? En segundo, por la seriedad que empleó. Aquella era una Liana totalmente distinta a la sirena entusiasta y gritona de siempre. El hecho de que usara mi nombre en vez de llamarme "Musculitos" también me hizo entender que era una de las pocas veces en las que se tomaba las cosas en serio.
Y entonces... se quedó dormida. Pidiendo que le cocinara.
— ¡¿Cómo puedes dormirte así?! —espeté con total incredulidad. Sin embargo, tuve que aceptar el misterio que era Liana y reír, observando los cortes en mi cuerpo. Fue entonces cuando me di cuenta de que había sido cortado muy levemente, probablemente con el reverso de sus espadas. Aquellas heridas no eran nada, sanarían por sí solas. Plegué mi arma, me estiré y, con mi sonrisa de duende, caminé hacia la ningyo para recoger sus espadas y cargarla en brazos una vez más— La Reina de los Piratas, ¿eh? —dije en voz baja, alejándome del lago para volver a Villa Foosha— Podría ser, Sirena-chan. Podría ser —me aventuré a decir, tras haber tenido la experiencia de enfrentarme a ella y comprobar de qué estaba hecha realmente.
La caminata hasta el pueblo fue algo larga, pero todavía era de día cuando llegamos, y estaba seguro de que el estómago de la ningyo resistiría un pequeño reto adicional. Los pueblerinos volvieron a alegrarse de vernos. Bueno, de ver a Liana, ella era el principal foco de atención, pero una amable enfermera de avanzada edad se ofreció a vendar los cortes en mi cuerpo, aunque no hacía tanta falta, y a ponerle una curita en el golpe que tenía la ningyo en la cabeza.
El postre estaba listo desde antes, pero era una sorpresa para la sirena para cuando volviéramos de combatir. Cuando despertase, en la mesa del restaurante, tendría un gran pastel frente a ella.
— Si alguien toca un sólo centímetro de este pastel —miré de manera muy peligrosa a todos y cada uno de los aldeanos, hundiendo las manos en los bolsillos y prácticamente encendiendo mis pupilas en llamas— lo cocinaré vivo —algunas personas se miraron con cierto temor, después de todo era un pirata, pero la mayoría se lo tomó a broma. No es que estuviera bromeando, pero no tocaron el pastel de Liana.
Mientras atardecía, saldría a fumar un cigarrillo a las afueras del restaurante, apoyado contra la pared del mismo. Pensaba que mi tiempo en aquella villa se había agotado. Había tenido experiencias bastante agradables, pero siempre había otra isla y otra aventura esperándome en el horizonte.
- NOTA:
Rida Sarwick
Hoja de personaje
Nivel:
(12/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel |
Creado por Liana Miér Sep 28, 2016 9:25 pm
De pronto aparecí en un castillo lleno tenryubitos caníbales, no sabía que pasaba, yo estaba amarrada y Rida a mi lado amarrado también, uno de los tenryubitos dijo que me iba a comer y por alguna razón me llamo pastel y Rida gritaba— Si alguien toca un sólo centímetro de est…..— Me comienzo a levantar y me di cuenta que era un sueño, bostezo, estaba toda despelucada y además llena de baba, pero huelo algo, comienzo a seguir mi olfato y cuando me doy cuenta hay una torta gigante en frente de mí, era hermosamente ¡GRANDE! Comienzo a comerla mientras noto algo, noto que Rida no estaba.
Veo a varios lados y no lo veo, pienso ¿será que se fue?... no creo que se haya ido, agarro el pastel con mi mano completo y me lo como de un tirón, todos los pueblerinos fans de los glúteos de musculitos estaban sorprendidos y yo con mi cara de detective (Tenia lentes,una lupa, bigotes y un sombrero) comencé a buscarlo, dije seguro si hay gente aquí él está escondido, ya que estos son unos pervertidos que lo único que quieren es glúteos.
Veo un anciano y le digo que si sabía dónde estaba su ídolo gluteal, el señor anonadado me responde – ehh… ¿te refieres a tu amigo? ¿es un poco incomoda esta pregunta?... pero si es el está afuera-.
Salgo sigilosamente, con intenciones de que no me vea, hago mil volteretas, me escondo en mil lugares y de repente me encara.
-Musculitos, pensé que te habías ido, vaya pelea la de hoy ¡WOU!... grito mientras estiro mis manos hacia el aire, me acomodo el bigote falso y exclamo con mucha seriedad sentándome en el piso… ¿al final alguien te toco el culo?.
Veo a varios lados y no lo veo, pienso ¿será que se fue?... no creo que se haya ido, agarro el pastel con mi mano completo y me lo como de un tirón, todos los pueblerinos fans de los glúteos de musculitos estaban sorprendidos y yo con mi cara de detective (Tenia lentes,una lupa, bigotes y un sombrero) comencé a buscarlo, dije seguro si hay gente aquí él está escondido, ya que estos son unos pervertidos que lo único que quieren es glúteos.
Veo un anciano y le digo que si sabía dónde estaba su ídolo gluteal, el señor anonadado me responde – ehh… ¿te refieres a tu amigo? ¿es un poco incomoda esta pregunta?... pero si es el está afuera-.
Salgo sigilosamente, con intenciones de que no me vea, hago mil volteretas, me escondo en mil lugares y de repente me encara.
-Musculitos, pensé que te habías ido, vaya pelea la de hoy ¡WOU!... grito mientras estiro mis manos hacia el aire, me acomodo el bigote falso y exclamo con mucha seriedad sentándome en el piso… ¿al final alguien te toco el culo?.
Liana
Hoja de personaje
Nivel:
(25/100)
Haki:
Haki | Kenbun | Busou | Haou | Nivel | 2 |
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